"En la cima me mareo." Chloenette.

12): Final- Al borde de la cima.

No solo mi respiración era agitada, no encontraba explicación ni palabras para expresar lo que sentía, mi mente daba vueltas porque mi pecho me suplicaba que hiciera algo y a la vez nada, porque también mi mente decía muchas cosas.

─ ¡Hey! ─ Bonnix chasquio con los dedos en frente de mis ojos para que reaccionará. ─ Marinette... No hay tiempo, se acaba el TIEMPO. ─

***

("La hubieras elegido a ella." )- Aún pensaba en lo que Chloe me dijo, a qué se refería con eso?

Por más que tratará de recordar, no había rastro de que algo hubiera pasado entre nosotras, por qué? Por qué Chloe cambio tan drásticamente de un día al otro? No es acaso que las personas no cambian de la noche a la mañana?

Alya tocó la puerta y subió las escaleras, se quedó parada un momento observando alrededor, papeles escritos, un mapa y Tikki descansando en el hombro de Marinette.

─ Bien amiga, creo que te has vuelto loca. ─ Suspirando levante mi cabeza para mirarla. ─ Tal vez... Alya te puedo asegurar que algo sucedió. ─ Alya suspiro sobando sus sienes.

***

Mire los papeles en mi mesa, no dejaba de escribir pensamientos que cruzaban sin sentido en mi mente, pensamientos que yo nunca tendría.

- ¿Que puedo hacer para ayudar a París? - ¿Como pedirle disculpas a Marinette? - ¿Hablar con mamá y resolver nuestros problemas? - ¿Ser buena hermanastra con Zoé? - ¿Contarle a Marinette que yo se sobre.. sobre?

Leí, una y otra vez, lo que escribí y no tenía sentido, nada tenía sentido.

"¿Por qué le dije eso a Marinette?" - Volví a suspirar y me recoste en mi escritorio, mis ojos se cerraron lentamente con cansancio, también dejé mi cabello suelto, cambie más mi forma de vestir, ya no permitía que me abrieran la puerta, tampoco hacia cara de asco a cualquier cosa.

─ Debes ir al doctor señorita Chloe. ─ Escuche a mi fiel sirviente que me cuido desde niña Armand.

Solo pude suspirar era la décima vez que repetía eso. ─ No iré a ningún lado Armand... ─ Mi voz salió sutil, menos egocéntrica, más calmada, suave y con una pizca de tristeza. Sentí la mirada clavada en mi nuca como mil cuchillos de Armand, quien no sólo retrocedió 3 pasos atrás del asombro. "¿Tan mala había sido desde hace tiempo que reaccionan así? Como si fuera.." - Abrí mis ojos con sorpresa para terminar mis propias palabras. ─ Como si fuera... Otra persona... ─ Mis ojos se llenaron de lágrimas repentinamente obligándome a volver a mi misma posición, levante mi mano aún ocultando mi rostro en señal de que se vaya mi sirviente.

Esté no tardo en captar mi señal y obedecer inmediatamente. Me puse de pie al estar en soledad, cerré las cortinas de mi ventana y me dirigí al espejo enorme que tenía en mi habitación, no solo no me reconocía, sentía que cada día me perdía a mi misma.

"¿Quien soy? Quien era? Que quiero? Quien seré?" - Más preguntas rodaban por mi cabeza, que estaba sucediendo?

¿Por qué tenia recuerdos mezclados? En que momento Adrien y yo empezamos a salir y en qué momento Marinette y yo nos hicimos amigas, pero ahora nos odiabamos?