Al final de ese recuerdo

Capítulo 39

Episodio 39. Origine du parfum (1)

Catorce años. Cinco años después de que mi padre me adoptara, fue cuando entré a la escuela secundaria.

Ya era famoso como el hijo adoptivo del presidente Jeong Cheolho, así que, desde el momento en que ingresé a la escuela, recibí mucha atención. No solo de mis compañeros, sino también de los profesores que estarían a cargo de mí, quienes me observaban con curiosidad. Por supuesto, la razón no era simplemente porque fuera "el hijo adoptivo de una familia chaebol".

'Es un omega dominante.'

El porcentaje de alfas y omegas en todo el país no superaba el 3%. De estos, la mayoría eran omegas recesivos, y solo el 3% de ese grupo pertenecía a los dominantes. Era una cifra poco común de encontrar, por lo que no era extraño que me vieran con asombro.

'Definitivamente, es diferente de la gente común.'

Diferente de la gente común. Escuchaba esas palabras al menos tres veces al día, sin exagerar. Ya fuera al dar el discurso como representante de los estudiantes de primer año, uando me convertí en el delegado de clase de manera algo improvisada al principio del semestre, o cuando salieron los resultados del primer examen parcial.

'Qué envidia, yo también quiero tener una característica especial.'

Todo lo que lograba con esfuerzo terminaba siendo visto como un resultado de mi rasgo especial. Claro, no es que fuera una evaluación infundada. Después de todo, estaba científicamente comprobado que los omegas con rasgos especiales poseían genes superiores a los betas. Sin embargo, el problema era que las expectativas hacia mí se volvían más estrictas debido a eso.

Si hacía algo bien, se atribuía a que era omega; y si cometía un error, la crítica era que mi rasgo especial no era gran cosa. Aunque al final, no era tan diferente de cualquier otra persona con dos ojos, una nariz y una boca, la gente me veía como si fuera un ser extraterrestre.

'¿Qué tiene de especial?'

Por supuesto, también era consciente de que algunos chicos no me veían con buenos ojos. Aunque no hubo acoso directo, sí hubo pequeños desplantes en varias ocasiones. Pero, al final, todo eso era un conflicto pasajero que se desvanecía con el tiempo.

'Él no tiene que preocuparse por su futuro.'

Incluso después de ingresar a la escuela secundaria, los títulos de 'Grupo Financiero Haesin' y 'Omega dominante' seguían pegados a mí como una etiqueta. La universidad a la que iría, mi futuro... todo eso ya estaba decidido y se me había impuesto públicamente. Sin tener tiempo para reflexionar sobre mi propio camino, me vi empujado a seguir la senda que mi padre había trazado para mí.

Sin embargo, al contrario de la envidia de los demás, el futuro que me esperaba no era tan brillante. La posición que mi padre había preparado para mí no era más que una base para la prosperidad de Haesin. Mis opiniones y elecciones personales no tenían importancia alguna en todo esto.

Así, a los veintinueve años, me comprometí con Kwon Yido. El único sueño que alguna vez había tenido, cuando era muy joven, era convertirme en perfumista. Esa era la única esperanza para el futuro que podía mencionar.

Aunque, para ser sincero, nunca esperé que se hiciera realidad.

"... ¿Una taller de perfumes?"

Fue unos días después de la ceremonia de inauguración. Una mañana como cualquier otra, mientras desayunábamos juntos, Kwon Yido de repente me hizo una pregunta. Me preguntó si no me interesaría asistir a un taller de perfumes.