Darck Whitch -- Derek Hale (Teen Wolf)

02

Me encontraba en la mitad del bosque, este se veía más tétrico de lo normal escuche unas voces cerca de mi, empece a caminar y poco a poco las voces se hacían más claras, mostrándome así que eran gritos, gritos desgarradores, llenos de angustia pidiendo auxilio, corro hacia las voces y me detengo cuando veo la misma casa del bosque, los gritos provenían de ella, corrí a la casa intentando entrar en ella, queriendo ayudar a quien pudiera, pero antes de llegar a ella, despierto.

—Dios mío.—digo cuando me doy cuenta de que todo fue solo un sueño, estaba bañado en mi propio sudor, me paro de la cama y al voltear al piso veo mis pies llenos de tierra.

—¿Que carajo?.—estaba confundida, cuando me dormí estoy segura que estos estaban limpios, miro a mi alrededor y veo la ventana a medio abrir, después dirijo mi mirada al espejo de mi tocador y veo que mi pelo está echo un desastre y con una que otra hoja, me quedo unos momentos reflexionando en qué fue lo que me pasó para amanecer de esta manera, que yo recuerde no soy sonámbula, mis pensamientos son interrumpidos por la alarma haciendo que me exalte.

La apagó y me encamino al baño, me desahogo de mis ropas y me meto a la ducha abro la llave sin importar si el agua sale helada, mis pensamientos sigues en la manera en que desperté, ¿Que fue lo que pasó?, ¿Porque volví a ver la casa del bosque?, ¿Porque trataba de ayudar aún sabiendo que era imposible?, y por último ¿Que fue lo que pasó para que eso sucediera?, estaba tan sumergida en mis sueños que no me di cuenta cuando ya estaba con la ropa puesta y con mi pelo seco, al parecer mi cuerpo se puso en modo automático. 

Bajo hacia la sala para ponerme los conver y mi chaqueta de cuero, no veo a mi mamá por lo que asumo que salió al trabajo desde temprano, salgo de mi casa después de agarrar mis cosas, me subo a mi moto y me dirijo hacia la escuela.

—Escucha hombrecito, que tal si me dices donde compras tus jugos.—Escucho antes de doblar el pasillo, identifico la voz como la del esteroide andante Jackson.

—¿Que?.— contesta el que creo es Scott

—Dónde estás consiguiendo tus jugos.— Jackson parece enojado

—Mi mama siempre hace las compras.— trató de aguantar mi risa, vaya que este muchacho es muy inocente.

—Escucha McCall, me dirás exactamente dónde las compras porque es prácticamente imposible que juegues tan bien, sin tomar algún tipo de químico.—ataca el otro.

—OH te refieres a esteroides, ¿usas esteroides?.—

—Que diablos pasa contigo McCall.—jackson agarra de la camisa a Scott y lo azota en los casilleros antes de que jackson se de de cuenta caminó hacia ellos, y agarro el brazo del rubio.

—Ya te pasaste de la raya Jackson, suéltalo.—le digo a este.

—No te metas, Larsson.—trata de sacarse de mi agarre pero lo aprieto más.

—Te dije que lo sueltes Whittemor — hago que suelte al chico cuando tuerzo su brazo haciendo que quede en su espalda, el rubio me mira con furia mientras se sujeta su brazo, vuelve a mirar hacia el moreno y se va.

—Gracias de nuevo— me da una sonrisa 

—¿Sabes?, tienes que aprender a defenderte, no siempre estará alguien para salvarte el trasero.— le contesto y  sigo mi camino.

—Lo haces sonar como si fuera fácil.— agacha la cabeza.

—Cuando veas el mundo con otros ojos lo entenderás, mientras sigas con la mentalidad de que no puedes hacerlo jamas lo lograrás, como me fastidian los dramas adolescentes.— acomodo mi pelo hacia atrás.

—Hablas como si no fueras una adolescente también.—dice con gracia.

—Solo comparto una clase contigo, soy de último año— el me ve sorprendido.