SUNSET X VIBES

CAPÍTULO 24:

Claro de luna en la noche blanca.

El fresco aroma de las flores de Kannika en medio de la noche flotaba a través de las finas cortinas en el dormitorio del Gran Presidente de Soul Jewelry Company, que dormía profundamente en compañía del chico quien mantenía un dulce sueño en su corazón. Los párpados de la pequeña personita se movían lentamente de acuerdo con el movimiento de los ojos en su interior, hasta que las cejas delgadas se arrugaron como si esa persona no pudiera reaccionar.

"Salin..."

Una profunda voz llamó a la personita sobra la cálida cama en voz baja. La persona dueña del nombre abrió ligeramente los párpados y parpadeó para ajustar su visión a través de la oscuridad.

El dulce rostro se giró para mirar a la persona a su lado que estaba dormido. Antes de barrer con su mirada alrededor del amplio dormitorio, pero no encontró ninguna anormalidad, la puerta del dormitorio todavía estaba bien cerrada y las finas cortinas se balanceaban con el viento.

"Salin..."

La profunda voz volvió a llamar, pero esta vez venía con el regreso del aroma de las suaves y delicadas flires blancas que flotaba hastaxllegar a su nariz. La pequeña personita se enojó y preguntó.

"¿Eres? Phaya Suriyen..."

La delgada mano de la pequeña personita abrió la gruesa colcha y bajó sus piernas al lado de la cama. Sus ojos de color claro miraron por la ventana y pudo observar como el agua de la piscina ondeaba como si alglo la estuviera tocando. Su delgada mano la estiró para encender la lámpara y se inclina para recoger un objeto extraño que estaba cerca de sus pies.

"¿Flor de Kannika? Entonces, ¿por qué estás aquí?"

Pero en un abrir y cerrar de ojos, vio docenas de flores Kannika esparcidas a lo largo de un largo camino que conducía a la puerta de la habitación. Salin al ver aquello se sentía extraño e intentó despertar a la persona a su lado.

"Phi Sun." Una mano delgada sacudió su cuerpo, de inmediato el gran hombre abrió lentamente sus párpados.

"¿Qué ocurre, cariño?" El hombre alto se inclinó y se sentó, su cabello negro azabache estaba peinado hacia abajo sobre su frente, por lo que, casualmente lo levantó hacia atrás para volver a sus sentidos.

"¿En la casa de Phi Sun hay plantadas flores Kannika?" Salin mostró la flor que sostenía en su mano a su amante. Las espesas cejas del gran hombre se juntaron sin entender lo que la pequeña personita le quería comunicar y sacudió la cabeza en negación frente a la pregunta de su amante.

Suriyen trató de averiguar por qué esa flor Kannika estaba en su dormitorio, entonces todo eso se relacionaba con su amante. Hasta que unas frases que Salin solía decir, volvió a sonar fuerte en sus pensamientos. Cuando  aún no cumplía los dieciocho años de edad, en la noche de luna llena, un anciano de gran estatura que vestía una túnica verde esmeralda aparecía frente al joven y a menudo aparecía junto con el fresco aroma de las flores de Kannika, luego desaparecía antes de que se pusiera la luna y fuera reemplazada por el sol naciente. Pero cuando desaparecía dejaba una fragante flor sobre la almohada junto al hermoso chico de suaves y blancas mejillas.

"¿Phaya Suriyen vino a verte aquí?"

Salin que no estaba muy seguro, asintió lentamente en lugar de responder.

De repente, el hombre de oscuros ojos miraron hacia la cortina transparente que se movía levemente por el viento, por lo que, el gran hombre abrió la gruesa manta y  se levantó de la cama para caminar hasta allí y abrir la cortina. Pero esta vez en la piscina vio que había un hombre guapo con una túnica verde de pie que miraba hacia el dormitorio.