𝐎𝐧𝐞𝐒𝐡𝐨𝐭𝐬 𝐝𝐞 𝐁𝐨𝐤𝐮 𝐧𝐨 𝐇𝐞𝐫𝐨 𝐀𝐜𝐚𝐝𝐞𝐦𝐲

7 ᴍɪɴᴜᴛᴏꜱ ᴇɴ ʟᴀ ᴜ.ᴀ. ᴇxᴛᴇɴᴅᴇᴅ ᴇᴅɪᴛɪᴏɴ 🩷

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Advertencia: un poco de Lemon.
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La fiesta en la sala común estaba llegando a oídos de varios alumnos de la academia. Por lo que fueron aumentando el número de personas presentes en la sala común de la clase A.

Se unió la clase B y varios otros amigos de distintas especialidades. Algunos aparecieron solos como Mei Hatsume y Nejire Hado, otros fueron obligados o arrastrados por los demás, como Shinso Hittoshi y Tamaki Amajiki.

Cuando llegó la clase B era el auge de la noche, los chicos trajeron más bocadillos y rápidamente todos se unieron a la celebración. Jirou subió un poco el volumen para que la fiesta continúe.

Habían pausado el juego de 7 minutos en el paraíso hasta que ya estén todos cómodos y reunidos. Y además para que Mina y Nejire agreguen los nombres de los recién llegados.

La estaban pasando bien, el ambiente era muy bueno. Y ahora que estaban todos en sintonía, Ashido propuso seguir jugando. Obviamente la primera en apoyar la idea fue Nejire y luego todas las chicas apoyaron a la pelirosa.

Varios se negaron a jugar, como Bakugo (otra vez), Shinso y Tamaki que estaba que se desmayaba en cualquier momento. Pero Mirio estaba ahí para evitarlo.

— ¿Todos saben cómo se juega no es así? — preguntó Ashido a los no tan recientes llegados.

Algunos murmuraron un Sí, otros un rotundo No.

— Es sencillo, nuestra hermosa amiga ____ va a sacar un papelito de esta bolsita. Cada papelito tiene el nombre de alguno de los presentes y quien sea elegido... ¡Irá al armario por 7 minutos con ella! — explicó Mina, señalando el armario.

— ¿Otra vez empiezo yo? — te quejaste.

— Si gatita, ¡por favor! —

— Tendrás que hacer mi tarea por una semana. — sentenciaste antes de meter la mano en la bolsa.

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𝚃𝚊𝚖𝚊𝚔𝚒 𝙰𝚖𝚊𝚓𝚒𝚔𝚒

Sacaste la mano de la bolsa con el papelito que tenía el nombre de uno de los tres grandes. Lo buscaste con la mirada pero no estaba en ninguna parte.

— ¿Dónde está Tamaki? — preguntaste dándole a Mina el papel.

— ¡Aquí! — gritó Mirio. — ¡Vamos amigo, salió tu nombre! — animó el rubio.

El chico de cabello azul oscuro se había escondido en un rincón. Ver tanta gente lo estaba haciendo caer en la desesperación. Y ni hablar cuando escuchó que tenía que meterse en un armario con una chica. Casi se desmaya.

— N-no, Mi-mirio. No quiero. — las débiles protestas de Tamaki fueron ignoradas o no escuchadas por el rubio.

— ¿Esta bien qué obliguemos a Tamaki a esto? — preguntó Midoriya, preocupado.

— ¡Sí! ¡Le hará bien! ¡Tiene que aprender a convivir con personas! — exclamó Mirio, arrastrando a su amigo hasta el armario.

— Entonces... ¡____! ¡Al armario tu también! — gritó Mina.

No ibas a oponer resistencia pero aún así Mina y Nejire te escoltaron hasta aquella puerta.

— ¡Suerte Amajiki! ¡Ya verás que no es tan grave! — animó también Kirishima.

Tamaki se mantenía en silencio y con la mirada baja, con sus mejillas sonrojadas y una terrible expresión de incomodidad.

Nejire abrió la puerta y Mirio empujó a Tamaki dentro. Luego Mina te empujó a ti, provocando que choques con el, trastabillen y caigan al suelo del armario.