❝𝐄𝐟í𝐦𝐞𝐫𝐨❞ ☯ ┆ Tom K.

01

Escuchaba un pequeño ruido sonar por mis oídos, mi cuerpo se movía, no, se sacudía, alguien me sacudía.

"Abigail, despierta ya, es cambio de hora." Escuche la voz de una compañera de clase, por lo que mis ojos se abrieron y mi cabeza se levantó de la butaca, observando a mi alrededor.

"¿Y Sasha?" Fue lo primero que se me ocurrió preguntar, mi amiga no estaba por ninguna parte, no la encontraba, y mucho menos se había preocupado en despertarme.

"Ella se fue hace rato, se fue con Karla y Fernanda, pensé que te había dicho."

"No... ella no... olvídalo, vámonos, y gracias por despertarme..."

Cindy solo asintió y me ayudo con mi mochila, la cargo en sus hombros y se adelantó, yo tallaba mis ojos adormilados, saliendo del salón choque con alguien, por lo que casi tropezaba, pero esa persona me sostuvo.

"Fíjate idiota, llegando tarde a clases y chocando conmigo, tonta." Al escuchar su voz supe quién era, simplemente lo ignoré y seguí con mi camino.

"A mi madre no le gustara saber de esto, Abby." Retrocedí para acercarme a él y apuntarlo con mi dedo.

"Piérdete Nicolas, no me importa si le dices a nuestra madre, metete en tus asuntos." Dije enojada mientras me acercaba a él.

"Cálmate hermanita... eres una paranoica" Dijo bromeando.

Decidí no discutir con él y volví a caminar hacia mi rumbo, odiaba a mi hermano, siempre me hacia la vida imposible, y mi madre tenía favoritismo hacia él, lo que significaba que ella siempre estaba en mi contra.

Había perdido de vista a Cindy, la busqué con la mirada por todas partes, no la encontré, se me había olvidado cual era la clase que tocaba en estos momentos, así que no podía hacer nada.

Me metí por un pequeño lugar algo alejado para poder llegar más rápido con un maestro que me dijera los horarios, y con lo que me encontré no fue nada agradable, no podía ver mucho por la mínima iluminación que había dentro, pero por lo que suponía, era una pareja besándose, y al parecer muy acalorados, la situación se había vuelto demasiado incomoda, así que simplemente me coloque el gorro de mi suéter y continue caminando, pasando desapercibida.

Finalmente llegue al área de maestros, me quite el gorro y camine hasta allá, pero de nuevo, alguien se atravesó en mi camino.

¿Tan difícil era ir a una sala de maestros?

"¿Amor?, ¿Qué haces fuera de tu salón?" Me quede helada al escuchar la voz de mi pareja, sus manos sostenían suave pero firmemente mis caderas.

"¡C-Chris! Que sorpresa, amor... yo iba con un maestro, ehm... olvide mi horario." Dije apenada, el asintió con compresión y tomo mis manos entre las suyas, dándome una pequeña cajita.

"Ya veo, si ese es el caso, yo tengo tu horario de emergencia, toma, corazón, no lo pierdas." Sonrió y beso mi mejilla antes de soltarme. "Espero te guste tu regalo, hoy cumplimos un año de ser novios."

Se me había olvidado por completo.

"¡C-Claro!, feliz aniversario, más al rato te doy tu regalo. " Sonreí con discreción y tomé el horario en mis manos para correr a mi salón, por suerte Cindy ya tenía todo planeado y no me regañaron por llegar tarde, sin embargo, Sasha no se había preocupado por mí en lo mínimo, pero decidí no insistir en ese tema, ella igual podía tener más amigas.

Me senté en el único lugar libre que había, junto a el niño rarito, ehw. Pasaron las horas, estaba algo cansada, pero por suerte ya había acabado con todos mis trabajos, gracias al cielo el niño se había retirado por problemas de salud y Cindy se había sentado a mi lado, cosa nol me disgustaba en lo absoluto.

Jamás me había tomado el tiempo en platicar con ella, pero era bastante agradable, y por lo visto, se sentía atraída hacia mi hermano.

Finalmente, la clase acabo y de nuevo era cambio de hora, por lo que salí del salón y Christofer ya estaba esperando fuera de este en su teléfono. A los pocos minutos mi hermano apareció nuevamente frente a nosotros dos, había alguien junto a él, pero no le tome importancia, ni lo mire, Chris y Nicolas charlaban de algo de un proyecto sobre su clase, ambos eran mayores que yo por dos años, Chris aun me sostenía de mis caderas mientras ambos reían.

"Bueno, ya me voy, cuida a tu noviecita, que se salta las clases." Mi hermano dijo eso antes de irse junto con la persona desconocida, Christofer se giró hacia mí y volvió a besar mi mejilla.

"No te saltes las clases, cariño, no quiero que te metas en problemas, ¿Bien?, nos veremos en un rato." Me soltó y se fue rumbo a su salón, al igual que yo, camine tranquilamente mientras buscaba cual era mi otra clase, así que camine hasta encontrarla.

Por suerte, el profesor no había llegado, Cindy me había guardado un espacio al lado suyo para que me sentara, camine hacia ella y tome asiento, dejando mis cosas a un lado.

Sasha se acercó a mí, ella se paró frente a mí y hablo con su mirada en mí. "Abigail, ¿podemos hablar?" Asentí, me levante de mi silla y me pare al lado de ella.

"¿Estas enojada?"

"Eh... ¿No?" Respondí confundida.

"¿Entonces por qué te alejas?" Mi cara de confusión se volvió en una de incomodidad, no se de que me reclamaba si ella era la que me excluía.

"¿Alejarme?, simplemente me separe por que estabas más feliz con Karla y Fernanda, yo también puedo tener más amigas."

"Dios mío, eres una dramática Abigail, olvídalo, ya será tu problema si te alejas." Dijo enojada y se fue. ¿Ahora era mi culpa?

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Por fin era la hora de salida, me estaba despidiendo de mi pareja cuando Nicolas apareció de la nada y volvió a interrumpirnos, era estresante.

"Vámonos, tonta, mi mama se enojará si llegamos tarde" Me jalo del suéter y Christofer se quedó como perrito esperando por su dueño, comenzaba a molestarme por la actitud de mi hermano. "Ah, y mi amigo nos acompañara."

"Como sea." Respondí molesta.

"¿Ahora estas enojada?, oh, ya se, querías besarte con tu noviecito, ¿No es así?" Respondió burlándose.

"Cállate."

Cuando llegamos a casa mi hermano se despidió de la persona desconocida y yo subí a mi habitación directamente, recordé de la cajita que Chris me había dado y la saque de mi mochila, sentándome en mi cama mientras la abría.

Dentro de ella había una pequeña cadena con una luna demasiada brillante, era muy hermosa.