La Gran Aventura (Percival x Nasiens)

8

-O tendré que matarlos-

Nasiens al escuchar esas palabras se dispuso a sacar sus armas para defenderse ante un ataque de aquella mujer quien había sacado una espada dentro del paraguas que cargaba.

-No queremos pelear contigo- decidió hablar Nasiens para evitar una pelea completamente innecesaria.

-¿Ese caballero rojo los ha enviado?- les pregunto Anghalhad totalmente desconfiada de aquellos chicos.

-¿Caballero rojo? No conocemos a ninguno con esas características solo hemos venido y accidentalmente encontramos está extraña pieza- fue la respuesta de Nasiens y Anne solo entre cerró sus ojos.

-Como sea- Anne rodó los ojos -solo entréguenme ese fragmento lo esconderé en otra parte- exigió con enojo. No quería que esa pieza cayera en manos equivocadas o pasaría algo terrible y no quería eso.

-Toma- se lo extendió Percival sin ninguna duda y Anghalhad abrió los ojos sorprendida. Eso fue muy fácil

¿Cuál era la trampa?. Pensó en cuanto lo tomó entre sus manos. Nadie sería tan tonto como para devolverle algo que podía ser valioso sin pedir algo a cambio.

Anne entre cerró sus ojos para usar su poder en aquellas personas.

Tú escondes un gran secreto. Pensó en cuanto su mirada se fijó en Nasiens quien no dejaba de verla por si quería atacarlos.

Tu estás lleno de secretos. Pensó al ver aquel zorro que se encontraba con el ceño fruncido. ¡Espera! ¿Un zorro con secretos?. Negó con la cabeza volteando a ver al chico de estatura pequeña y cabello verde quien la miraba con una sonrisa.

Y tú no debes de ser la excepción. Pensó, pero grande fue su sorpresa que este solo irradiaba luz. ¿Qué demonios? No tiene sentido, debe de ser imposible que haya alguien que no guarde ningún secreto o mentira.

-Nosotros no encontramos aquel fragmento, fueron estos pequeñines- aclaro Percival con unos cuantos MiniPercival volando a su alrededor.

¿Pero que son esas criaturas?. Se pregunto Anne completamente curiosa y estaba dispuesta a tocar a aquellos seres si no fuera porque recordó el porque estaba aquí.

-Con eso aclarado espero que ya no nos veas como tú enemigo-

Nasiens le extendió la mano en forma de saludo y ella solo ignoro completamente avergonzada. No iba a admitir su error. A veces odiaba su propio orgullo.

-Niña Mimada ¿De que caballero hablas exactamente?- preguntó Sin sin rodeos.

-¿Niña mimada?- se indigno por completo Anne ante las palabras de aquel zorro -¿Cómo te atreves? Soy una dama- a este punto ya estaba ignorando el hecho de que el zorro se encontraba hablando.

-¡Lady Anghalhad!- el grito de una de sus sirvientas a lo lejos la hizo entrar en pánico y le dió aquel fragmento a Percival.

-¡Tienes que esconderlo!- pidió de forma inmediata Anne -y por favor no se lo muestren a nadie más- les pidió a los tres con la mirada -¡Y menos a Ironside!-

Tan pronto como dijo esas palabras salió corriendo para encontrarse con aquella sirvienta que la estaba buscando y le dedicó una sonrisa tratando de disimular que no había pasado nada.

Percival frunció el ceño al escuchar aquel nombre. La persona que estaba buscando se encontraba aquí.

-¿Quienes eran esas personas?-

-Simples viajeros perdidos- respondió Anne sin apartar la vista del camino.

Pero aquella sirvienta no dejo de observar de reojo aquella pieza que Percival había escondido en su capa.