En el oscuro y frío bosque hay varios misterios que el hombre quiere averiguar, sobre todo el ejercito de USA.
Una pequeña y dulce monita fue criada por maurice el gran amigo de César, su gran corazón no podía dejarla abandonada en el bosque, habie...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-No me perderás, estamos juntos en esto, simios,juntos,fuertes.-susurre con una voz suave
"99 𝑀𝑒𝑒𝑠𝑐𝑢𝑐ℎ𝑎?"
Eran ellos, avanzando cuidadosamente hacia donde nosotros nos encontrábamos. Pero, a pesar de su proximidad, parecía que no lograban identificarnos entre las sombras y las rocas Era algo extraño y desconcertante. Nunca antes había observado humanos de esa forma Había algo en su apariencia, en su comportamiento, que se sentía casi diferene no eran como Malcom.
"99 𝐿𝑜 𝑐𝑜𝑝𝑖𝑜 𝐶𝑜𝑟𝑜𝑛𝑒𝑙"
Ojos azules, con su intensa mirada cristalina, se aferraba con fuerza a su arma. Sus dedos se enroscaban alrededor del mango con una determinación, transmitiendo una sensación de control y seguridad. Su atención se centraba en el hombre que no dejaba de buscar y buscar, como si su vida dependiera de ese incansable rastreo. El hombre era intenso y decidido, La altura de Ojos Azules combinada con su presencia dominante, hacía que me tapara con su cuerpo, protegiéndome como un escudo humano frente a cualquier amenaza que pudiera surgir.
"𝐴𝑙𝑔𝑢𝑛𝑎 𝑠𝑒𝑛̃𝑎𝑙 𝑑𝑒 𝑊ℎ𝑖𝑡𝑒?"
Wʜɪᴛᴇ? Qᴜᴇ ʀᴀʏᴏs ᴇs ᴇsᴏ.
-"𝑁𝑒𝑔𝑎𝑡𝑖𝑣𝑜, 𝐶𝑜𝑟𝑜𝑛𝑒𝑙"
-"𝐸𝑛𝑐𝑢𝑒𝑛𝑡𝑟𝑒𝑛𝑙𝑎".
La discusión entre los presentes se hicieron visibles, sus voces llenando con autoridad el espacio que ocupaban. De repente, tres individuos se separaron del grupo. Avanzaron con propósito hacia el individuo que sostenía un diálogo con el coronel, la resonancia de sus pasos decisivos llenó el silencio.
Ojos Azules estaba decidido. Si iba a pasar algo, tendría que proteger a su familia. El miedo se asomaba en él, solo quería sobrevivir para Somalia y conocer a su pequeño hijo. Pero si eso implicaba poner en riesgo a Somalia, él se sacrificaría por ella y su hijo.
Los tres hombres se indicaron con los dedos y comenzaron a separarse. Uno se fue en una dirección, otro hacia la cascada y el tercero venía en nuestra dirección.
Ojos azules se percató de esta situación. Sabía que podía hacerlo, pero en el fondo de su realista pensamiento, sabía que los demás hombres se darían cuenta y él no podría salvar a todos...
