Confesión

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-Nanami vendrá a cenar esta noche.

La sonrisa que ve en el omega demuestra lo entusiasmado que esta, no lo ha visto desde su primer celo, estaba claro que le agarro cariño rápidamente.

-¡¿En serio?! Entonces prepararé mi mejor comida.

Le sorprendió que Kento quisiera cenar en su casa, normalmente se reunen en algún restaurante, hasta que menciono que quería ver cómo estaba el joven Itadori. Desde que lo adopto, está fue la primera vez que le hablaba de nuevo, al parecer estaba más molesto de lo que creyó.

Como Nanami era un invitado, Higuruma finalmente pudo ayudar a Yuuji en la cocina. Estando mas de cerca podía ver mejor la concentración del omega en cuanto a la cocina. Clavo su mirada un momento en las manos del chico, lucian tan suaves y cómodas, estaba seguro de que podía tomar ambas muñecas con una sola mano.

Estaba absorto viendo al menor en lo suyo hasta que este volteo su cabeza en su dirrección, en un movimiento rápido trato de disimular su mirada apuntando hacia bajo.

-Lo sé, se ve delicioso a la vista ¿Quieres probar uno?

-Si, seguro.

Esperaba que utilizara unos palillos o su misma cuchara para darle una degustación, pero jamás espero que sostuviera un pedazo con las puntas de sus dedos, tampoco le importo.

Al tener su mano mas cerca, devoró con un bocado la pequeña muestra, rozando levemente sus labios contra la punta de los dedos. El sabor era maravilloso, era picante pero no demasiado, volvio a mirar la mano del chico que aun seguia en su sitio, quedaba un poco de salsa en la punta, el chico aun seguía concentrado en lo suyo y le daba aun la espalda, se veía tan tranquilo de esa forma.

Instintivamente apoyo sus manos contra la espalda baja del chico y volvio a acercar sus labios contra la punta de los dedos, limpiando lo restos que quedaban de salsa. Escucho un suave grito de sorpresa cuando se dió cuenta de lo que acababa de hacer. Apresuradamente retiro sus manos de encima y se alejo un paso.

-P-perdón, me sobrepase solo quise probar un poco más y-

Su nerviosismo parece ser le divertido al omega, pues había soltado una carcajada.

-Esta bien Higuruma-san, no te preocupes.

La tarde pasó rápido y ambos habían preparado distintos platillos para degustar en la cena.

Cuando escucha el golpe en la puerta sabe que se trata de Kento, sin embargo no es él quien abre la puerta, el omega se ha adelantado un paso.

-¡Nanamin! Bienvenido, pasa.

-Es un gusto verte de nuevo Itadori-kun, con permiso.

Puede ver a Nanami usar su típico traje beige entrando al departamento, esta a punto de saludarlo mientras la interacción de aquellos dos aún continúa.

-Traje un regalo para ti Itad- No lo deja terminar cuando el chico se abalanza sobre él.

Puede ver que como el omega salta sobre el cuello de Nanami irradiando felicidad, sus pies no tocan el suelo y esta completamente aferrado al mas alto. No pasa mucho tiempo hasta que toma al menor por su sudadera y lo jala hacia abajo para alejarlo del alfa.

-Gracias Nanamin.

-Es un placer -Le dedica una breve sonrisa al chico antes de dirigirse a él- Higuruma, ha pasado tiempo.

Ambos estrechan su manos, tal vez aprieta demasiado por la mirada que le devuelve el alfa, pero no piensa en ello. Antes de entrar mas al departamento el invitado se desprende de su abrigo para guardarlo.

Bajo mi ala | HiItaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora