La noche con Lara terminó de la peor forma, mi respuesta desató un huracán. Mis oídos dejaron de escucharla y por mi mente solo pasaron los momentos con Héctor. Lara me gritó, me zarandeó, me amenazó pero todo eso no me hizo salir del trance, estaba en shock hasta que escuche 8 palabras que me despertaron al momento.
-Se lo voy a contar a tus padres- eso fue la bala que me mató, su arma secreta, la manera de tenerme de llavero, de marioneta, de poder hacer conmigo lo que quisiera.
Intenté hacerla entrar en razón pero fue imposible, ahora solo se repetían sus palabras en mi mente, era un cuerpo que se movía por inercia.
-Estás bien?- me pregunta Lola, he venido a dormir a su casa y aunque probablemente sea la última vez no puedo hacer nada.
-Si, solo estaba pensando- le miento a ella también, ultimamente le miento a todo el mundo menos a él- que hacemos?
-Podemos ver una peli- dice Kala- si quereis si no da igual- su cara me suena mucho pero no sé de que, simplemente me recuerda a alguien.
-Me parece buena idea- digo yo intentando liberar mi mente de todo.
Preparamos unas pizzas, palomitas, refrescos, colocamos el sofá y una vez todo listo ponemos la peli, Culpa Mía.
Durante la película mi mente vuelve a ella y al recuerdo de aquella noche tratando de recordar lo que me dijo, tratando de reconstruir los hechos pero no hay nada más que esa frase, mis súplicas y su amenaza o mi destrucción depende de como lo veas.-Me ha gustado mucho quiero que salga ya la siguiente- dice Lola.
-Si yo me leí el libro y es muy parecida- comenta Kala y yo no sé que decir, no he prestado atención.
Me miran y esperan que diga algo, pero no puedo no me he enterado de nada y aunque la vi una vez me he quedado en blanco.
-Segura que estás bien?- me vuelve a preguntar Lola con cara de preocupación- todo bien con Lara?
-Sisi, nos reconciliamos me pidió perdón por todo- le miento tratando de que me crea y no me pregunte nada más del tema- solo que estoy cansada han sido muchos días de fiesta.
Recogemos todo y nos vamos a la cama, por supuesto no fui capaz de dormir, solo pensé en él, Héctor. Por la noche se me viene a la mente, pienso en todo lo que vivimos en lo bonito que fue, recuerdo su sonrisa, sus rizos, sus besos, la forma en la que me mira y como me habla, la delicadeza al tocarme como si puediera romperme. Hoy jugaron y aunque vimos el partido no me enteré de nada, se que Marc metió y se lo dedicó a Lola pero nada más, no presté atención, al verlo la culpa crecia en mi mente y el agobio también.
-Buenos días- dice Lola- que tal dormisteis?
-Muy bien, vamos a desayunar- dice Kala levantándose.
-Bien, yo no me quedo, mis padres quieren comer en familia en otro sitio y me tengo que ir- me empiezo a vestir- gracias por todo Lola.
-No es nada, espero que lo volvamos a repetir- dice mientras me abraza- cualquier cosa sabes que me lo puedes decir, con una llamada estoy- que buena es conmigo y que mal lo he hecho yo.
-Claro- le doy una sonrisa que se queda en una mueca- chao y gracias.
Me despido de las dos y me marcho, aprovecho para ir caminando, probablemente me lleve una hora pero no me importa, necesito tomar aire y despejarme un poco. Reflexiono en como voy ha sacar a Hector de mi vida si me tiene envenenada, si es la gasolina que mueve mi motor.
Al llegar a casa me encierro en mi habitación, trato de dormir pero no puedo, es cerrar los ojos y lo veo a él, y despierta solo recuerdo la discursión con Lara.
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Veneno y Envenenados|| Héctor Fort
FanfictionPara que están las reglas si no es para romperlas. Ellos dos saben perfectamente lo que es incumplirlas, llegando a poner en riesgo su familia. Dos familias que quieren unirse pero mediante sus hijos mayores, no pequeños. El error de ser futbolista...