3 de diciembre

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Me desperté por el ruido de algo, bueno, más bien de alguien.

Alguien estaba roncando justo al lado de mi oreja. Paul y yo estábamos dormidos tipo cucharita, teníamos las piernas entrelazadas y él me abrazaba por la espalda.

Me giré por el sonido molesto.

- Que alguien le calle por favor -dijo Salma, al menos eso creo por la voz que tenía-.

- Paul -susurré- Paul, despierta.

- Que pasa? -contestó en el mismo tono pero aún sin abrir los ojos-.

- Paul mi niño roncas mucho -me reí bajito-.

- Tú nunca te quejas -respondió él apretando más el abrazo, cosa que hizo que nuestras caras quedarán muy cerca, aunque él aún no abría los ojos-.

- Porque me acabo de dar cuenta bobo -le empecé a acariciar el pelo-.

- Qué hora es? -abrió un poco los ojos y me sonrió levemente- pero que niña más guapa no? -me dio un beso en la mejilla-.

- Calla idiota -le di un leve empujón en el hombro- son las 8, y yo que tú tendría que ir con cuidado cuando estes desayunando porque has despertado a varias personas.

- Tu me defiendes -me sonrió vagamente-.

- Ahh, Nonono señorito, de esto de encargas tú -le dije señalándole con el dedo y dándole en el pecho-.

- Mala -susurró para después volver a taparse y cerrar los ojos- te importa que duerma un poco más?

- Tranquilo, duerme bonito -después de decir esto me dio un beso en la frente y procedió a dormirse-.

Yo me quedé despierta acariciándole el pelo, supongo que me podía entretener un rato haciendo esto.

La música empezó a sonar y todos empezaron a despertarse.

- Ya? -preguntó Paul a modo de queja-.

- Venga arriba vago -me incorporé y bajé de la cama-.

- Que digas vos a alguien que es vago es irónico boluda -decia Lucas mientras pasaba por mi lado y me despeinaba un poco-.

- Idiota -susurré-.

- Boluda te escuché!!!

- Te amo!!!

Paul bajó de la litera y fuimos a la zona de aseo, ahí, él me dio un beso en la frente y se fue a cambiarse.

Yo también me fui a cambiar y me puse unas mallas largas negras y una camiseta ancha azul.

Me fui a hacer el mini desayuno y los chicos aún no llegaban, cosa que me parecía bastante extraña. Como vi que no venían, me levanté de nuestra mesa y fui hacia la otra.

- Uyy, mirar a quién tenemos por aquí -Dijo Salma mientras yo me acercaba para abrazarla- Buenos días Oli.

- Buenos días Salma -contesté-.

- Vente aquí Olivia -Naiara cogió una silla y la puso a su lado-.

Desayunamos y las tres mantuvimos una conversación bastante animada, la verdad es que Salma era muy maja, aunque tenía poca comunicación con ella.

Cuando terminé volví a la zona de aseo y vi a los chicos buscando algo.

- Oye creo que no tengo ni un calzoncillo ahora mismo -decia Paul, quién aún ni se había cambiado-.

- Hermano cógeme unos a mí -le contestó Alex, quien parecía que se iba a meter a la ducha, pero al ver que Paul no encontraba su ropa interior, se acercó a él-.

Eres tu... Siempre lo serás (Paul Thin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora