Amor Eterno· RADIOAPLE★

capitulo 3.

Capitulo 3.

“Eran solo dos enamorados.. "

La noche había envuelto en una hermosa oscuridad con solo la luz de la luna reflejándose en el bosque, había un silencio hermoso donde la mayoría de animales no salían pero

Samael estaba despierto sin motivo alguno sentado en el pasto verde del bosque,

Mirando el gran cielo estrellado en completo silencio, pero sin darse cuenta que alguien lo miraba desde las sombras

Creí que estabas durmiendo niño... que haces despierto? —

Al ! Desde cuando estas hay ? — preguntó sorprendido mirando atrás al escuchar la voz de Alastor

Yo pregunté primero...—dijo saliendo de las sombras para  sentarse alado de Samael
Y bien.. que te sucede niño? —pregunto mirándolo

Nada..solo quise venir a ver las estrellas..—

Um.. — dijo quedándose en silencio

Las estrellas brillaban junto con la enorme luna de queso amarilla, unas cuantas ranas salían de sus escondites  mientras saltaban y cantaban alado de ambos que seguían sin decir alguna palabra

Te pareces a una estrella..—dijo mirando el cielo oscuro cubierto puntos brillantes sintiendo la calida brisa en su rostro

Eh?  por qué lo dices Al ?—
Pregunto curioso el rubio

      Eres pequeño igual a una estrella  —
Dijo sonriendo mientras que Samael hacia una cara de disgusto.
Pero.. para serte sincero te pareces a una estrella por qué brillas demasiado aunque no te des cuenta.. eso te hace especial , poderte apreciar de cerca y ver tu brillo..es algo que nadie tiene el privilegio más que yo ...
Mi estrella de la mañana..—susurro lo último mirando los ojos azules del chico rubio que quedó sin palabras

Alastor..— susurro mirando los ojos cafeses del mayor con una lijera sonrrisa y mejillas sonrojadas

Yo también tenía miedo..— ablo de sus labios con una voz serena
Tenía miedo de perderte Samael..—confeso con tristeza en sus ojos recordando el sentimiento de angustia cuando Samael casi se ahogaba, sus manos hicieron puño la tierra por aquel mal momento desviando su mirada cuando de repente sintió el suave tacto de unas manos sobre su puño, aquellas manos lo tranquilizaron dejándose sentir su calor

Estoy bien Alastor —sonrrio con ternura sin soltar las manos ajenas del mayor,

El silencio en un cálido momento se sintió eterno como si el tiempo se detuviera, eran solo ellos dos, Alastor sentía su corazón palpitar tan rápido que por un momento creyó que se iba a morir aún que eso es imposible para el , sus facciones se relajaron sintiendo un leve calor por sus mejillas mientras seguía admirando el azúl cielo de los ojos del rubio, un pedazo de cielo en aquellos ojos que lo reflejaban .

Sus respiraciónes eran suaves y lijeras al soltar, como si estuvieran el ritmo que seguir, sus labios...tan..

¡croac.. croac!

Al parecer un pequeño amiguito verde se subió a la mano de Alastor  haciendo que arruinará el momento mientras Samael no resistió su risa por la cara de gruñón del mayor..

No le gustaban las ranas al pobre de Alastor.

Los días seguía pasando llegando a  años  y momentos divertidos con el humano que haora era su fiel compañero de aventuras en el bosque donde nadie los molestaba

Alastor miraba con detalle al rubio el como su pequeño rostro de antes haora eran las perfectas facciones de un chico joven de figura delgada, su piel blanca vestida de tela sedosa para cubrirla del frío por las noches, su estatura había subido un poco más a diferencia de cuando era un adolescente, tan encantador y perfecto...

Había visto crecer y como cambiaba el pequeño Samael, pero si algo siempre tendría ese rubio..era su brillo único al sonreír

Alastor caminaba tranquilamente mientras escuchaba el crujir de las hojas donde pisaba al pasar, llevaba algunas frutas en sus manos

Samael Dónde te metiste? —dijo para si mismo siguiendo caminando tratando de encontrar al rubio que solía irse a explorar el bosque,

Una lijera risa juguetona se escuchaba a los alrededores de
Alastor que nego divertido mientras buscaba con la miraba al dueño de aquella risa traviesa que tanto conocía.

El sol estaba escondido en las nubes grises en el cielo  pero eso no importaba ya que no el molestaba el clima fresco,
Con tranquilidad serró sus ojos y se concentró solo en los sonidos, podía oír el canto de los ruiseñores y otras aves, el como el viento movía lijeramente las ramas de los árboles , asta que escuchó lo que buscaba.

De manera rápida extiende sus brazos soltando las frutas que tenía para atrapar algo que iba cayendo..

O alguien en específico.

Un joven de estatura promedio con cabellos rubios y sonrriente cayó en los brazos de Alastor quien lo sostuvo sin mucho esfuerzo mientras el chico se sostenía de sus hombros

Con que hay estabas.y yo buscándote niño — dijo Alastor aún sosteniendo al chico en sus brazos

Buena atrapada Al !  —rio contento el chico movimiento sus piernas felizmente

Que hacías trepado en los árboles? , pudiste caer si no llegaba a tiempo —

— se que siempre vas a atraparme incluso si no te pido que lo hagas,  apareces en los momento correcto--

Alastor solto una carcajada por la travesura del rubio mientras  empezaba a caminar sin soltar a Samael de sus brazos,

El bosque estaba fresco por la temperatura algo baja, se podía ver las nubes grises envolver el cielo y sin esperar más empezaron a caer pequeñas gotas de agua
mojando la tierra y maleza de las plantas

Alastor sentía como su cabello castaño se humedecia pero restándole importancia siguiendo su camino.

Samael miraba  cada rasgo de Alastor mientras las gotas de lluvia caian lentamente por ambos rostros

Tengo algo en la cara? —
Dijo Alastor sonrriendo

al ver los ojos curiosos del chico odservarlo, Samael se avergonzó al ver la mirada del otro sobre el y mas cuando lo descubrió haciendo que mirará nervioso otro lugar

N-no nada — respondio  ocultando su rostro en el pecho de Alastor

“Lo que yo daría por tenerte
en mis brazos otra vez.."

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