Fingiendo que no me gustas

Capítulo 10

                                -𝒯𝑒𝓇𝓂𝒾𝓃𝒶 𝒶𝓆𝓊í-

"Y que tan grande la tenía?!"

"Amara! No seas tan sucia!" Le abrí los ojos en grande y mire a mi alrededor para asegurarme de que nadie la había escuchado.

Por el momento estábamos sentadas en la cafetería de la uni. Y le estaba contando a Amara lo que había pasado hace dos días.

Si hace dos días. Porque nos pasamos dos días enteros en cama, haciendo cositas sucias y luego hablábamos de todo y de nada. Creo que fueron los mejores dos días de mi vida.

"No seas amargada Alegra! Pensé que cuando por fin ese Adonis te diera lo que te faltaba ibas a estar mas animada." Protestó poniendo los ojos en blanco.

"Es que animada si estoy, pero tampoco quiero que toda la cafetería se entere de cuantas pulgadas la tiene Martín." Respondí enfadada.

Pero eso no la cayó, no si le dio más impulso a preguntar.

"La has medido?" Preguntó con los ojos grandes.

"Amara no seas cochina! Claro que no la eh medido." Respondí palmeando mi frente con mi mano.

"Es que no te creo nada! Vamos que no tengo vida amorosa y tengo que vivir de la tuya! Quiero detalles." Insistió.

Pero cuando le negué con la cabeza suspiró y puso los ojos en blanco, señal de que se había rendido.

"Vale, pero al menos dime si han quedado otra vez?" Preguntó a la cual yo le puse cara de amargada.

"Que pasa?" Preguntó.

"Es que a tenido que dar un pequeño viaje." Respondí con un suspiro.

No entiendo porque el prospecto de estar separada de él me molestaba tanto.

~Porque te gusta.
Me gusta que me haga sentir bien, nada más.
~Si si claro.
Seguro que si le cuanto a Amara me da un discurso en el cual dice que me ah perdido y estoy completamente en las manos de mi dios griego.

"Hellooooo? Vida a Alegra?"

Amara chasqueando los dedos en mi cara interrumpió mi conversación con mi propia conciencia.

"Que?" Pregunté un poco desorientada.

"Porque no te fuiste con el?"

"Amara teníamos examen."

"Bueno ya, lo teníamos. Pero ya no. Porque no te vas ahora?"

"Es que no me a invitado." Admitir eso no se sintió del nada bonito.

"Pero y el que se cree? Que van a estar y ya? Se va a desaparecer así porque si."

Ahora si me había puesto nerviosa. Y si no le había gustado tanto como me gustó a mí? Porque no me a invitado? Será que eso era lo único que quería de mi?

El resto de el día me lo pasé de mal humor y cuando me llamo Martín y escribió me negué a responderle. Amara me dijo que lo escuchara que tal vez no era lo que yo pensaba. Pero yo siempre e sido así.

Soy muy pensativa y muy poca confiada. No es una excusa pero mi vida de instituto no fue como las de películas. Dónde vas a un instituto haces miles de amigas, te escapas conoces a un chico y ya está. Fue un poco más complicada.

En mi primera semana en el instituto me habían robado mi diario, en el cual escribí sobre lo afectada que estaba después de la muerte de mi padre.

Pensarías que eso es un tema muy triste y que quien me ha robado el diario me lo ha devuelto. Pero no, fui el hazmerreír de el internado por semanas.