Couple Roll

CAPÍTULO 89.

SOUKOKU GIRLS, GIRLS, GIRLS

Dazai estaba recostada en un diván color vino que tenían pegado a la ventana del segundo piso, era en una habitación semi vacía, la tenían con una estantería de libros, una mesita pequeña y algunos discos para música. Se sentaba allí por una razón, pudo ver a Chuuya avanzar por la calle hacia el departamento, llevaba unos leggins deportivos, y una chaqueta deportiva, su cabello atado a lo alto y unos audífonos. Sonrió solo de verla. – me pregunto... ¿Dónde quedo eso? – se preguntó a si misma.

Chuuya entro por la puerta dejando sus tenis en el genkan donde tomo sus pantuflas – Osamu, estoy en casa – dijo quitándose la chaqueta deportiva, llevaba un top deportivo debajo. Colgó la chaqueta mientras iba a la cocina por algo de agua cuando Dazai apareció

- Chuuya ¿este día cuanto corriste?

- Trote 2 kilómetros

- Eso es poco para ti querida Chuuya, ¿Cómo puedes vivir?

- Lo hago mejor que tu

Chuuya tomaba agua mientras Dazai sonrío – estuve limpiando, recogí algunas cosas, ya sabes, hace tiempo que no lo hacia

- Entiendo ¿Qué paso?

- Encontré algo divertido

- Temo por mi vida cuando dices sobre algo divertido

- Ven

Después de revirar los ojos, Chuuya siguió a Dazai.

En la habitación, tenía un juguete particularmente lindo, un juguete largo color rosa, Chuuya le miro - ¿en serio?

- Ayúdame ¿quieres? Quiero un gran orgasmo

- Vengo de correr

- Por eso será mejor.

- Me daré un baño

- Noooo

- No, no quiero así

- Vamos Chuuya, hace mucho que no lo hacemos alocadamente, últimamente eres demasiado cuidadosa

- Intento cuidarte

- ¿lo hacemos? Pooor fis

- De acuerdo, pero solo déjame bañarme

- Ok, pero tendrás que usar esto

Al decirlo, le dio una prenda tipo tanga de color negro, teniendo un succionador en ella y una rejilla de frente - ¿Cuánto te costó esto?

- Use tu tarjeta

- Maldita

- Ve a bañarte

Después de unos minutos, Dazai esperaba a su novia sobre la cama, al verla sonrío, Chuuya salió del baño únicamente con la tanga puesta, su cabello suelto y acomodado en su hombro, ese aspecto le encantaba. – Que linda

- No encontré el control remoto

- Ese – expreso como toda una ganadora mientras lo mostraba – lo tengo yo

- De acuerdo

- Ven aquí Chuuya~

Chuuya debajo de la cama, mientras Dazai la miraba, su cuerpo se estiraba en la cama y cuando quería tocar su entrepierna, Dazai simplemente golpeaba con fuete – no linda, déjalo ser