Eclipse | SeongJoong

uno

-Hey... - escucha por tercera vez, lo que le hace abrir los ojos, siendo lo primero que ve el destello casi cegador del sol el cual por instinto le hace entrecerrar los ojos sin poder divisar bien a la persona de enfrente. - Llevas mucho tiempo acostado ahí ¿No te da miedo sufrir cáncer de piel por culpa del sol?

-¿Quién eres tú? - solo se limita a contestar.

- Un gusto, soy Hongjoong. Presidente estudiantil, y tu, Seonghwa de último grado, no deberías estar aquí a las horas de clases.

"Lo que me faltaba." Pensó el mayor.

Planeaba saltarse la aburrida y tortuosa clase de filosofía mientras tomaba una siesta en el tejado, aprovechando que estaba nublado. Pero eso ya no se podrá, ya que ahora tiene al presidente estudiantil delante de él exigiéndole volver a clases y como por arte de magia había salido el sol y ya su piel estaba comenzando a arder. Los martes siempre serán una tortura para él.

-Mi clase fue cancelada. -dijo lo primero que le cruzo por la mente para tratar de librarse de ese chico que no media más de 1.60.

-No, no me han informado de ninguna clase cancelada el día de hoy.

Esto iba a ser un trabajo difícil para Seonghwa, debió simplemente no ir a la escuela y listo.

Ya rendido decide levantarse y caminar con rumbo a su salón de clases con una pequeña pulga detrás de él.

-No tienes que seguirme sabes. - responde al momento de bajar los escalones y darse cuenta que en efecto, Hongjoong lo estaba siguiendo.

-Simplemente tengo que asegurarme de que entres a tu clase y no te vayas a otro lado en el momento en que te pierda de vista.

-Acosador. -dice en un murmuró y sigue caminando sin darle más importancia al contrario.

Luego de llegar al salón y asegurarse de que el mayor entrará, Hongjoong se dio la vuelta dispuesto a ir a la sala del consejo estudiantil para terminar su papeleo y asistir a su siguiente clase.

Al entrar a la sala, rápidamente se lanza hacia el sofa colocando su pequeña almohada en forma de luna en su rostro y poder chillar y gritar (con moderación) todo lo que pudiera, ganándose una mala mirada del vicepresidente quien aún estaba en la habitación.

-¿Y ahora que te dio?

Hongjoong rápidamente se acomoda en el sofa abrazando fuertemente a su almohada.

-Adivina con quien hable hoy. - habla con la felicidad saliendo de sus poros.

-No lo se, ¿Con todo el mundo? Hermano, eres el presidente escolar.

-¿Ni siquiera puedes ponerle un poquito de ganas?

El contrario simplemente hizo un ademán con los hombros y siguió escribiendo en su libreta.

-Mingi... Hable con Seonghwa.

El mencionado inmediatamente dejo sus actividades actuales para poner toda su atención en su mejor amigo.

-¿En serio? ¿Hablaron casual o solo lo reprendiste?

-Lo reprendi... ¡Pero, hablamos más de dos frases! -este estruja nuevamente su almohada para intentar liberar su emoción. Mingi observó a Hongjoong con una mezcla de incredulidad y diversión. No era la primera vez que lo veía emocionarse por algo relacionado con Seonghwa, pero esta vez parecía diferente. Parecía que su amigo estaba en una especie de nube de felicidad solo por haber intercambiado algunas palabras más de lo habitual con él.

-Amigo, relájate un poco -dijo Mingi, levantándose del escritorio para acercarse al sofá y sentarse a su lado-. ¿Estás seguro de que no lo asustaste?

-¡No fue tan grave! -protestó Hongjoong, sentándose con las piernas cruzadas sobre el sofá, aún abrazando su almohada-. Sólo... lo encontré en el tejado y le dije que no debería estar ahí. Luego lo acompañé a su clase. No es tan malo, ¿cierto?

Mingi lo miró fijamente, tratando de descifrar si su amigo realmente creía que eso era "no tan malo". Sabía que Hongjoong tenía una forma muy particular de interactuar con la gente, especialmente con aquellos por los que sentía algo más que simple interés amistoso.

-Si tú lo dices... -murmuró Mingi, rascándose la cabeza-. Pero, ¿por qué no intentas hablar con él sin la excusa de ser el presidente estudiantil? Ya sabes, tener una conversación normal.

Hongjoong hizo una mueca, como si la idea fuera completamente extraña para él.

-¿Y qué le voy a decir? "Hola, soy Hongjoong, y aunque soy el presidente estudiantil, me encantaría conocerte mejor porque me gustas desde hace tiempo". -Imitó su propia voz con exageración-. Eso suena ridículo.

Mingi se echó a reír.

-Bueno, no tienes que decirle todo de una vez. Tal vez podrías empezar por preguntarle sobre algo que le guste. ¿Sabes si tiene algún hobby o algo así?

Hongjoong se quedó en silencio un momento, considerando la idea. Recordó las pocas veces que había visto a Seonghwa fuera de clases; solía estar solo, pero a veces lo veía con un cuaderno de dibujo, concentrado en sus trazos.

-Creo que dibuja -dijo finalmente, como si hubiera descubierto algo importante-. Lo he visto con un cuaderno varias veces.

-Perfecto. -Mingi sonrió-. Entonces la próxima vez que lo veas, podrías preguntarle qué dibuja. Es una manera fácil de empezar una conversación.

Hongjoong asintió lentamente, procesando el consejo de su amigo. Seonghwa siempre había sido un enigma para él, alguien que parecía distante y misterioso, pero ahora que había logrado romper, aunque fuera un poco, la barrera del silencio, sentía que tal vez podría acercarse un poco más.

-Lo intentaré -dijo, más para sí mismo que para Mingi.

-Eso es lo que quiero oír. -Mingi se levantó y le dio una palmada en la espalda-. Y mientras tanto, no te olvides de tus responsabilidades, señor presidente. No quiero tener que hacer todo el trabajo yo solo.

Hongjoong le lanzó una mirada de exasperación, pero no pudo evitar sonreír. Aunque la perspectiva de hablar con Seonghwa fuera emocionante, todavía tenía un montón de papeleo por delante.

Mientras Mingi regresaba a su escritorio, Hongjoong se quedó sentado en el sofá, acariciando su almohada en forma de luna. Su mente ya estaba ocupada planeando su próxima interacción con Seonghwa, imaginando cómo podría hacer que esa pequeña conversación sobre dibujo se convirtiera en algo más.

Quizás, pensó, los martes no tenían que ser tan malos después de todo.