Hestia: ¿Y bien? ¿Se puede saber por qué te demoraste tanto en el Distrito del Placer? Ushi ya me contó el porqué fueron, pero luego desapareciste.
Tn: Fui... fui perseguido por las amazonas, especialmente una que me dio mucho asco.
Hestia: Ah, sí, y luego ofreciste tu para Excalibur para salvarte.
Tn: Puedes confirmarlo con Hermes.
Hestia: ¿Hermes estuvo ahí? Bueno, no me sorprende.
Ushi-chan: ¿Lograste encontrar a Haruhime?
Tn: No, pero sí hablé con una chica que la conocía. Era una kitsune de cabello rubio y pelaje del mismo color. Es la única trabajadora que vi con esas características.
Ushi-chan: Tn-san, ella es Haruhime.
Tn: ¿Qué?
Ushi-chan: Será mejor si te lo explico bien. Haruhime era hija de una familia noble fiel a los dioses del Medio Oriente, por lo que, como comprenderás, era tratada como una princesa.
Ushi-chan: Okita-san y yo la conocimos cuando Takemikazuchi-sama nos llevó a conocerla. Éramos grandes amigas a pesar de lo tímida que era, pero un día alguien de su familia la acusó de robarse una ofrenda y comérsela, algo que es prohibido, y la echaron de su familia. Según Okita, fue exiliada y capturada por una familia de bandidos que la vendieron como esclava hasta que fue comprada por Ishtar.
Tn: Eso explica por qué una doncella tan joven trabajaría de esa forma. Ni siquiera parece que le gustara hacerlo, pero...
Hestia: Déjame adivinar, intentó seducirte.
Tn: Te juro que fue así, pero se desmayó antes de empezar. Solo me vio el abdomen y se sonrojó hasta desmayarse.
Hestia: Claaarooo... -comienza a buscar un bate con el cual pegarle a Tn-
Ushi-chan: Espere, Hestia-sama. No creo que Tn-san mienta. Haruhime era una chica inocente y pura, y aunque fuera influenciada por Ishtar, no me extrañaría que conservara ese comportamiento. Además, no creo que Tn-san sea del tipo que se aprovecha de una mujer.