Secuestrado

Capitulo 2

Luego de una semana y media, era momento de volver a comisaría e intentar seguir como si nada pasara.

Ese día llegué directo a los vestuarios a cambiarme. Tuve que esperar varios minutos para poder hacerlo, habían terminado las vacaciones y todos los agentes  habían regresado a trabajar. El lugar también estaba lleno de nuevos alumnos.

Mi teléfono comenzó a sonar.
- Si?
- Donde estas tete? - era Isidoro del otro lado de la llamada.
- Tu donde estas? Ya deberías haber llegado!
- Me dijiste que me esperarías en el aeropuerto. Estoy aquí!
- Como que en el aeropuerto? Estoy en comisaría.
- Pues ven a buscarme! Por que no me esperaste?
- Demoraste mucho. No atendias en móvil, entonces tome un taxi y vine a comisaría.
- Y ahora que hago?
- Toma un taxi! Aquí te espero. - corte la llamada.

Isidoro me había escrito para saber si tenia noticias de Gustabo. Él se había intentado comunicar con el rubio sin éxito y estaba preocupado. Debía estar cerca del joven y controlar sus acciones, en caso de ser un peligro no me interesaba sacarlo del camino.

Todos era reemplazables, todos menos Gustabo. Él era perfecto para mi plan, lo necesitaba pero también lo quería a mi lado.

Cuando al fin pude cambiarme la ropa, salí al parking a esperar a Isidoro que me había escrito diciendo que llegaría en pocos minutos. Prendí un cigarro y camine hasta el fondo del recinto para esperarlo sin interrupciones.

Pasados varios minutos la silueta del joven se dejó ver por la entrada del parking, siendo casi atropellado por un patrulla que salía por la puerta equivocada.
Isidoro insulto y amenazó al alumno que conducía y luego volvió caminar.
Al verme parado en el fondo hizo un pequeño trote para llegar a mi lado.

- Bueno ya estoy.
- Vístete y entra de servicio así comenzamos a trabajar.
- Si si. Pero, ya llego Gustabo?
- No lo he visto en radio. Tal vez se tomó unos días más.
- Tu crees? - dijo incrédulo.
- No lo se. Ya lo conoces. Se la pela todo.
Isidoro se quedó pensativo unos segundos, luego entró al subsuelo de comisaría y se dirigió a los vestuarios, yo simplemente me quedé allí parado.

Estaba más que claro que no podía perder de vista a ese imbecil, no debía olvidar que Isidoro era solo una tapadera y que en realidad el que se encontraba frente a mi era Gonzalo, un agente de la CIA que si se ponía a imbestigar podría tal vez llegar hasta la verdad.

Pero no iba a darle más vueltas al asunto, simplemente ese día patrullaria con normalidad sin volver a mencionar al rubio a menos que el joven lo haga.

Saque un Z y salimos a recorrer la ciudad, así como la policía había vuelto de sus vacaciones, los delincuentes también. 

Varias alertas de robo saltaban a la vez, parecía que la policia no daba a basto.
La ciudad estaba totalmente fuera de control.

- Esto es una locura tete. La policía parece que no sabe que hacer? No está Conway tampoco?
- No lo se neno. Yo también volví hoy a la ciudad, lo olvidas? No se nada de nadie realmente.

Claro que sabía sobre Conway. Me había ocupado de mandarlo lejos y mantenerlo muy ocupado. Estaba desesperado buscando a su hijo y había seguido unas pista que mis pájaros se habían encargado de dejar para que él las encuentre. No había sido nada obvio, todo lo contrario, incluso creí que no podría descifrarlo a tiempo. El viejo era un obstáculo en mis planes y lo necesitaba lejos cuando volviera a comisaría. No lo mataría, no aún. Todavía podía ser útil en mis planes.

Primero atendimos un robo a farmacia, el maleante se nos escapó porque otro patrulla que venía de frente nos chocó.
Volvimos a comisaría a cambiar el vehículo y luego atendimos un robo a Amunation. Con éste fue diferente, en pocos minutos fue detenido y empapelado.

Las horas pasaban entre código 3 y persecuciones, aunque era agotador, me servia para mantener a Isidoro con la cabeza ocupada.

Volvimos a comisaría a cambiar el patrulla por unas mery, en un robo a Amunation había reaparecido el piruetas. El más joven se sentía entusiasmado con perseguirlo y no me negué.
Una vez de nuevo en el lugar, empezamos la negociación.
- Como estas tanto tiempo! También regresaste de las vacaciones? - pregunto Isidoro muy animado.
- Pues si. Tocaba empezar la chamba. - le respondió entre risas.
- Cuantos rehenes tienes pavo?
- Solo al vendedor. - dijo y luego miró al más joven.- Y tu compañero?
- Él es mi compañero hoy. - respondió Isidoro sin entender realmente la pregunta.
- No, te pregunto por el rubio hermoso que siempre estaba contigo. - dijo haciendo énfasis en "rubio hermoso" lo que me molesto bastante.
- Él no volvió de las vacaciones pavo. Saca al rehén así empezamos la persecución. - dije intentado no demostrar mi enojo.
- Que vacaciones? La última vez que estuve con él me dijo que no tomaría vacaciones.
- Cuando fue eso? - pregunto Isidoro interesado en la información que Mike podría darle.
- Antes de irme hice un último atraco, él estaba solo, hicimos la persecución y me atrapó, porque choqué - aclaró riendo. - Tuvo que llevarme al hospital cargándome en brazos. Luego me dejo ir sin ponerme la multa.
- Entonces esta vez tendrás doble multa. - dije perdiendo la paciencia con él.

Terminamos la negociación y empezamos la persecución. Quería atraparlo, era algo personal. Ese maldito quería algo con mi rubio. No lo permitiría, este idiota había entrado sólito en mi lista negra.

Casi media hora de persecución para terminar perdiendolo. Estaba furioso. A la próxima, no se escapa, como si tuviera que disparate, me daba igual. No sé escapará!

Volvimos a comisaría para hacer el 10-10, el cambio de turno había llegado y debía ir a visitar a mi adonis.

Fui a los vestuarios a cambiarme la ropa y ponerme de civil.
Por la puerta entro Noah Holiday.
- Buenas Freddy!
- Buenas Vacaciones. Como haz estado?
- Pues lleno de trabajo y problemas con esta comisaría. Ahora que soy comisario y Conway no está debo hacerme cargo de todo solo. Me alegra tu regreso la verdad! - dijo poniendo su mano en mi hombro.
- Que paso con Conway? Sabes donde fue? - pregunte haciéndome el preocupado.
- No lo se. Solo desapareció de un día para otro sin dar explicaciones. Un día llegué a comisaría con la noticia que era comisario y debía hacerme cargo de todo hasta tu regreso. - contó mirando el suelo.
- Pues entonces yo te ayudare a llevar esta comisaría y a organizar a los incompetentes de la malla. Al menos hasta que vuelva Conway.
- Si es que vuelve. - dijo mirándome.

Claro que no volvería, al menos no hasta tener al rubio donde quería tenerlo, en mis manos totalmente sometido.

Lady_Vermon 💀