❝𝐄𝐟í𝐦𝐞𝐫𝐨❞ ☯ ┆ Tom K.

09

Tome algo de aire, el timbre sonó, por lo que comenzaba el cambio de hora, tomé mis cosas y las guardé en mi mochila, Cindy me esperaba fuera del salón, mientras que yo tropezaba por culpa de una chica que me había puesto el pie.

— Fíjate por dónde caminas. — Me dijo mientras reía.

— Allison, no seas así con la gente. — Decía otra chica, bajita, mientras me ayudaba a levantarme. — Disculpala, ella suele ser así, mi nombre es Estela.

Asentí mientras sacudía mi pans y me levantaba. Las miré por última vez y camine fuera del salón, junto con Cindy.

— Ellas me caen muy mal. — Decía mientras miraba su teléfono.

— Entendible.

Mientras ambas íbamos caminando, nos separamos por un momento, pues ella se fue a su casillero y yo al mío, donde estaba Tom arreglándose no se que cosa.

— Abichuela, ¿Ya terminó tu clase? — Preguntó mientras buscaba algo dentro de su casillero.

— Mjm. — Abrí mi casillero, guardando libretas y libros y sacando unos que ocuparía para mí siguiente clase.

Cerré mi casillero, Tom igual cerró el suyo y se acercó a mi, besando mi frente.

— Te veré luego, ¿Vale? — Decía con una sonrisa mientras acariciaba mi cabello.

— Uhm, bueno, como quieras.

El me dió una última sonrisa y corrió para alcanzar a una peliroja alta, estaba de espaldas, por lo que no pude ver su rostro.

Medí cuenta que sería otra de sus ligues, así que lo ignoré y camine a mi otra clase, pero ví como todos no entraban al salon y se iban a otro lado, todos separados.

Vi a la directora salir de nuestro salón y rápidamente me escondí, al parecer la maestra no había ido a dar la clase y nos estaban esparciendo entre otros grupos.

Cindy logró verme, pero no dijo nada y continuó con su camino. Suspiré con alivio mientras retrocedía viendo al frente.

— Abichuela. — Sonó detrás de mi, lo que me hizo asustarme, era Tom quien me había asustado.

— Menso, tarado, baboso, me asustaste estúpido. — Dijo con molestia mientras golpeaba suavemente su hombro.

El se rió a carcajadas mientras tomaba mi mano, deteniendo mis golpes.

— Eres una asustadiza, ¿Que estás haciendo aquí escondida?,

— Cállate o la directora me verá.

— Uh... Con que escondiendote de la directora, ¿Eh? — Dijo burlón mientras tomaba suavemente mi mano, sonrojado e indirectamente.

— ¿Que haces? — Pregunté, el quitó su mano y la pasó a su nuca.

— N-Nada, ven, sígueme, te mostraré dónde te puedes esconder, vamos.

Lo seguí mientras el caminaba entre los callejones de la universidad, hasta que llegamos a unas pequeñas canchas abandonadas, subimos hasta las gradas, que tenían paredes pequeñas.

Nos sentamos ahí, eramos casi imposibles de ver, me sorprendió que aún estuviera este lugar, aún así de que ningún alumno viniera para acá.

Me dije en mi horario, al parecer serían 3 horas las que tenía con esta maestra.

Cindy me mandó un mensaje, que decía "Le dije a la directora que no viniste, así que escondete muy bien." Agradecí mientras guardaba mi teléfono, observé a Tom como Llevaba un cigarro a su boca y lo encendía, inhalando el humo y exhalandolo segundos después.

Me recargué en la pequeña pared mientras miraba el cielo, aburrida.

Comenzó a llover, por suerte, teníamos una pequeña techumbre, pero aún así, Tom no se movió, comenzó a hacer un poco de frío, temblé un poco y abracé mis piernas, buscando calor.

Tom notó eso y se quitó su chaqueta, poniéndomela, acercándose a mi y rodeando mi hombro con su brazo, aún con su cigarrillo en la boca.

— Te contaré sobre Sasha. — Dijo mientras sacaba su cigarro de la boca y me lo ponía a mi en mi boca.

Lo miré con confusión y me sonrió, mirándome.

— Sasha, al principio, era linda, ¿Sabes?, pero yo solo la quería para un rato, comenzamos a salir, hasta que conocí a Christopher, tu ex. Fuimos buenos amigos, pero todo eso cambio cuando el conoció a Sasha, en ese entonces, mi novia.

Lo escuché atentamente, mientras el hablaba, yo inhalaba el humo del cigarro y lo exhalaba.

— Pero después veía como Christopher y Sasha se acercaban más y más, hasta que lo encontré besandose, me dió rabia y comencé una pelea, me dieron un descanso de una semana por hacer eso, y cuando regrese a la escuela, Sasha y Christopher ya eran novios, ninguno de los dos me hablaba, solo vivían en su mundo de "enamorados".

Me miró fijamente mientras me quitaba el cigarro y se lo ponía en sus labios.

— Te recomiendo que no te juntes con ellos dos, son unos hipócritas. — Me miró y sonrió con picardía. — ¿Alguna vez te han pasado el humo por la boca?

— Que.

El río a carcajadas mientras tomaba mi mentón y se acercaba para besarme profundamente.

Sentí como el humo pasó por mi boca, su beso se intensificó, paso su lengua dentro de mi boca para buscar la mía.

Su mano viajó a mi cintura mientras la acariciaba en círculos.

Nuestro momento fue interrumpido por una chica baja pelinegra con pecas, que al parecer buscaba a Tom.

El se separó de mis labios, pero su mano continuó ahí, el miró a la chica y sonrió.

— ¿Se te perdió algo, bonita? — decía mientras quitaba su mano de mi cintura y guiaba toda su atención a la chica.

— Tom... Quería preguntarte si podríamos pasar el rato, ya sabes.

— Claro, nena, solo dame un momento. — sonreía mientras volvía a mirarme y acariciaba mi cabello. — Te veré después, ¿Si?

El se pusó de pie y tomo la mano de la chica, llendose entre la lluvia.

Me di cuenta que Tom había olvidado su chaqueta, pero sinceramente, tenía frío.

Sentí un pequeño pinchazo en mi corazón, no sabía por qué, pero lo sentí cuando la chica se fue con Tom. Decidí ignorar ese pinchazo y miré la pulsera que Tom me había comprado.

Me recosté en la pared, perdí suavemente el conocimiento, mis párpados pesaban, y poco a poco, fui quedándome dormida.