Sus padres fueron los mejores amigos, un vínculo qué fue trazado desde la infancia. Sin embargo, el destino les tenía deparado obstáculos que los separaron.
Años después se reencontraron, pero ellos ya no eran los mismos.
Faltaba media hora para la llegada del año nuevo, y ambos se encontraban comprando amuletos en el templo. Cuando de pronto la vio con una expresión de preocupación en el rostro, no pudo evitar preguntar.
—- ¿Te sucede algo? —- la voz varonil del joven la sacó de sus pensamientos. —- Desde hace un rato, estás distraída.
Ella negó con la cabeza y sonrió.
—- Es una tontería, pero no puedo creer que seamos novios. —dijo con una sonrisa.
—– Nunca pensé que tendría una novia.
—— Eres el capitán de tu equipo de vóleibol en tu escuela. Debes al menos tener un club de admiradoras—dijo Aratani golpeando ligeramente su pecho.
—-Nunca me llamó la atención eso —dijo Wakatoshi.
—- No me lo niegues. Al menos debes haber salido, una vez, con Mirai, la capitana del equipo de porristas.
—- Nunca he tenido una cita con una chica. — por un momento, pensó que bromeaba, hasta que vio su típica expresión seria
— ¿Eso enserio?
—- Cuando volvimos a coincidir sentí algo distinto.—dijo Wakatoshi mientras veía como el primer fuego artificial daba la bienvenida al año nuevo.
— ¿Así que empezaremos este año juntos? —dijo Aratani mientras inclinaba su cabeza hacia Wakatoshi. Wakatoshi sólo asintió. —-Me alegro que tu pie haya mejorado.
—— Ganaremos las nacionales. Y quiero que estés ahí para cuando pase. —dijo Wakatoshi.
—- ¿Me estás invitando? —Wakatoshi asintió ante sus pregunta.
—- Algo que me emociona más que aplastar al equipo contrario, sería verte apoyándome en uno de mis partidos como mi novia.—- Aratani sonrió.
— ¿Aplastar...? —pensó internamente— ¿Cómo si fuesen insectos?
6 de Enero de 2012
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Y tal como lo dijo, como si se tratase de un insecto. Shiratorizawa le ganó al Fukurodani con 21:13 en el quinto set. Pasando así a la siguiente ronda.
Para cuando terminó el partido, abandonó las banquetas, y se fue a conseguir una botella de agua.
—— Aveces no parece humano... ——pensaba internamente mientras recorría los pasillos del main arena.
Cuando de pronto chocó con alguien que no esperaba ver en ese lugar.
—– ¿Kita? ——dijo con sorpresa.
—- ¿Aratani? —dijo el joven con sorpresa. Rápidamente una sonrisa se le dibujo en el rostro—¿Viniste a ver el partido?
—- ¡Sí, y tú, que haces aquí! .. —lo vio de pies y cabeza, el joven estaba empapado de sudor, y lucía agotado.
