Veneno y Envenenados|| Héctor Fort

Capítulo 2

Estar sola se ha vuelto una rutina, en realidad siempre lo he estado, mis padres siempre han estado muy ocupados y mi hermana tan pronto fue mayor de edad empezó a pasar de mí.

-Es que si te lo hubieran dicho comías con nosotros- dice Héctor por el móvil- es que de verdad que a veces no entiendo a tus padres.

-Yo tampoco pero no puedo hacer nada, no van a cambiar- digo intentando cambiar de tema- vas a ir a la fiesta de Celeste?

-Si, vienes conmigo?

-Quedé en arreglarme con Lara pero si vienes a buscarme a su casa voy contigo.

-A las 10 en casa de Lara.

Cuelgo y aprovecho para hacer un par de cosas para clase, además de ordenar un poco la habitación.

-Vas a salir- dice Duna entrando en mi habitación.

-Si, voy a casa de Lara.

-A qué hora vas a volver?- de repente le importa lo que vaya ha hacer.

-Y a ti qué más te da.

-Relájate, simplemente te estoy preguntando- entra en mi vestidor sin decirme nada- voy a cogerte la chaqueta negra de cuero.

-La voy ha usar yo- digo entrando y viendo como la coge.

-Pues que pena llegas tarde- está picándome y no estoy de humor.

-Para tu desgracia la chaqueta es mía, así que te fastidias- se la quito de las manos- además que tú tienes una.

-Pero la tuya tiene más rollo- la mía tiene pinchos de metal, y algún adorno mientras que la suya es más simple- por favor déjamela.

-Duna, a ti no te va este estilo de ropa- noto que se pone nerviosa- a dónde vas?

-Voy a tomar un café con Valeria.

-No es verdad, pero creo que prefiero no saber la verdad.

-He quedado con Álex para ir en moto- me confiesa- estoy cagada.

-No creo que te pase nada- entro en el armario y cojo una chaqueta de motera que le va ha quedar genial- llévate esta, seguro que te queda mejor además que te va ha proteger si hay algún accidente- me sonríe y coge la chaqueta.

-Gracias- se va de mi habitación y yo cojo las últimas cosas que me hacen falta antes de irme.

Bajo las escaleras y llamo un taxi para que venga a buscarme, mi chofer tiene el día libre así que no me queda otra solución.

-A dónde vas?- dicen mis padres entrando en casa.

-A casa de Lara, hoy es la fiesta de Celeste.

-Con quién vas?

-Con Lara, y para volveré cogeré un taxi.

-Si quiere venir a dormir a casa alguna que venga pero no cojas el taxi sola- me dice mí padre.

Me despido y me marcho, en el camino hablo con Marc, un amigo de Héctor y se podría decir que mi mejor amigo.

-Pensé que no vendrías- dice mi amiga cuando me ve entrando en su habitación.

-Tuve que hacer un par de cosas y por eso tardé- en realidad nos sobra el tiempo, son las seis de la tarde.

-Pau nos viene a buscar a las 10- ella continúa maquillándose- y vamos a cenar a algún restaurante.

-Yo no voy con vosotros- en parte me da miedo su reacción, odia que yo tenga mis propios planes.

-Por, ya había preparado todo con Pau- su cara expresa enfado- me parece fatal.

-Lo siento pero me propusieron un plan que no podía rechazar, además que después nos vamos a ver en la fiesta.

-Quien viene a buscarte?- está esperando una respuesta y yo no quiero dársela- puedes responder- se le está acabando la paciencia.

No puedo decirle que Héctor es el que va ha venir a buscarme, a ella siempre le ha parecido interesante, más de una ocasión me ha pedido venir a mi casa solo porque él iba a venir a comer.

-Viene Marc, un amigo de Héctor, le conozco de un cumpleaños.

-Así que Marc, pues mira que bien tú con él y yo con su amigo así ya tenemos el grupo de 4.

-Te recuerdo que tienes novio y se llama Pau- me parece increíble que teniendo pareja hable así.

-Lo mío con Pau no va a durar toda la vida.

No entiendo porque la gente tiene pareja si no ve un futuro con esa persona, yo para eso estoy sola y cuando llegue esa persona, con la que sí espero algo duradero lo intento. De Lara hace tiempo que no me sorprende y de Pau menos, esos dos no sé quieran y no creo que alguna vez lo hayan hecho. La razón por la que estan juntos no la sé, de hecho prefiero no saberla pero creo que lo hacen para follar sin dar explicaciones, además de que a sus familias les interesa.

-Vienes a dormir a casa?- interrumpe mis pensamientos.

-Va ha venir Pau- siempre termina ha hacer lo mismo, y tengo que dormir en un colchón en el suelo oyendo como los dos se dan besos u otras cosas en su cama.

-Si, pero no pasa nada casi siempre viene- me mira fijamente y va a su vestidor- desde cuándo te importa si viene?

Odio esos comentarios porque en realidad me debería de haber importado desde el principio pero decidí hacerme la tonta y pasar de este tipo de cosas. Lara siempre ha sido la que manda, hacíamos todo lo que ella quería, según ella era para el bien de todas pero a la única que beneficiaban era a ella. Siempre fui su sombra y me cansé, la gran Lara, cara bonita, lista e interesante y todo a mi costa.

-Es que no me apetece escucharos, pero si quieres puedes venir a mi casa y si no lo dejamos para otro día.

Dejamos la conversación, a ella no le interesa discutir porque sabe ir le he haré en cara todas sus mierdas y no le apetece escuchar la realidad. Me maquillo, me plancho el pelo y me cambio, una falda pantalón de cuero, un top rojo y la chaqueta de cuero.
Nos sacamos un par de fotos y Lara las sube pero como siempre en la que ella sale favorecida, sacamos el bereal aunque nos lleva tres años porque ninguno me convence.

Mi móvil vibra y veo que es un mensaje de Héctor.

Héctor

Donde te espero
???

Dos calles antes

Ve acercándote

-Lara me voy, Marc está esperando- le miento en toda la cara.

Nos despedimos y salgo de su casa, voy a donde hemos quedado y allí con su moto mirando el móvil está Héctor, y como siempre va guapísimo, con su rollo de chulo que al final es solo una faceta.

-Princesa- nos besamos, y me abraza- te eché de menos.

-Yo también- me pasa el casco y cuando me lo voy a poner veo que un coche se acerca y es el de Pau- agáchate- empujo a Héctor porque no quiero que Pau lo reconozca y se lo diga a Lara.

Al pasar el coche se frena, y Pau baja la ventanilla .

-Necesitáis ayuda?

-Que va, simplemente vimos que perdía un poco de aceite- digo intentando que Héctor no hable.

-Vale, nos vemos en la fiesta- Pau se va y yo dejo que Héctor se levante.

-No creo que con la poca luz que hay viésemos una pérdida de aceite- me dice- me vas ha decir que pasa.

-Mientras cenamos te lo cuento- nos ponemos los cascos y arrancamos.

Espero que o esté gustando la historia, mañana intentaré publicar un one shot. Un saludo.