Cintas Rojas

05

JIMIN
(PRESENTE)

De nuevo el pueblo ha sido manchado de sangre y la comunidad de Rainy ville asegura que se trata del asesino serial cintas rojas, como las personas le han apodado debido a las características de sus asesinatos, el miedo se ha dejado ver en los habitantes, la victima fue identificada como Kang Mey de 23 años de edad y la fiscalía a tomado el caso como uno de los más importantes en los últimos años.

Apagué el televisor y aspiré una gran bocanada de aire, porque sin darme cuenta contuve la respiración escuchando la noticia. 

Ese asesino es Jungkook, estoy seguro, las cintas rojas... pero sobre todo la flor de tigre que tenía sobre el cabello, ese es un dato que yo se, poque vino directamente de el, me estremecí hasta los huesos con solo recordar mi pasado, ese mismo que tanto me había atormentado y perseguido estos años.

Aún así quiero ver a Jungkook...

Suena escalofriante sabiendo que estoy hablando de un asesino serial, yo mismo he cuestionado mi salud mental.

Este asesinato demuestra que sigue por aquí, en algún lado del pueblo.

Por mucho tiempo pensé que se había ido  y simplemente me había resignado a jamás volver a verlo.

Es perturbador si me pongo a analizar mis propios pensamientos, sin duda necesito un psiquiatra.

Pese a todo lo malo, los momentos que viví con Jungkook siguen atascados en mi corazón, y dentro de mi sentía que alguna explicación debía haber, y si no, estaba dispuesto a correr el riesgo, aún así sabiendo que lo que arriesgo es mi propia vida

Mi corazón necesita una respuesta, y solo el puede dármela.

-ˋˏ ༻❁༺ ˎˊ-

—No puedo creerlo Chim Chim, lo logramos— Los ojos de Tae se aguaron y al verlo, los míos picaron. —Lo logramos Tae Tae.

Pasó una mano por mi espalda, para atraerme en un abrazo hacía el, mientras mirábamos el lugar con los ojos cristalinos y el olor de las paredes recién pintadas, que impregnó nuestras fosas nasales.

—¿Le gustaría acompañarme, a tomar el primer Coffee latte que se haga en este lugar?—Me mostró los dientes en su sonrisa cuadrada

—Sería un honor— dije, sentándome en la barra mientras él se ponía un mandil y se adentraba en la zona de preparación.

Mis sueños cambiaron abruptamente hace años, de una manera que jamás imaginé, la vida me llevó por caminos diferentes  y conocí a Kim Taehyung en la Universidad y cuando ambos tuvimos que dejarla por motivos diferentes, comenzamos a trabajar en una cafetería, he visto a Taehyung diario durante unos 5 años, se ha convertido en mi mejor amigo, mi confidente y ahora, mi socio.

Luchamos por un sueño, tener nuestra propia cafetería, ahorramos y ahorramos, limitando nuestros propios gastos del departamento que compartimos, teniendo que comer muchas veces solo un ramen durante el día, para no perder la meta de nuestros ahorros, trabajamos horas extras cada que podíamos y regresábamos a casa con los pies hinchados, metiéndolos sobre una bandeja con agua caliente, mientras mirábamos la tv, intentado olvidarnos del cansancio.

Somos un buen equipo y por eso estamos viendo los frutos de eso.

Café Smeraldo abre las puertas al público este fin de semana, hemos realizado lo que tanto habíamos anhelado, pero sabemos que no es tan fácil mantenerlo, así que muchas horas más de trabajo nos esperan.

No podía sacarme de la mente a Jungkook.

—Aquí tiene su latte señor— dejó dos lattes sobre la barra y se sentó a mi lado

—¿Qué te pasa?

Era imposible ocultarle que algo me pasaba, me conocía tan bien y yo era incapaz de mentirle, porque por más turbios que fueran mis pensamientos, era la única persona con la que podía hablar del tema.

—Jungkook apareció de nuevo—dije y Taehyung tragó de golpe el café en su boca.

—¿Lo viste?—Se estremeció en su lugar como si un escalofrío recorriera su cuerpo.

—No— Negué con la cabeza para tranquilizarlo, porque se que le preocupa.

— Pero quiero verlo...

—Jimin, gracias al cielo, no digas esa tontería de que quieres verlo—Se puso una mano en el pecho para calmar el susto— esto es serio, explícame bien , ¿cómo es que apareció pero no lo has visto? 

—¿No has visto las noticias?—Negó—Bueno, se que acabas de llegar de visitar a tus padres y no he podido ponerme bien al corriente, pero el fin pasado, Yoongi y yo encontramos un cuerpo en el bosque...

—¿Que, que?— se quedó pasmado pero en cuanto recuperó el aire terminó de decir—¿Que hacían en el bosque? por Dios Jimin, te he dicho que no vayas ahí, dime si Yoongi te llevo para matarlo yo mismo.

—No te preocupes , no nos adentramos en bosque, solo... nos quedamos hablando bajo la sombra de un árbol, en la entrada.

— Jimin, que miedo— Volteó a todos lados como si tuviera delirio de persecución.— ¿Porque dices eso de que quieres verlo?

—Porque siento que lo necesito...

—Un psicólogo , eso necesitas.

—Es solo... que me quede con tantas dudas Taehyung, esas dudas me han atormentado años...

—Jimin, es normal que ese pasado te atormente de esa forma, lo que no es normal, es que quieras ver a un asesino que intentó incriminarte en uno de sus propios delitos, eso está mal. Deberías sacar una cita con Hanna, es buena psicóloga.

Taehyung tiene razón, estoy enloqueciendo, Jungkook intentó incriminarme en un asesinato y si no hubiera sido por mi padre, probablemente estuviera en la cárcel, pagando un asesinato que yo no cometí

Yo lo sabía, Jungkook es un asesino, se muy bien que los sociópatas son encantadores, tal como él, me había hecho daño, no físico , pero sí emocional, pero algo dentro de mí se negaba, no podía odiarlo, menos cuando recordaba nuestro tiempo juntos, nuestro primer beso, nuestra primera vez, sus ojos y su sonrisa.

Durante mucho tiempo a escondidas iba a la zelkova, todos los días esperando verlo, hasta que me canse, y me di cuenta de que estaba mal.

Ahora que Jungkook había dado señales, me preguntaba si debía regresar, con suerte, quizás lo encontraría.

Me estaba volviendo loco, estaba buscándome problemas, pero comencé a buscar una linterna entre mis cosas, dispuesto a ir al bosque, sin importarme que había oscurecido. 

Solo ... necesito encontrarme con Jungkook.

.

.

.

.

Capitulo corto:)