Diario De una Bipolar EN EDICION COMPLETA.

La noche

Poco tiempo después conocí a una persona nueva en mi vida mucho mejor pero otro idiota, aquí no escribiré mucho, solo puedo decir que como la mayoría de los hombres solo eran palabras. me inventaba un mundo en el cual yo ya no creía y por ese motivo no logre enamorarme de el solo fue un pasatiempo en donde ambos ganábamos compañía.

De hecho el amor es una palabra que tengo en muy mal concepto y de la cual será difícil que cambie mi forma de ver y de pensar. Es bastante complicado definirlo y aún peor vivirlo si es que algo así se puede llegar a dar.

Lo más cercano al amor que he sentido se llama obsesión y no lo recomiendo por qué tampoco es sano. La única persona que merece nuestra obsesión somos nosotros mismos. Y nosotros mismos nos encargamos de abrir y cerrar la puerta del corazón, por eso considero que es mejor cerrarlo y votar la llave en la basura, al menos en mi caso.

Me adelantare un poco, en cierta ocasión estaba deprimida hasta la mierda, estaba pasando por una crisis lo bastante fuerte.

No me hacia feliz nada y tampoco me sentía feliz, era un estado donde todo me daba igual y me importaba un pito todo, cada día que pasaba mi día era una rutina.

Colegio, casa, colegio, casa y lo peor era que no tenía amigos ni en la casa ni en el colegio. En ese entonces si que odiaba mi vida y ahora quizá un poco peor. Solo fingía sonrisas:

-sonreír para fingir.
-sonreír para ver feliz a otro , -sonreír por que es lo único que queda.

Cada día se me hacían eternos y la noche era lo único que embargaba mi alma.

Fuera de la atención de la gente.

Fuera de la basura que ofrece el mundo.

Fuera de fingir ser feliz.

Encontraba mi paz en la noche, era para mi perfecta, era un encanto y sobre todo por que en los libros encontraba mi felicidad, era como desconectarte por un par de horas de tu realidad para entrar en la realidad de alguien mas que era ficticio, pero que me hacia feliz. En aquel momento también me embriague en la música sobre todo en el rap. Recordar esos viejos tiempos da nostalgia por qué en medio de tanta oscuridad siempre surgirá en el corazón un poco de esperanza y luz. El ser humano es un poco complicado y en algunos casos difícil pero siempre o en su mayoría de veces se aferra a la luz, yo me aferre a mi oscuridad con bastante deseos por qué ya había conocido la falsedad, la humillación, el estar en el colegio sola, aislada, el abuso y el engaño y pronto conocería algunas cosas que ya leerán.

En una de esas tantas noches en la que por casualidad no me encerraba alguien me pregunto:

- ¿Quién eres?-preguntaron como sabiendo la respuesta que yo daría y anticipando mis pensamientos dijo:
- caminas por la vida como alguien que no tiene fe, que no tiene un Dios y que no sabes ni quien eres- me miró con nostalgia y prosiguió. -esperas que venga un príncipe a rescatarte o vas a tomarte enserio tu vida.

Durante un buen rato me quedé pensando en lo que me dijo y yo no tuve más que decirle.

- en esta vida lo mejor es fingir no saber nada ni siquiera quien eres, entre más sabes de ella y de uno mismo mas problemas trae consigo y más loco te vuelves- respondí con duda e incertidumbre no sabía bien lo que decía y tampoco pensé mucho en aquellas palabras. Solo un rato después cuando estaba sola lo hice.

-maldición - repetía en mi cuarto al pensar en esa pregunta. no sabia quien era y tampoco sabia definirme, era un tipo de ignorancia y oscuridad donde no encontraba luz ni camino y la luz que encontré me llevo a la mierda en la que me encuentro hoy.

Esa noche me invitaron a cierta iglesia, estaba tan cansada que accedí a ir y no se por que, solo fui durante un tiempo y sentí que allí todo recobraría sentido, tenia amigos, ocupaba el tiempo en algo y olvidaba el rollo que la mente me inventaba cada día.

Me apoyaron y hubo un tiempo de mucha paz hasta que decidí recluirme en un lugar de oración.

Fue mi peor decisión.