𝙈𝙪𝙮 𝙘𝙤𝙦𝙪𝙚𝙩𝙤 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙨𝙚𝙧 𝙛𝙧𝙖𝙣𝙘𝙚𝙨 || ℙ𝕠𝕝𝕟𝕒𝕣𝕖𝕗𝕗 𝕩 𝕆ℂ

6♡

⚠️⚠️

De regreso del mercado, Lorena tomaba respiraciones profundas mientras colocaba la compra en los armarios de la cocina de Polnareff.

-¿Cómo te encuentras?-  Dijo Polnareff entrando a la cocina.  -Igual de nerviosa, por lo que veo...- 

-Lo importante es que... Salí de la cama...-

Polnareff se hacercó a Lorena y abrazó su espalda de forma delicada.  -Y yo estoy muy orgulloso-  Polnareff depositó un beso en su coronilla mientras la giraba para poder mirarla a los ojos.
-Te prometo que... Cuando mejores, te prometo darte una noche que jamás olvidarás-

-Eso es muy dulce de tu parte... Pero... Creo que ese día tendrá que esperar bastante-

-Esperaré lo que haga falta-

Lorena sonrió con cierto enamoramiento a su pareja. Polnareff la apretó más contra él, tratando de reconfortarla.

-Y tú, ¿Cómo estás?- Lorena le preguntó mientras hundía más su cara en el pecho de Polnareff.

-Mientras no te vea llorar... Estoy bastante bien-

-Adulador-  Polnareff la dio un apasionado pero breve beso.

Mientras que los meses pasaban, Lorena y Polnareff superaron ciertos terrores que el viaje a Egipto había provocado, mejorando en su estabilidad mental de una forma bastante notoria, sobre todo Lorena.

Ya no se ocultaba en su trabajo, ahora trataba de salir con Polnareff a la calle, hizo turismo por Francia, y probó su gastronomía.

Un día en junio, Polnareff estuvo algo distante con Lorena, casi no estuvo por casa y cuando estaba, no hablaba... Era extraño teniendo en cuenta lo mucho que Polnareff hablaba.

-Polnareff... ¿Te pasa algo?-  Lorena trató de buscar una respuesta, pero Polnareff siguió centrado en su programa de televisión.

Lorena se levantó y caminó hacia el porche delantero, claramente molesta y frustrada por el silencio de Polnareff.

El francés la siguió.

-Oye, Lorena... ¿Estás molesta?-

-Sí, ¿Qué te pasa?-  Polnareff se volvió a quedar en silencio y solo tomó las manos de su novia y la llevó a su patio trasero.

Lorena se dejó guiar, encontrandosé con una velada muy romántica. Un mantel en el suelo, junto a una cena sencilla y una gran botella de champán.

-¿Qué es todo esto?-

-Hoy va a ser la noche de que te hablé-  Polnareff se sentó y tiró de las manos de Lorena suavemente indicándola que se sentara.

-Polnareff...- Dijo en un suspiro, sorprendida por el detalle de su novio.

-Te lo mereces, has luchado mucho-  Polnareff la entregó una copa de champán.  -Ten cuidado, se me ha caído algo, no me gustaría que te lo bebieras.-

Lorena bebió con cuidado, cuando notó algo chocando contra sus labios. lo sacó de la copa, y rompió a llorar cuando figuró lo que sucedía.

-No quería que te molestaras, pero... Si te hablaba, probablemente hubiera arruinado la sorpresa-

-Un anillo... Polnareff... no me jodas...-

-Lorena Cano- Dijo Polnareff mientras se arrodillaba.  -¿Me concederías el honor de llamarte... ma fiancée?