Si de placeres culposos hablamos, tendríamos que mencionar la miel de tu mirada,
la dulzura de tus sonrisas
y lo hechizante de cada una de tus palabras.Mi placer culposo es que te anhelo,
Desear ser la causa de tus sonrisas,
de todos tus desvelos.
Si sabe tan dulce el poder,
la maldad brota pero
¿qué se le puede hacer?
Si amo la sensación de estar a punto de caer,
de estar al borde entre el mal y el bien.Si las moralidades son inútiles
Y persiste el deseo del solo ser,
Llegar a tu lado hasta la cúspide
Y luego dejarme caer.
¿Estoy lista para más mentiras?
Siempre y cuando lleguen con el dulce sabor de tu sonrisa.Muerde la manzana
vive una vida de pecado,
me entrego al deseo,
y es lo más dulce que he probado.Porque llega la noche
y con ella las llamas,
brotan de entre las sombras
el aroma de tus trampas.
Tus mentiras me arrullan,
me cantan baladas.
Es mi gusto sentirme culpable al desearte,
querer mirarte por horas como una obra de arte.Es querer arder en las llamas de tu infierno,
o elevarme contigo hasta el cielo.
Es sentirme viva cuando en los brazos de la muerte me encuentro.
Y aunque es incorrecto lo que hace que me eleve,
el placer motiva
más la culpa interfiere.
YOU ARE READING
Un poco rota..
PoetryHecho de fragmentos de mi alma, para aquellos que alguna vez se han encontrado en pedazos.