13

32 1 1
                                    


Faltaban un par de días para regresar a la escuela, todas las vacaciones estuve evitando a Tom, ¿Porque?, no se.

Quería deshacerme de estos sentimientos, no quería simplemente enamorarme de un chico al que no le interesarían mis sentimientos en los absoluto.

Aunque probablemente sería diferente, y realmente no se si esté enamorado de mi, pero lo dudo, ¿Tom Kaulitz enamorado de una chica?, Pfff, debe de ser una broma.

Mis pensamientos fueron eliminados en el momento en el que escuché la puerta de mi casa sonar, alguien estaba llamando.

Suspiré y bajé las escaleras, me acomodé el cabello y abrí la puerta, que sorpresa...

— Abby... Uhm, eh... Hola, ¿Estás bien? — Me preguntó Tom, se veía nervioso, evitaba verme a los ojos.

Me alegraba que estuviera aquí, pero por otra parte, ¿Porque carajos tenía que aparecer?

— Uh, si, si estoy bien, ¿Que haces aquí?

— Bueno, hace semanas no me contestas los mensajes y me preocupé.

— Ah, eso... Es que, ahmm, pues yo he estado suuuper ocupada. — Arrugué la nariz, no sabía mentir, eso era cierto.

— ¿Ah, si? — su tono se volvió juguetón. — Entonces supongo que no estás mintiendo, ¿Verdad?, digo, porque tú nariz está arrugada.

Lo miré, cubrí mi nariz y me quejé.

— Aghh, te odio.

— No, me amas.

Me quedé en silencio, supuse que lo decía bromeando, pero me senti... Extraña.

— Bueno, ¿Solo a eso venías? — pregunté mientras me recargaba en el marco de la puerta.

— Ah, si y no, aparte te venía a devolver maquillaje que Bill tomó. — rió mientras me entregaba una bolsita.

— ¿Bill me robó mi maquillaje? — pregunté sarcástica.

— Según me dijo que se lo habías prestado.

— Si, se los preste, menso. — Tom me miró y sus mejillas se pusieron rojas.

— Entonces pasé vergüenza a lo menso, genial.

Reí suavemente mientras ponía la bolsita dentro de la casa.

— Igual quería hablar contigo, sobre lo que dije ese día. — De tan solo recordarlo, me ponía la piel chinita, por suerte, cada que mi madre o mi hermano llegaban, era en la noche y me hacía la dormida.

Los evitaba en todo momento, porque sabía que ambos se enojarían.

— Emm, eso, ¿Dime?

— Bueno, ya me había disculpado ese día, pero... pero no sentí que me hayas perdonado de verdad, y aparte de que no me respondías.

Dios mio, quería olvidar mis sentimientos, y en ese momento, estaba el amor de mi vida frente a mi, disculpándose.

— Está bien, no te preocupes.

— Si me preocupo, Abby. — El pasó a mi casa, tomando mi mano y llevándome al sillón.

Joder, este chico iba a matarme de amor.

— Eres mi amiga, y sabes que puedes contar conmigo siempre, probablemente la cagué al decir eso, pero prometo que lo solucionaré, lo menos que quiero es que te enojes conmigo. — Decía, pasando un mechón de mi cabello detrás de mi oreja, y mientras continuaba hablando, acariciaba mi mejilla.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 02, 2024 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

❝𝐄𝐟í𝐦𝐞𝐫𝐨❞ ☯ ┆ Tom K.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora