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Taehyung gimió ronco, agarrando con fuerza el puñado de cabellos castaños que sostenía con su mano derecha, su cabeza cayendo hacia atrás mientras que con la libre peinaba hacia la misma dirección el cabello que se pegaba a su frente. Gruñendo cuando se sintió a lo profundo de su garganta, apenas los dientes rozando su piel sensible.

—tss.... Los dientes.— reclamó entre un jadeó profundo, bajando la mirada y apartándolo al sentirle ahogarse.—respira...

Lo vio tomar una bocaza de aire, su hombría palpitando al ver su cara sudorosa, mejillas rosadas, labios abultados, llenos de saliva. Sus ojos aguados, la nariz colorada y su cabello despeinado, absorbiendo mientras con el dorso de su muñeca trataba de limpiar la saliva de boca, más la mano de Taehyung en su cabello lo hizo mirar hacia arriba.

Joder.

Taehyung amo la mirada lasciva que el menor le dió al volverlo a entrar a su boca.

Y que bendita boca. Porqué se vio obligado a gemir con la garganta seca, apretando la mandíbula con fuerza, el menor sin despegar miradas de él. Atragantándose con él. Lo veía llevarlo todo hasta lo profundo de su boca, la ligera arcada que el chico promocionaban siéndole de lo más caliente conjunto a su manos agarrando con fuerzas su muslos, sosteniéndose del hombre con el mejor sabor posible que alguna vez haya probado.

Era viscoso y raro. Sabía que el sabor era salado, más era gustoso, tomando con una mano la base del miembro y sacándolo de su boca solo para lamber la hendidura. El líquido preseminal haciéndole agua la boca al succionarlo.

Le encantaba escucharlo gemir.

Taehyung jaló su cabellera con fuerza hacia atrás, viéndolo temblar con la boca abierta, ansioso. Sudoroso por el placer que lo socorría al tenerlo en su boca. Jungkook siéndole el más grande y delicioso pecado de todo hombre, sonidos de satisfacción saliendo de su boca al bombearlo con su mano.

Y no culparía a quien mirase al chico de la misma forma.

Era simplemente fascinante de todas las maneras posibles, la baba que corría por la orilla de su boca siendo limpiada por la mano que no se sostenía de sus cabellos, el pulgar que recorrió la zona, siendo llevada hacia arriba a su propia boca.

Taehyung lo saboreo.

Más Jungkook jadeó por la imagen.

El hombre sacando al lengua para adentrar su pulgar a su boca sin nunca dejar de mirarlo, sonriendo cuando el sonido sucio al chuparlo recorrió el lugar. Lambiendo sus labios con deseos de más al probarlo.

—ven aquí.—gruñó consternado, encantando y fascinado con su chico. Ayundalo a levantarse y sentarse nuevamente en la madera de su escritorio, levantándole las piernas por los muslos para posicionarse entre ellas y que le apretaran las caderas.

Ladeando la cebeza para besarlo con fuerza.

El gemido del castaño que murió en su lengua al adentrarlo en su boca, sintiéndose así mismo ahí, su lengua recorriendo con ansias cada parte de la contraria, ahora dejando rastros de su saliva que Jungkook recibió abochornado. Tomando del cuello al hombre y enredando sus dedos en los cabellos que caían por la nunca del mismo.

Separándose por aire, más el mayor se separó para quitarle la camisa y corbata. La última mencionada siendo el objeto que dejó en su manos mirándolo con las pupilas dilatadas.

—¿te gustan los fetiches Jungkook?— el mencionado lo miró sorprendido, encogiéndose ante la mirada del hombre que recorría su cuerpo entero sin escrúpulos, llegando sus ojos otra vez. Jungkook asintió despacio.—¿atarte es uno de ellos?

ᴍɪ ꜱᴜᴇɢʀᴏ-ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ+18 [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora