Mientras Ginny ordenaba la cocina posterior al almuerzo, tocaron la puerta tres veces.
No era algo precisamente extraño, sobre todo los fines de semana sus hermanos invitaban a alguien a la casa o se quedaban afuera sin varita.
Dejó lo que hacía para ir a abrir, pero no se esperaba aquella visita. Pansy estaba parada en frente, con una cara preocupada, insegura. Algo que Ginny jamás había visto en la chica más grosera y popular que conocía.
—Lo siento, no quiero galletas de exploradora. —Ginny entrecerró los ojos.
—La ofensa más grande que me han hecho: ñoña y americana. Muy graciosa... no, vengo a ver a Ron. —ella se cruzó de brazos.
—Está enfermo.
—No es cierto.
—Sí lo es. —contraatacó la pelirroja.
—Escucha, ya lo sé todo.
Ginny se enderezó y la miró de lado.
—¿De qué hablas?
—Sé que Ron es un vampiro, y que el hijo de Malfoy lo transformó. Bebió una poción de amor para engancharse de él, y si no quieres que tu hermano esté atado a un sociópata, me dejarás entrar —Pansy puso la mano en el marco de la puerta y Ginny volvió a entrecerrar los ojos—. Quiero ayudarlo... —insistió, más seria—. De verdad.
La pelirroja suspiró y la dejó entrar.
—Es raro —le dijo mientras subían las escaleras—. Toda la vida te ha odiado... toda la vida se han peleado, y ahora...
—A veces así se coquetea, la forma tradicional es incomoda. Además, tienes que admitir que Ron se enoja chistoso.
Ginny no pudo evitar reír. Tomó aire para decir algo, pero fue interrumpida.
—¡No me enojo chistoso! —reclamó Ron dos pisos más arriba.
—Saltó lejos el maní... —Ginny lo miró hacia arriba.
—Sube sola. —le dijo a Pansy antes de volver a encerrarse.
Ambas se miraron y Ginny le indicó el camino con la cabeza. Pansy subió rápido, sintiendo que algo la perseguía, pero solo era el miedo de que alguien más la viera.
El cuarto de Ron estaba oscuro, las persianas cerradas aún dejaban espacio para que la luz del día se colara por los costados, dejando ver lo que parecían ser pequeños huesos en el piso, y ahogó un grito cuando un pequeño ratoncito salió chillando de la habitación. Ron estaba de espaldas hacia un estante con adornos y figuras, lo que la puso nerviosa. La puerta se cerró sola detrás de ella, y daba miedo, la situación la ponía nerviosa. Pero solo era Ron... y él estaba asustado también.
Quizás incluso, Ron estaba más asustado de ella que ella de Ron.
—Ron...
Él se volteó y la miró casi horrorizado. Se veía pálido, demacrado, pero... muy hot.
—¿Estás embarazada?
—¿Qué? —Pansy no pudo evitar soltar una carcajada—. ¡Claro que no!
—Lo estás...
—¿De qué hablas? No, me llegó mi periodo esta mañana... adelantado incluso.
—Puedo olerlo.
Su sonrisa se borró al instante.
—¿Qué...? ¿Cómo olerlo?
—No sé cómo explicarte. Ginny en su periodo tiene un olor, Astoria Greengrass tiene el mismo, tú... estás embarazada.
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Vampires Will Never Hurt You
FanfictionEn la casa de los Malfoy se celebra una gran fiesta de Halloween cada año. La primera vez que Harry asiste, cambiaría su vida y la de sus amigos para siempre.