Cómo era de esperarse, Kagaya se enteró de lo sucedido.
Mando un cuervo para mandar a hablar al Hashira agua.
Giyuu por otro lado, estaba nervioso al recibir la noticia, se puso su haori y se dirigió a la mansión Ubuyashiki.
Llegó y se sentó frente a Kagaya y sus dos hijas.
—Buenos días, hijo mío
Saludo el mayor, con voz suave y tranquilizadora. Giyuu se inclino ante el en forma de reverencia.
—Buenos días, maestro
Kagaya asintió con una ligera sonrisa y Giyuu se reincorporo de nuevo.
—Hijo mío, disculpa las inconveniencias de mi llamado, pero necesitaba hablar contigo sobre algo importante
Giyuu trago saliva, estaba nervioso por la plática que estaba apunto de tener, se sentía avergonzado, pero se trago sus nervios y solo dejo que todo fluyera, entre más rápido mejor.
—Ya podrías imaginar para que te llame, ¿Cierto? Es sobre tu última misión
Una gotita de sudor apareció en la frente de Tomioka.
—Me entere que dejaste vivir a un demonio, ¿Puedo recibir una explicación de lo que sucedió ahí?
—El demonio era muy fuerte y-
—No, no, no, no hijo mío... Dime la verdad
Interrumpió al azabache, haciendo que este volviera a tragar saliva. Espero pacientemente la explicación del ojiazul.
— Ese demonio... Me tuvo atrapado por un rato...
Ubuyashiki sonrió suavemente, realmente ya sabía todo lo que había sucedido, solo queriendo saber si el más alto sería capaz de contarlo.
— Hijo mío...
El nombrado reaccionó y lo miro.
— Ya lo sé todo, no hace falta que te contengas
En ese momento se le fue el alma a Giyuu, ¿Ahora que iba a pasar con el?
Kagaya hizo una seña con la mano, cosa causante de que tres Kakushis entrarán a la habitación. Giyuu los observo de reojo, algo confundido.
— Hijo mío, te dejaré pasar ese error solo por esta vez, pero con una condición
Giyuu lo miro confundido, pero se quedó callado y trago saliva, dejando que su superior hablara.
— Serás cogido por los Kakushi
La expresión del mayor se transformó de calma a algo sombrío, escalofriante, verlo así le causó un escalofrío al ojizul en la espalda.
Ubuyashiki dió una última sonrisa antes de que los Kakushis pusieran a Giyuu contra el suelo, empezando a sacarle la ropa frente a Kagaya y sus hijas.
El azabache ojizul se ruborizó un poco, teniendo la respiración agitada pero sin decir nada al respecto.
Pudo escuchar como uno de los Kakushis se desabrochaba el pantalón y se lo quitaba. Trago saliva nervioso y miro hacia arriba, notando la aún sonrisa de su superior.
— ahg...!
Soltó un quejido al ser penetrado de una escotada, seguido de varios gemidos ante las embestidas del Kakushi.
Pequeñas lágrimas de placer corrían por sus ojos hacia sus mejillas, la vergüenza lo inundaba, verse en ese estado frente a Kagaya y sus dos hijas lo avergonzaba, pero hizo mal, merecía ese castigo.
Siguió gimiendo y soltando quejidos placenteros, cerró sus ojos y empezó a dislumbrarlo a él.
Pero sus pensamientos fueron interrumpidos cuando el Kakushi lo alzó para sentarlo en su regazo, abriendole aún más las piernas para que se vea periféricamente el como su polla maltrataba el hoyo del azabache.
Los otros dos Kakushis se unieron, jugueteando y mamando ambos pezones de Giyuu, haciéndolo gemir más, y que un delgado hilo de líquido pre-seminal brotará de su protuberancia.
Se sentiría bien si no fuese por el hecho de que estaba siendo “castigado” frente a Kagaya y sus dos hijas, las cuales solo lo miraban fijamente, con la misma expresión sin emociones de siempre.
Giyuu lloraba y era cogido a la vez, sentía que estaba a punto de explotar, y así fue, se terminó liberando, arqueando la espalda y soltando un gemido más alto que los anteriores.
El Kakushi lo siguió embistiendo con dureza, llegando con profundidad al estar en esa posición.
El Kakushi se corrió dentro del azabache, haciéndolo arquear la espalda y volviendo a terminar.
Salió de el, dejando escurrir el líquido blanquesino hacia al suelo, los otros dos posicionaron a Giyuu en cuatro, quedando de lado a la vista de Kagaya y sus hijas.
Los otros dos Kakushis restantes se posicionaron uno frente a Giyuu y otro detrás de él.
El que estaba detrás del azabache tomo su caderas y se posiciono para entrar en aquel anillo de carne.
El que estaba frente, tomo la barbilla del ojiazul y la alzó, abriéndole la boca y posicionandose tambien para entrar ahi.
Los dos Kakushis se vieron entre si y luego a la vez entraron de una escotada.
Giyuu abrió los ojos ante la repentina escotada, soltando un gemido ahogado.
Los Kakushis empezaron a embestir con brusquedad a Giyuu, siendo succionados por este.
El azabache cerró los ojos, aún soltando lágrimas que corrían por sus mejillas.
Ambos siguieron, turnandose e intercalando posiciones, como Sanemi e Iguro en el segundo capítulo. Así hasta que se terminaron corriendo, uno en la entrada de Tomioka y el otro en su boca.
Ambos salieron de el, el Kakushi que estaba dandole por atrás salió con un pequeño hilo blanquesino mezclaron con un poco de un tono rojizo, mientras Giyuu escupía un poco de sangre por la boca.
— Muy bien, hijo mío, esto a concluido, te puedes retirar
Hablo Kagaya después de mucho tiempo.
— Un Kakushi te llevará con Shinobu para que trate alguna herida que te pudo haber causado.
Añadió, uno de los Kakushis vistió a Giyuu y lo cargo en su espalda, dejando que el azabache se despidiera de Kagaya y luego se retiraran.
ℒ𝓊𝓀𝒶 - 920
𝙳𝚎𝚜𝚙𝚞𝚎𝚜 𝚍𝚎 𝚖𝚒𝚕 𝚊𝚗̃𝚘𝚜 𝚓𝚊𝚓𝚊𝚓𝚊
𝙵𝚒𝚗𝚊𝚕𝚖𝚎𝚗𝚝𝚎 𝚕𝚘 𝚝𝚎𝚛𝚖𝚒𝚗𝚎, 𝚊𝚕𝚐𝚘 𝚜𝚊𝚕𝚒𝚘 𝚍𝚎 𝚊𝚑𝚒 𝚢 𝚗𝚘 𝚜𝚎 𝚜𝚒 𝚑𝚊𝚢𝚊 𝚟𝚊𝚕𝚒𝚍𝚘 𝚕𝚊 𝚙𝚎𝚗𝚊 𝚝𝚊𝚗𝚝𝚊 𝚎𝚜𝚙𝚎𝚛𝚊 (◞‸◟;)
𝙴𝚗 𝚏𝚒𝚗, 𝙻𝚞𝚔𝚊 𝚜𝚎 𝚍𝚎𝚜𝚙𝚒𝚍𝚎
𝙱𝚢𝚎, 𝚋𝚢𝚎~!
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𝕍𝕚𝕠𝕝𝕒𝕔𝕚𝕠𝕟
Hayran Kurgu𐐛օ𝓼 𝚙ⅈ𝘐ɑ𝔯𝖊𝓼 ɑ𝘣𝗎𝓼ɑ𝖓 𝘵ɑ𝖓𝘵օ 𝒹𝖊 ɢⅈ𝑦𝗎𝗎 𝒒𝗎𝖊 𝘐օ vɑ𝖓 𝒹𝖊𝓰𝖊𝖓𝖊𝔯ɑ𝖓𝒹օ 𝚙օcօ ɑ 𝚙օcօ... ¿𝚀𝗎𝖊 𝚙ɑ𝓼ɑ𝔯ɑ cօ𝖓 𝖓𝗎𝖊𝓼𝘵𝔯օ 𝘵ɑ𝖓 𝒒𝗎𝖊𝔯ⅈ𝒹օ 𝚙ⅈ𝘐ɑ𝔯 𝒹𝖊𝘐 ɑ𝓰𝗎ɑ?