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YOO SEUNG

Habían pasado ya tres semanas, mis padres se estaban pasando de la raya con lo sobreprotectores que comenzaban a ponerse conmigo, no podía salir de casa si no daba explicaciones de a dónde iría o con quién estaría....
Cogí una almohada y la puse sobre mi rostro, estaba fastidiado. ¿Acaso ellos no pueden entender que necesito un poco más de libertad? Quiero hacer lo que tenga ganas de hacer sin tener que dar explicaciones de nada a nadie.

Mi teléfono vibró repetidas veces sobre el mueble a un lado de mi cama. Lo tomé, una sonrisa se formó en mis labios al ver su nombre en la pantalla, era ella.

——Hola, cariño. —su voz resonó del otro lado de la línea.

——Bonita... —estaba emocionado, la había extrañado tanto. ——No tienes idea de cómo deseaba volver a oír tu voz.

Hubo un corto silencio de su parte antes de que pudiera oírla de nuevo.

——¿Me has extrañado, pequeño Yoo Seung? —joder, claro que te he extrañado. ——¿No me extrañas? —volvió a preguntar al no recibir una respuesta de mi parte.

——Te he extrañado demasiado, Ji.

—— es así, ¿por qué no has venido en estos últimos días? —reclamó un poco molesta. ——¿No estarás viendo a otra mujer? —no quería que se hiciera ideas erróneas en la cabeza, yo jamas podría mirar a otra que no sea ella.

——Claro que no. —me apresuré a responder. ——La única mujer que me interesa eres tú, Ji Yeon, lo sabés.

——Mhm... está bien, cariño. ¿Vendrás a verme hoy? Estoy en el lugar de siempre.

Si salía de casa, estaba seguro de que mis padres comenzarían a bombardearme con preguntas, odiaba esto, no podía moverme libremente a mi gusto.

A la mierda con eso, saldría de aquí cómo sea, llevo días sin ver a Ji Yeon, no dejaré pasar otro día más. Haría lo que fuera por ella, si tengo que mentir a mis padres o escapar de casa para poder evadir sus preguntas e ir a dónde tenia planeado, lo haría sin dudarlo.

——Estaré allí pronto.

....

——Cabeza de brócoli. —la voz de mi hermana resonó a mis espaldas.

Cerré mis ojos, suspiré y quité mis manos de la manilla de la puerta. Dí media vuelta, estaba mi hermana parada allí con sus brazos cruzados y mirándome seria, juraría que a veces Myeong Suk podía ser igual de intimidante que papá.

——Myeong... hola.

——¿Ibas a salir? —sus ojos echaron un rápido vistazo a la puerta antes de volver a mí.

——A casa de Hyeon, nos reuniremos allí con otros amigos a pasar el rato, ya sabés. —toqué levemente mi nuca, su mirada me ponía un poco nervioso.

Asintió.

——¿Le has dicho a nuestros padres?

——Myeong Suk, no pretendes comportarte cómo ellos, ¿o si? —rodé los ojos. Se mantuvo en silencio, dí un paso hacia ella. ——Aún eres una niña, lo entenderás cuándo tengas mi edad.

Dí una leve palmada en su hombro antes de alejarme y caminar hacia la puerta.

——Oye... ¡¿Enteder qué?! —alzó un poco la voz, pero yo ya había salido de casa.



TN

Estábamos con Jungkook en el despacho de casa, lo ayudaba a organizar unas cosas del trabajo. Era sábado, pero este proyecto que teníamos era muy importante y debía terminarse lo antes posible.

——No, no, no. —Jungkook arrugó el papel en sus manos y lo arrojó al cesto de basura que estaba a un lado suyo.

Era el quinto o tal vez el sexto papel que se arruinaba, podía ver a mi esposo algo estresado, echó su cabeza sobre su silla y cerró sus ojos.

——Cariño... —le hablé con suavidad.

Lo ví respirar hondo antes de poner sus ojos en mí, su mirada se suavizó y me regaló una leve sonrisa.

——Lo haremos bien, ¿si? —cogí su mano por encima de la mesa. ——Cálmate. —me levanté y tomé el último papel que había arrojado al cesto.

Lo desenvolví entre mis manos.

——¿Qué estás mirando, dulzura? Fue un diseño pésimo, no sirve.

Negué en desacuerdo, Jungkook siempre había sido muy talentoso en cada cosa que se proponía hacer y esta vez, no era la excepción. El dibujo que yacía sobre aquél papel, no estaba tan mal cómo él creía, pero la sobreexigencia que ponía sobre sus hombros y su manía por el perfeccionismo, lo obligaban a rechazar aquellos diseños suyos.

——A mí me gusta.

Dejó él de tocar el puente de su nariz y sus ojos negros volvieron a posarse en mí. Negó con una ligera sonrisa.

——Lo digo en serio. —me acerqué a su lado y dejé el papel sobre el escritorio. ——Dígame, ¿qué le hace falta según usted, señor Jeon?

——Lo principal, le hace falta vida, estilo, un poco más de volumen... —comenzó a nombrarlos uno a uno. ——Y ser mejor en muchos aspectos.

——Estilo y volumen, se lo podemos dar al igual que el color. Podemos también darle vida al diseño y mejorarlo en todos los aspectos que quieras. —cogí la silla y me senté a un lado suyo. ——No quiero que te sigas estresando de esa manera, amor. Estoy aquí para ayudarte, no dudes en pedir mi ayuda si lo necesitas, ¿está bien?

——Tú también estás muy ocupada últimando detalles, haciendo llamadas y organizando ciertas cosas, no quiero cargarte con más trabajo. —negué ante sus palabras. ——Tn, el desfile en Milán es el próximo fin de semana, Jin se encuentra allí arreglandolo todo, a Yoongi y a tu abuelo también los veremos ahí y Hoseok vuelve en tres días. El tiempo está sobre nosotros.

——Lo sé. —le dí la razón. ——Pero ya hemos terminado la mayoría del trabajo, podemos terminar estos últimos diseños. Te ayudaré. —me paré, hice la silla a un lado y lo miré fijamente. Extendí mis brazos hacia los lados. ——Anda, toma mis medidas, seré tu modelo hoy.

Los ojos de mi esposo se iluminaron, pude ver cómo sutilmente mordió su labio inferior y con una leve picardía, se levantó para caminar hacia mi persona.

——Señorita West. —me habló cómo solía hacerlo en el pasado, cuándo era mi Jefe. Sonreí encantada por ello. ——Yo no necesito tomar sus medidas... —dió un paso más cerca y sentí el toque de su mano derecha en mi cintura, con su pulgar hizo caricias sobre la tela de mi ropa. Él no despegó su mirada de mis ojos ni por un segundo. ——Porque conozco cada centímetro, cada extremo y cada ángulo de su cuerpo. Toda usted está grabada en mi cabeza desde hace mucho tiempo.









Who Are You? #2 [J.JK]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora