Al final de ese recuerdo

Capítulo 11

Capítulo 11. Petit à Petit¹ (1)

Esto también ocurrió por primera vez cuando me manifesté como Omega. Como suele ocurrir con los rasgos inusuales, experimenté mi primer ciclo de calor alrededor de la pubertad. Mi padre llamó inmediatamente a nuestro médico de cabecera para que me administrara un supresor, pero las feromonas que se liberaban en abundancia no mostraban señales de disminuir..

'Debido a la constitución del señorito... .'

El médico, con una expresión de preocupación, habló sobre mi constitución y los supresores. Habían intentado cinco tipos diferentes de inyecciones, pero nada cambiaba. Aunque era un caso raro, no era imposible, añadió.

'Actualmente, no existe un supresor adecuado para su condición'.

Para mí, un omega dominante, esas palabras eran prácticamente una sentencia de muerte. Significaba que cada vez que tuviera un ciclo de calor, tendría que superarlo solo, sin ninguna ayuda. Y no se quedó ahí; el médico me dio una noticia aún más cruel.

'Además, sus glándulas de feromonas están malformadas'.

Para ser sincero, esto no fue tan impactante para mí. Estaba tan abrumado por mi primer ciclo de calor que no presté mucha atención a la conversación entre el médico y mi padre.

'Probablemente no se dio cuenta antes de la manifestación, pero su cuerpo no libera feromonas en absoluto. En circunstancias normales, es como un beta sin feromonas, pero durante el ciclo de calor, su cuerpo entra en un estado de frenesí. Por eso los supresores probablemente no funcionen'.

A pesar de estar aturdido, la expresión de mi padre se me quedó grabada de forma vívida: decepción, traición, e incluso un poco de arrepentimiento y odio.

'Afortunadamente al ser dominante, sus ciclos serán regulares...'

El médico dijo que esta afección no tendría niguna reprecusión en mi salud, pero para mi padre, eso no parecía ser lo importante. Después de que el médico se marchó con sus cosas, mi padre me miró y dijo:

'Recogí un producto defectuoso...'

Un omega que no podía controlar sus feromonas era una gran mancha en la vida de un perfeccionista como mi padre. Al darse cuenta de que la oportunidad que había cuidado con tanto esmero era solo una versión a medias, no veía la necesidad de mostrarme ninguna consideración

Así, durante tres días, pasé mi primer celo con la puerta cerrada con llave completamente solo. Cuando todos los síntomas desaparecieron, tal como dijo el médico, no sentí ni el más mínimo rastro de feromonas. Intenté comer un poco de papilla que un empleado me trajo, pero la vomité y, debido a que ni siquiera podía comer adecuadamente, me mantuvieron encerrado en la habitación cuatro días más.

'Eres un inútil. Nunca debí haberte recogido'.

Sabía cuáles eran las expectativas de mi padre hacia mí. Aunque el público lo alababa como un magnate con un corazón amable, en realidad, su espíritu de servicio estaba lejos de ser así. Yo no era un prometedor heredero del Grupo Haesin, sino simplemente una pieza de ajedrez muy costosa.

'¿Qué voy a hacer con un omega que ni siquiera puede cumplir su función?'

No tenía alternativa. La forma en que me miraban cambió, mostrándome decepción por ser un omega defectuoso. Incluso Minjae, emulando la actitud de mi padre, me trataba más como a una mascota en lugar de su hermano mayor.

Soy un omega imperfecto, un desecho abandonado incluso por mis padres biológicos, así que es natural que me traten de esta manera.

Desde entonces, cuando llegaba el ciclo de calor, me encerraba en una habitación vacía esperando que pasara. Si mi familia me descubría, tenía que soportar sus miradas de repulsión, como si estuvieran viendo algo sucio. Por eso, calculaba los ciclos obsesivamente y me escondía en lugares donde nadie pudiera encontrarme.