Ganas de verte (Pablo Aimar)

10. "Cuando cae el telón"

"Cuando cae el telón"

Siento que esta vez viene por mí
Y me ataca en la oscuridad
Hoy no quiero más saber de mí
El futuro prende mi ansiedad

(Cuchillos guantanamera, Airbag)

10 de Marzo

Pablo había estado nervioso todo el día. Ana había decidido no ir a clases ese fin de semana y acompañar a su papá en los entrenamientos de la Sub17 para que él no se sintiera solo en medio de su nerviosismo ante el tan esperado encuentro. Placente estaba enterado de que su amigo por fin había decidido invitar a salir a esa mujer de la que tanto hablaba pero no dudó un segundo en reprocharle el haber transformado una cita en una salida familiar.

Sin tener muy en claro todavía a dónde irían, dejó que Magalí pusiera las condiciones: mate y bizcochitos había dicho ella y eso era justo lo que fueron a comprar esa mañana, antes de pasar a buscarla por el taller.

- Pa, ¿estás nervioso?

- ¿Qué?, no, nada que ver...

- Papá...

- Bueno, sí, un poco pero ya se me va a pasar.

- ¿Vos sabés que a mí me re gusta Magalí para vos, no?

- Ay, Ani, ¡basta con eso!

- Y sí, no te hagas, yo sé que te gusta y está bien, mamá dice que hace mucho que no salís con nadie.

- ¿Eso que tiene que ver?

- Y pa, que estás solo todo el tiempo, más cuando no podemos venir. Qué se yo, te haría bien estar con alguien y Maga es una divina.

- Sí bueno, pero no es tan fácil mi amor.

- ¿Por qué no?

- Bueno, para empezar, no sé si te diste cuenta pero Magalí está saliendo con alguien...

- ¿Y, qué tiene? El chabón ese no le cae bien a nadie.

- Jajaja pero no digas eso, si ella lo eligió, por algo será.

- ¿Y qué?, puede equivocarse, ¿o no?

- Basta Ana.

- Sí, ¿qué tiene? A vos te gusta y creo que vos también le gustás a ella.

- No es tan fácil hija.

- Pero papá...

- Basta, en serio y mirá, no le digas esas cosas a ella, ¿estamo?

- Sí, entendí.

Cuando padre e hija arribaron al taller no había ni rastros de Magalí. Después de unos minutos, Pablo optó por llamarla ya que ella no respondía sus mensajes, capaz se durmió pensó rogando que sólo fuera eso. Después de no obtener respuesta, bajó del auto y se encaminó al salón, encontrándose con una preocupada Josefina que le dijo que hasta anoche había hablado con ella y sólo la había notado algo nerviosa.

Ansioso al no saber nada de ella, trató de encontrar una explicación que no fuera asumir que los había dejado plantados. Magalí no parecía ser de aquel tipo de persona pero, mientras esperaba afuera del taller, con su hija hablando en el auto con Josefina, ya no estaba seguro de qué pensar.

- Supongo que tenían una especie de cita.

- ¿Eh?

- Sí, la nena y vos con Maga.

- Ah, sí, algo así. ¿Por qué?

- Bueno, Magalí tiende a tener este tipo de crisis cuando algo se sale de sus patrones de "normalidad", ¿entendés? Cuando algo nuevo la asusta se paraliza.