¿Qué hace Serkan?

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Eda llego ese día a la empresa y le pareció raro cómo semanas anteriores, era martes y Serkan desapareció, en un horario donde solían abarrotarse de trabajo él no estaba. Antes de poder ir a la sala de juntas fue abordada por la dulce presencia de Piril.

- ¿Cómo estás? – Le pregunto su amiga

- Bien, ¿Y mi sobrinito? –

- Jugando, no patea pero se mueve un poquito, pero no estas bien, no me mientas. ¿Qué pasa? –

- ¿Podemos hablar en otro lado? Aquí no, en privado –

- Bien, Leyla, ¿Nos subes un té a mi oficina? Por favor –

- Claro, ¿Té pelado? –

- Aprovechamos que no están. Y mis galletas de chocolate – Las 3 rieron, Eda las tenía ocultas en la sala común y solo leyla sabía y de tanto en tanto ella y Piril hablaban solas y tomaban la merienda en secreto

- Voy – Les dijo Leyla

Una vez solas arriba, té por medio y con el móvil de Eda en la mesa para que le avise cuando viniera Serkan por si las pillaba con chocolate en las manos. Las dos se miraron a los ojos.

- Serkan me esconde algo – Le dijo Eda

- Te diste cuenta –

- ¿Sabes qué? –

- No, te iba a preguntar si lo habías notado. Le encontré un patrón –

- ¿Cuál? Cómo vengo semana por medio –

- Y ese es justamente el patrón, pero hoy lo pillaste –

- Vine a ver si veía que esconde creyendo que era un proyecto para el que no me necesita, sabes que evita que me ponga sensible –

- Lo sé, pero no lo es. Semiha Hanim no acepta ningún proyecto donde no trabajemos las dos para que no nos sintamos alejadas y con cara de florero y ellos dos están de acuerdo –

- No es un cuerno, eso lo tengo claro. –

- ¡Eda! –

- Lo siento, pero aunque no es posibilidad había que decirlo. –

- Bueno si –

- ¿Cariño? ¿Puedo pasar? – Pregunto Ferit

- Pasa, pero lo que veas aquí, muere en silencio – Le dijo Piril

- ¿Tienen su momento secreto? –

- No tan secreto no pareces sorprendido – Le dijo Eda

- Vamos, soy observador, sé que una vez cada mucho se juntan las dos aquí arriba, Enguin salió, me dejo encargado de tus pastillas. – Y se las dio a Piril

- ¿De Serkan sabes algo? – Pregunto Eda

- Nada preciosa, lo siento, pero a mi también se me hace raro, tiene el móvil apagado –

- Cuerno no es, pero raro, seguro –

- Cuerno, ¡Eda! – Se escandalizo su amigo

- No porque me los meta, claro que no, si es un ángel. Pero creo que le pasa algo –

- ¿Por? –

- Piril le encontró un patrón, dile – Le dijo y se llevo una galleta a la boca

Esperando a KirazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora