Unidos por el Destino (Polin Fanfic)

CAPITULO 4: DESPEDIDA BAJO LA LUNA

Querido y gentil lector,

La temporada de Londres siempre está llena de sorpresas, pero esta última velada ha sido particularmente reveladora. Permítanme ponerlos al día con los eventos jugosos de la noche.

Los murmullos no cesaron tras el deslumbrante cambio de imagen de la señorita Penélope Featherington, que dejó sin duda a más de alguno gratamente sorprendido e intrigado. Llevándose más de una mirada de los caballeros presentes, la señorita Featherington brilló como nunca antes. Y Hablando de caballeros intrigados, Lord Debling no perdió el tiempo en acercarse a la señorita. Se dice que fueron vistos compartiendo durante toda la velada, además de bailar nada más y nada menos que el vals. ¿Podría este ser el inicio de un nuevo romance? Solo el tiempo lo dirá.

Por otro lado, en la noticia más novedosa para nuestras debutantes, el Vizconde Bridgerton ha anunciado oficialmente que está en búsqueda de una esposa para esta temporada. Así que se inicia oficialmente la carrera para poder atraparlo. ¿Quién será la afortunada que conquiste el corazón del vizconde? Las apuestas están abiertas, y esta autora estará observando de cerca.

Manténganse atentos, queridos lectores, porque esta temporada promete estar llena de intrigas, romances y, por supuesto, muchas sorpresas.

Revista de Sociedad de Lady Whistledown

Abril de 1824

Penélope despertó con los primeros rayos de sol entrando por su ventana, su mente aún llena de los recuerdos de la noche anterior. Mientras se vestía, no podía evitar sonreír al recordar cómo Lord Debling la había cortejado en el baile de Lady Danbury. Fue la primera vez que se sintió como el centro de atención en un baile.

El cambio en su apariencia había sorprendido a muchos, y eso le complacía, pero no era lo único por lo que estaba emocionada. La atención genuina de Lord Debling es lo que había hecho la noche tan especial. Recordaba su sonrisa amable, sus palabras corteses y la forma en que la había hecho sentir especial.

Bajó las escaleras con una ligereza en su paso, encontrando a su madre en el salón, ocupada organizando cuentas. Lady Featherington levantó la vista y le sonrió, con esa sonrisa que tenía cuando planeaba cosas.

—Buenos días, Penélope —comentó su madre—. Anoche en el baile vi cómo los caballeros hablaban de ese vestido de color tan aburrido que llevabas. Al menos sirvió para tener la atención de un hombre en la noche. Esperemos que Lord Debling sienta verdadera curiosidad por ti y no haya sido solo cortés —dijo, volviendo a sus papeles.

Penélope asintió, pero no pudo evitar sonreír.

—Gracias como siempre por tu apoyo, mamá —le respondió con un tono de ironía.

Antes de que Lady Featherington pudiera responder a su comentario, la llegada inesperada de un carruaje atrajo su atención. Ambas se dirigieron a la ventana, y Penélope sintió que su corazón se aceleraba al reconocer la figura de Lord Debling descendiendo del carruaje.

—Tal parece que hoy es nuestro día de suerte —dijo Lady Featherington con una sonrisa satisfecha—. Tienes un pretendiente.

Lord Debling fue anunciado por Varley, la ama de llaves, y entró en el salón con una elegancia natural. Sus ojos se iluminaron al ver a Penélope, y se inclinó en una respetuosa reverencia ante ella y su madre.

—Buenos días, Lady Featherington. Señorita Featherington —saludó, su voz tan amable—. Espero que no sea una molestia, pero he venido a ver si la señorita Featherington me concedería el honor de acompañarme a un paseo esta mañana.