2. 𝚂𝚊𝚗𝚎𝚖𝚒 𝚂𝚑𝚒𝚗𝚊𝚣𝚞𝚐𝚊𝚠𝚊 𝚢 𝙾𝚋𝚊𝚗𝚊𝚒 𝙸𝚐𝚞𝚛𝚘

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Ahora pueden presenciar, a dos chicos, un albino alto y un azabache bajo. Eran Sanemi y Obanai, los cuales estaban en el futón de la casa de Obanai, teniendo sexo.

Cómo clara obviedad, Obanai siendo el pasivo de su "relación".

Obanai ahora estaba montado sobre Sanemi, saltando sobre su hombría y gimiendo de placer. Sanemi gruñía mientras sostenía las caderas del más bajo para que llegara lo más profundo posible.

Y así estuvieron, en diferentes posiciones y de más, teniendo más de dos rondas seguidas, hasta que ambos quedaron exhaustos.

En el momento en que terminaron, Obanai estaba acostado sobre el futón, aún desnudo. Sanemi se estaba vistiendo, mientras el azabache lo miraba fijamente.

—Oye, Shinazugawa. Hablo el más bajo, haciendo que el albino volteara a verlo. —¿Que te parece probar cosas nuevas?

Sanemi no pudo evitar levantar una ceja ante la proposición.

—¿De que diablos hablas?

—No me mal intérpretes. Hablo de coger a Giyuu. Dijo mientras se sentaba en el futón, aún con los fluidos del más alto corriendo por sus piernas.

Sanemi se le quedó viendo por unos segundos, pero al pensar en la idea sonrio, definitivamente sería divertido aprovecharse de el un poco.

—No sería mala idea, ¿Que tal mañana?

El menor asintió deacuerdo.

Sanemi de igual manera asintio antes de darse la vuelta y salir de la finca de Obanai e dirigirse a la suya propia.






Al día siguiente, Sanemi y Obanai estaban juntos, listos para ir a perturbar a Giyuu. Ambos se encaminaron rumbo hacia la finca del pilar del agua.

Cuando llegaron fueron recibidos por Giyuu, quien estaba confundido por su presencia. Los dos compañeros entraron sin dar explicaciones de por qué estaban ahí. Obanai entro primero y Sanemi cerró la puerta detrás de ellos.

Obanai tiró a Giyuu al suelo, haciendo que el azabache más alto soltará un leve quejido al caer contra la madera del piso.

Sanemi se acercó a ellos, mirando a Giyuu en el suelo, con una sonrisa marcada en su rostro.

—hey, Giyuu, Obanai y yo nos enteramos que tuviste sexo con Kyojuro hace tres días. Dijo el albino, Con un tono burlón.

—¿Realmente te gustó que te cogieran por el agujero?. Obanai también hablo, ambos chicos burlándose de Giyuu.

Sanemi se hincó para quedar a la altura del suelo dónde estaba Giyuu. Lo tomo por la mandíbula con algo de agresividad.

—¿Te gusta?  ¿Te gusta ser follado hasta ya no poder?. Sanemi le decía todo esto con un tono agresivo, y un rostro que mostraba clara diversión.

Giyuu solo se quedó callado, mirando a Sanemi con los ojos abiertos, sin saber que responder... Giyuu no entendía... ¿Que había de malo? El solo tuvo su primera vez...

Sanemi estaba empezando a desesperarse por el silencio de Giyuu, pero antes de que pudiera volver a hablar, Obanai bajo los pantalones de Giyuu, haciendo que el azabache mayor se sorprendiera y abriera aun más los ojos.

Sanemi miro lo que Obanai había hecho y sonrío, divertido ante la nueva vista.

Obanai abrió las piernas de Giyuu y paso un dedo por su entrada, jugueteando con ella y haciendo a Giyuu retorcerse. Sanemi rio divertido al ver la reacción de Giyuu.

—Esta un poco abierto. Dijo antes de mirar a Sanemi. —¿Se lo abrimos más?

Giyuu se asustó al oír sus palabras, estuvo apunto de protestar cuando Sanemi asintió.

—Si, no perdamos más tiempo. Obanai sonrió debajo de sus vendas.

Ambos compañeros se quitaron el cinturón y se desabrocharon el pantalón, quitándoselo y dejando expuesta la hombría de ambos hombres.

Giyuu se les quedo viendo a ambos, notando lo grandes que eran.

Obanai camino hacia el otro lado de Giyuu, quedando ahora, Sanemi del lado de las piernas de Giyuu, y Obanai del lado de su cabeza.

El albino en un movimiento rápido y brusco volteo al azabache alto para que quedará en cuatro. Obanai lo tomo por el cabello, obligandolo a qué alzara la mirada.

Sanemi admiro la vista que ahora tenía, sonriendo y manoseando a Giyuu descaradamente. Mientras que Obanai había metido dos o tres dedos dentro de la boca de Giyuu, obligandolo a chuparlos.

Sanemi jugaba con el trasero de Giyuu, manoseando lo y estirándolo con descares e indecencia. Sin importarle lo que el azabache alto sintiera.

Y sin algún tipo de lubricante, el albino sin previo aviso metió un dedo a la entrada de Giyuu, haciéndolo soltar un gemido audible ahogado por los dedos de Obanai.






Y así estuvieron, Sanemi preparo a Giyuu, metiéndole hasta cuatro dedos en su pequeña y suave entrada, haciendo a Giyuu soltar gemidos ahogados de dolor. Pero eso solo emocionaba más a ambos chicos.

Los dos sacaron sus dedos de Giyuu a la vez y... Sanemi introdujo su miembro hasta el fondo de la entrada de Giyuu, y Obanai, nuevamente lo obligó a alzar la mirada jalandolo del pelo y luego introdujo su miembro en la boca del ojiazul.

Sanemi y Obanai se estuvieron moviendo dentro de Giyuu, Sanemi en su entrada y Obanai en su boca, haciendo al pobre ahogarse en sus propios gemidos, incluso Giyuu sentía como dejaba de respirar.

Así siguieron los dos compañeros durante varias rondas, intercalandose las posiciones, con Obanai en la entrada de Giyuu y Sanemi en su boca. Haciéndolo varias veces y siendo cuando terminaban y se movían el único momento en el que Giyuu respiraba denuevo.

Incluso, hubo unas cuantas rondas dónde ambos compañeros estaban dentro de la entrada de Giyuu a la vez, haciendo al pobre azabache alto gritar de dolor y sollozar. Pero los chicos lo callaban, cuando estaban en esa posición, el que quedará viendo directamente hacia el frente de Giyuu lo besaba para callarlo, ahogandolo nuevamente.






Los compañeros dejaron a Giyuu destrozado en el suelo. Sollozando, incluso haciéndolo sangrar por su entrada, pero no le dieron mucha importancia a ese detalle, solo se vistieron y salieron de la finca de Giyuu.

Sanemi volviendo a casa como si no hubiera sucedido nada, y Obanai llendo hacia donde Mitsuri para recoger a Kaburamaru, el cual era perfectamente cuidado por la pelirosa.

Ambos actuando como si nada hubiera pasado, pues sabían que si Giyuu decía algo a algún otro pilar, no harían nada, incluso ese mismo pilar se aprovecharía de el en ese momento, así que no se preocupaban por su silencio.











¡ʜᴏʟᴀ! ¿ᴄᴏᴍᴏ ᴇsᴛᴀɴ? ¿ʟᴇs ɢᴜsᴛᴏ ᴇʟ ᴄᴀᴘ?

sᴏʟᴏ ʟᴇs ᴠᴇɴɪᴀ ᴀ ʀᴇᴄᴏʀᴅᴀʀ, ᴅᴇᴊᴇɴ ᴜɴ ᴄᴏᴍᴇɴᴛᴀʀɪᴏ ᴘᴀʀᴀ ʏᴏ sᴀʙᴇʀ ǫᴜᴇ ʟᴇs ɢᴜsᴛᴀ ʏ ᴇᴍᴘᴇᴢᴀʀ ᴄᴏɴ ᴇʟ sɪɢᴜɪᴇɴᴛᴇ ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ.

ᴇɴ ғɪɴ, ʟᴜᴋᴀ sᴇ ᴅᴇsᴘɪᴅᴇ

ʙʏᴇ, ʙʏᴇ~!

𝕍𝕚𝕠𝕝𝕒𝕔𝕚𝕠𝕟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora