. Una princesa entre tinieblas .
De: Priss
Capítulo XIII: "Esperando el momento".
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~ Llegamos. -Hao detuvo el auto y poco tardó en bajar de este y ayudar a su novia a salir.- ~ Te va a gustar.
Le dijo el moreno, ofreciéndole la mano para ayudarla a bajar.
Apenas abrió la puerta, la rubia supo donde estaban.
~ El mar.
Susurró incrédula. No había vuelto a un lugar como este después de que sus ojos perdieron la luz; su madre simplemente no le permitía ir.
El aroma de la sal en el aire, el sonar de las olas al romperse en la playa, las gaviotas sobrevolando el lugar, la fresca brisa que ondeaba sus dorados cabellos y la sensación de la arena bajo sus pies. Anna simplemente no pudo resistirse y se abrazó a Hao, agradeciéndole el haberla traído a este lugar.
Kyouyama estaba ensimismada, amaba el mar y hacía tanto que no venía.
~ Lo que sea por mi princesa.
El castaño se inclinó, buscando los labios de la chica, encontrándolos tan tiernos y cariñosos como pocas veces. A pesar de ser una adolescente, Anna tenía el carácter de un demonio, pero esta vez se entregó a él en aquella suave caricia que compartían sus bocas.
~ No me llames así.
~ Así, ¿cómo?.
La joven arqueó una ceja, desviando el rostro mientras su boquita formaba un pequeño puchero.
~ Princesa, niña, pequeña, chiquita... ¡no me gusta!.
Hao cerró los ojos; una sutil sonrisa cruzándole el rostro. No podía evitarlo, ella era diez años menor que él, además la veía tan suave y delicada, que quería protegerla, incluso de él mismo.
El moreno suspiró profundo, abrazando a la joven y recargando su barbilla en los dorados cabellos de la chica.
~ ¿Y si te digo 'Annita'?.
Ella dobló sus labios mientras, desesperada, pensaba: NO!.
~ Baka.
Le susurró finalmente. Sinceramente prefería que la llamase: princesa.
La sonrisa divertida en el rostro del muchacho se desvaneció de pronto, la verdad es que había un propósito en especial para haberla traído aquí.
~ Bueno, hay... algo de lo que quiero hablar contigo.
~ Sí, ya lo sé.
Un incómodo silencio surgió entre la pareja. Hasta ahora habían mantenido su romance en secreto, simplemente para no buscarse problemas, además de que ninguno en la familia estaría de acuerdo con su relación. Primero estaba Yoh; irremediablemente enamorado de la rubia, seguro iba a ponerse furioso cuando se enterase que su hermano le había "quitado" a la chica. Y de sus padres ni se diga.
~ Creo que mi viejo ya sospecha algo.
~ ¿Estás seguro?.
Asakura curveó las cejas, girando el rostro. Bueno, casi seguro, las indirectas que le lanzaba, frases como: "¿por qué pasas tanto tiempo con Anna?, o pensé que no la soportabas, te lo advierto, no quiero que me causes problemas". Y cosas por el estilo.
Hao acarició la espalda de la jovencita.
Es cierto, para su familia, Hao siempre fue un problema, para sus padres e incluso para Yoh.
~ ¿En serio?, yo creo que Yoh es más problemático, irresponsable y holgazán.
El castaño sonrió al escuchar a su novia tratando de alzarle el ánimo.
Bueno, su gemelo siempre fue el preferido y no importaba qué hiciera Hao para agradar a sus padres, a estas alturas de su vida aun no lo había logrado.
~ En cambio yo te quiero tanto.
El moreno bajó la mirada, encontrándose con los negros ojos de la joven rubia. Tan opacos y tan llenos de sentimientos que parecían desbordarse en ese momento. El muchacho acarició los dorados cabellos de su pequeña cómplice.
Esa chiquilla. . . debía admitir que al principio estuvo celoso de ella, hasta llegó a estar seguro de que Anna, al igual que su familia, simplemente lo haría a un lado. Pensó que ella preferiría a Yoh y sin embargo ahora. . . están enamorados. ¿Quién lo diría?.
Hao sonrió irónico, era feliz, pero maldita sea, ni siquiera eran verdaderos hermanos y tenían problemas como si lo fueran, por eso habían acordado mantener su relación en secreto, pues sus padres se opondrían sin importarles lo que Anna y Hao sentían.
Mikihisa se lo advirtió desde un principio. . .
"No quiero que la hagan sentir incómoda y tú, Hao, más te vale tratarla de forma apropiada."
El moreno recordaba las exactas palabras de su padre.
~ ¿O debería decir amenazas?. Creo que él sabía que intentaría seducirte... Eres hermosa.
~ Baka!!.
Anna se separó del castaño, rompiendo el abrazo. Le dio la espalda, ligeramente enfadada mientras le preguntaba: ¿qué iban a hacer ahora?. ¿Seguirían fingiendo que no eran más que dos buenos hermanos?, escondiéndose como hasta ahora, reprimiéndose en sus noches de amor para que sus padres estuviesen bien entre ellos. . .
~ Supongo que sí, pero no sé hasta cuándo.
Le decía Hao, acercándose a ella y abrazándola desde atrás, mirando al sol ponerse en el horizonte, simulando hundirse en el mar. Un hermoso paisaje, sin duda. Lamentaba que Anna no pudiese compartirlo con él, a pesar de estar allí, sentados sobre la arena, alejados de todo, en esa pequeña playa.
~ ¿Hasta cuándo?.
La rubia bajó el rostro, la verdad es que su madre ya sospechaba que había algo entre ella y Hao.
Anna estaba preocupada, Eliza era capaz de divorciarse para alejarla de Hao y ella no podría soportarlo. Kyouyama tembló ligeramente; Hao la abrazó un poco más fuerte, creyendo que se debía a la fría brisa de la tarde.
La rubia no quiso decirle nada al moreno, porque no sabía cómo reaccionaría, quizá porque aun eran simples sospechas o seguramente porque no quería que él discutiese con su madre. Lo cierto es que en cualquier momento, Anna tendría que decidir entre Hao y su madre y aunque conocía la respuesta a ese dilema, quería evitarlo hasta el final.
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. . . . Continuará.
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MUCHAS GRACIAS POR LEER ESTE FIC:
Maeda Ai
FenixTaisho
HAKUMO
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Definitivamente este cap es de relleno, incluso es más corto.
Cómo sea, es el inicio de la tormenta y si bien apenas comencé a derrochar miel, también se vienen los problemas.
Aquí me gustó: que la rubia no soporte que le digan. . . Annita.
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Una princesa entre tinieblas
FanfictionHAO x ANNA. AU. Ella siempre estaba en la oscuridad. Dormida o despierta, los ojos cerrados o abiertos, no importaba... todo era negro. Pero con ese hombre, la oscuridad que la rodeaba dejaba de ser triste, para volverse una simplemente hermosa.