𝕋𝕆𝕂𝕐𝕆 ℝ𝔼𝕍𝔼ℕ𝔾𝔼ℝ𝕊 𝕠𝕟𝕖 𝕤𝕙𝕠𝕥𝕤ꨄ︎

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Pedido hecho por: DisasterGirl2 yomerequetengue

El callejón con el eco de la pelea recién, el aire cargado de adrenalina y triunfo. Me adentré al almacén abandonado segunda de cerca por rindou y ran quienes me habían ayudado está vez cubriendo mi espalda, los destellos de los neones rotos jugaban sobre nuestros rostros sudorosos mientras avanzaba por los escombros rotos y sombras.

Ran me lanzó una mirada de complicidad, su sonrisa victoriosa reflejando el brillo de los focos intermitentes — Finalmente terminamos, fue muy fácil... Esa pandilla no sabrán que los golpeó — dijo con orgullo.

Solo pude asentir, con mi respiración aún agitada por la lucha — Gracias por estar allí, chicos. No lo habría logrado sin ustedes — sonreí mientras me detuve un momento para recogerme el cabello en una coleta, mi mente todavía girando por la intensidad de la pelea. Sin embargo, el ambiente festivo se desvaneció en un rincón oscuro donde izana, mi novio y líder de la pandilla tenjiku, nos esperaba con los brazos cruzados y una mirada de desaprobación, sus ojos lilas brillaban con una mezcla de celos y furia contenida, a su lado estaba kakucho sin decir palabra alguna.

— ¿Dónde demonios estabas, _____? — gruño izana, su tono áspero y cortando el aire tenso, podía sentir su mirada en mi caso quemándome mientras que rindou y ran observaban con desinterés, ya que estaban acostumbrados a ese comportamiento de su líder— No te vi en la reunión, y luego me entero de que te fuiste con estos dos idiotas.— Dijo lo último señalando a ambos, lo cual los hermanos haitani rodaron los ojos con desdén

Mi cuerpo se tensó, reconociendo el gesto posesivo en la voz de izana así que decidí hablar — lo siento, izana... Necesitábamos actuar rápido y no tuve tiempo de avisarte además esa pandilla traía bronca con los nuestros desde hace rato — respondí tratando de mantener la calma.

En ese momento rindou interrumpió con una sonrisa desafiante — No se preocupe, jefe. Estábamos bien cuidando de ella, no queríamos que la mujer de nuestro líder se metiera en problemas solo por qué su novio no estaba — mi mirada se clavó en la de rindou haciendo una seña para que guarde silencio si no quería ver explotar a izana.

Pude ver cómo mi novio apretaba los puños y sus ojos centellan peligrosamente, sin embargo, decidí intervenir con mi voz firme parándome en medio — Lo siento, izana, pero a veces las circunstancias exigen acción inmediata, no fue personal — el silencio se extendió en el lugar, estaba segura de que izana no se quedaría callado o lo dejaría pasar, no era tan flexible en esos casos.

En eso izana se acerca de una manera intimidante que hace que me sorprenda cuando me toma del brazo con fuerza — Te prohíbo que vuelvas a salir sin antes preguntarme, no quiero que salgas con los hermanos haitani, son una mala influencia para ti— dijo apretando un poco más mi brazo y acercándose más a mi cuerpo. Tanto ran como rindou rodaron los ojos y este último chasqueo la lengua.

— ¿Por qué no? No soy una niña — solté con molestia soltando un leve quejido de dolor por su agarre en mi brazo, no quería armar una escena en frente de los demás aunque ya estaban acostumbrados a nuestras diferencias para no decir discusiones.

Izana seguía manteniendo su ceño fruncido, con sus labios presionados desvía su mirada de la mía — Conozco a estos dos, saben cómo conseguí lo que quieren, y no se pueden contener esas ganas si estás sola con ellos — murmura manteniendo la seriedad de su voz mientras sus ojos no se despegaban de los dos chicos que estaban a mis espaldas.

— oiga jefe tampoco es tan así ~ — ran intenta mantener en la conversación, pero sé que de nada servirá, cuando izana está así soy la única que puede tratar con su temperamento.