2 de diciembre

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Desperté por el sonido de algo, aunque no sabía de qué.

Abrí los ojos pero los cerré rápidamente al notar una luz bastante fuerte que daba cerca de mi cara.

- Mmhm -me quejé- qué haces? -le susurré a Paul sin volver a abrir los ojos-.

- Tranquila duerme, estaba viendo algunos vídeos de mi galería, queda una hora para despertarnos -Me apartó la cara del pelo y me dio un beso en la frente ya que estaba colocada en el hueco que habia entre su cuello y hombro-.

- Y por qué no duermes -Me acurruqué un poco más en él-.

- No tengo sueño mi niña, y no quiero levantarme, quiero quedarme aquí contigo, tu duerme tranquila -Me susurraba-.

Intenté dormirme, lo juro, pero me fue imposible, así que lo único que me quedaba era ver con Paul los vídeos que estaba viendo de su galería.

Eran videos muy graciosos, Alex y Lucas bailando haciendo el gilipollas, Omar hablando de gilipolleces, cosas así.

También había videos de Paul cantando en la sala de Manu, era increíble la voz que tenía y lo que podía llegar a transmitir con ella.

Fue pasando las fotos y los vídeos de la galería, había muchas fotos que las pasaba muy rápido, hasta que me di cuenta de que eran fotos mías, no sabía en qué momento las había tomado, pero eran fotos mías dormida junto a él, en la sala de Manu, incluso habia una foto del día que estuvimos con los chicos en la terraza, el dia que estuvimos discutiendo por ver a quién le olían los pies.

La foto era muy bonita, lo pude saber porque en esa foto se detuvo más para que la vieramos.

Salía parte de su cara apoyada en mi cabeza, y yo acurrucada en él, abrazándole y con una manta hasta la cintura, yo estaba con los ojos cerrados y con una pequeña sonrisa. La verdad es que me encantó esa foto.

- Por qué tienes tantas fotos mías? -le pregunté-.

- Me gusta tenerlas, es que sales preciosa siempre, si por mi fuera, te haría 50 fotos por minuto -contestó riéndose bajito-.

- Que exagerado eres -dije con una pequeña sonrisa-.

Estuvimos hablando mucho más rato, me encantaba poder estar tranquila con él, hablar con él me tranquilizaba, me daba paz.

Cuando ya sonó la música para levantarnos, Paul y yo bajamos de la cama, pasé por delante de Naiara y vi que seguía dormida.

- Paul, ve yendo tú, ahora voy vale? -Me puse de puntitas y le di un beso en la mejilla-.

- Vale guapa -se fue para cambiarse-.

Me acerqué a la cama de Naiara haciendo el máximo silencio posible.

- DESPIERTA YA VENGAAA -Me tiré encima suya causando que ella se incorporase y yo cayese al suelo- oye tampoco hacía falta tirarme -le dije mientras tocaba mi culo- me acabo de reventar el culo.

- Mierda Olivia perdón, es que eres tonta que puto susto me has dado desgraciada -se levantó y me ayudó a levantarme- ahora vas a tener que dormir con un ojo abierto, porque un dia de estos te la voy a devolver -dijo riendose mientras saliamos para hacer el mini desayuno ya que hoy había fitness-.

- Pues duermo acompañada así que tú verás -bromeé-.

- Dos por uno -las dos reímos-.

Me cambié y me puse unas mallas grises cortas y una camiseta blanca.

Fui hacia la cocina para desayunar y ahí estaban ya todos.

- Buenos días niños -les saludé mientras iba a por una manzana-.

Eres tu... Siempre lo serás (Paul Thin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora