—Estás bien?
Había dormido, si, no había sentido ningún dolor a lo largo de la noche y después de la revisión que le hizo Yamaguchi concluyó con que no había recibido daños durante la pelea con piratas que había tenido. Al menos no hasta la mañana, donde por fin se bajó la adrenalina que todavía seguía en su cuerpo y pudo sentir los músculos destensarse y dejar solo el dolor del rudo movimiento en ellos
—Que?
—Que si estás bien— le volvió a preguntar Azumane tomando otra caja para llevarla a cubierta
Al parecer al capitán se le había hecho buena idea despojarse de todas las cosas que no eran necesarias en ese barco
—Porqué lo preguntas?— también tomó otra caja, siguiendo al pelicastaño a cubierta
—Te ves como...si no hubieras dormido..—Azumane apiló la caja sobre las demás que ya habían movido
—Estoy bien, no te preocupes— la verdad, no estaba bien, si había dormido, pero no lo suficiente por estar pensando en cierto mapa del cual le habían negado saber. No sabía por qué se preocupaba tanto por ese pedazo de papel
—Lo hiciste muy bien, sabes? Quien te enseñó a pelear de esa forma?— el segundo oficial se recargó de espaldas a la orilla del barco, suspirando por el cansancio y peinando su cabello hacia atrás con sus dedos
—Aprendes a defenderte cuando estás en constante peligro— sonrió lo más dulce que pudo
—Debió ser duro
—Agotador, sería la palabra correcta
Se quedaron en silencio, un silencio cómodo, poco asfixiante. Conforme pasaban los días, más se daba cuenta que nadie sabía nada sobre él más que su nombre, no le disgustaba, más tampoco le agradaba
—Ya acabaron? Van demasiado lento— un chico bajito, con el cabello de enfrente al parecer tintado de amarillo se les acercó columpiándose por las velas, con un catalejo en mano y la sonrisa más pícara que había visto
—Ya debes de conocerme, Nishinoya Yuu, encantado de conocerte, solecito
Solecito?
—solecito?— preguntó Azumane pausando sus movimientos
nunca podría acostumbrarse a que de repente le hablaran con tanta confianza, al parecer todos los piratas de ese barco tenían esa costumbre
—tu nombre tiene el símbolo de 'sol' en el, además, tu cabello es muy brillante— Nishinoya con una sonrisa se le acerco y estiró su mano a el— por cierto, es increíble eso que le hiciste al rey del shiratorizawa
hizo una mueca de confusión, parpadeando múltiples veces. Como es que Nishinoya sabía que él había sido el causante de eso?
—Como..?
—Que como sé?— Nishinoya dejó el catalejo encima de una caja y se cruzó de brazos— por que, cuando paramos en Shiratorizawa, muchas personas llegaron al barco a preguntar por cierto pelirrojo engañoso "que se parecía mucho al que hizo que el rey perdiera el color en su cabeza"
Azumane dejó escapar una risa de sus labios, negando con la cabeza y limpiándose las lágrimas. Le siguió Nishinoya siendo contagiado por la gracia de la anécdota
Su rostro se tornó rojo de la vergüenza, bajando la mirada y apretándose en su lugar. No sentía vergüenza de quien había sido, pero las desiciones que había tomado lo atormentarían por siempre
He iba a protestar, soltar todo el aire retenido en el y explicarles que no lo había hecho con intención. Hasta que el capitán se hizo presente en cubierta, haciendo que su corazón se aplastara contra su pecho, recordándose lo que el día anterior le había prometido
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EL ECO DE TU BARCO EN MI CORAZÓN
Fanfic-Soy el capitán del más famoso barco pirata. Yo hago lo que quiera- Kageyama lo observó desafiante, penetrándolo con sus profundos ojos azules -Soy un estafador- Hinata apretó sus manos en la cubierta del barco, sintiendo como la madera se clavaba...