Capítulo 128 - Un recuerdo y un valor

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[Ah, no debería olvidarme de comprar recuerdos para Macbeth y para mamá también.]

Continuamos mirando alrededor y pudimos comprobar muchas cosas diferentes cuando de repente Selena-sama habló de los souvenirs.

¿Entonces todas esas compras que hizo antes eran solo para ella? Quiero decir, solo recordó haber comprado algo para su madre y su prometido.

[Padre] (Laurier)

[Por supuesto.] (Calis)

Puedo entender lo que Laurier quiere decir incluso sin que ella lo exprese con palabras.

Había planeado comprar recuerdos para Sasha y los demás desde el principio. Pero ahora que Selena-sama lo mencionó antes que yo, parecería que yo también lo acabo de recordar y me deja un mal sabor de boca. Suspiro...

[Celeu comprará algo para mamá y los demás también, ¿verdad?] (Selena)

[Un… Si pudiera entonces lo haría…] (Celeu)

¿Por qué Celeu está sufriendo por algo así?

¿Ah, será porque no sabe mucho de souvenirs ya que no sale muy a menudo?

¿Le preocupan cosas como la reacción de su familia ante sus recuerdos? ¿Su padre, que está abrumado por el trabajo y apenas tiene tiempo para ellos, aceptará su regalo?

[Uh… hm… Padre…] (Celeu)

[¿Qué es?]

[Uhm… ¿papá lo recibirá …?] (Celeu)

Miro los ojos de Celeu-sama llenos de miedo y dudando si su padre, el rey, aceptaría un recuerdo para él.

Creo que estoy empezando a conocer más a este niño a medida que habla más sobre sí mismo hoy. Con estos pensamientos en mente, espero poder tranquilizarlo de alguna manera.

[*Sonríe* *Asiente* Por supuesto, papá lo tomará.]

[Uhm… ¿no será solo una molestia…?] (Celeu)

[No hay ningún padre en este mundo que se sienta infeliz al recibir un regalo de sus hijos, ¿sabes? Bueno… yo, por lo menos no me sentiría así ]

El rey no tiene ninguna razón particular para rechazar un recuerdo de su hijo y dudo mucho que rechace cualquier cosa que Celeu pueda darle.

Aun así, ofrezcamos algunos consejos al niño pequeño para que pueda aumentar sus posibilidades.

[Sin embargo, creo que sería mejor que intentaras dar tu regalo cuando no haya nadie más alrededor. Después de todo, algunas personas se avergüenzan fácilmente.]

Todavía no puedo acostumbrarme a la sensación de hablar con un príncipe como si fuera mi propio hijo, incluso después de pasar casi un día entero con él…

Pero es solo por hoy, así que ¡ten paciencia! Mientras intentaba reavivar el fuego de mi cansado espíritu, Celeu-sama finalmente tomó una decisión.

[Entiendo... ¡Haré lo mejor que pueda!]

[Un, bien tu puedes.]

Celeu-sama entonces comenzó a buscar recuerdos para el rey y la reina. Me parece que lo está pasando mal. Debe ser porque es su primera vez. Siendo ese el caso, la princesa, que se dio cuenta de lo mismo, interviene para ayudarlo a elegir los regalos. Considerando lo mucho que conoce a sus padres, no debería haber ningún problema con la elección del regalo de Celeu.

¡Puedes hacerlo, Celeu!

¡Ah, realmente, por extraño que parezca, es realmente reconfortante ver a los niños hacer su mejor esfuerzo y terminar alentándolos!

Por otro lado, también estoy eligiendo souvenirs junto con Laurier para nuestra familia.

Aunque estoy en apuros.

Quiero decir, ¡hay demasiadas cosas que me gustaría ofrecerle a Sasha!

¿Ah, sí? ¿Acaso estos juguetes no le irán bien también a Mint y Basil?

[Padre… *Tira*] (Laurier)

[¿Hm? Oh, vamos, querida.]

Mientras estaba en medio de la contemplación, Laurier me llamó, aparentemente pidiéndome que la cargara una vez más.

Laurier se está comportando bastante mimada hoy, a pesar de que estamos fuera de casa. No es que me importe, pero ¿está actuando así deliberadamente por Celeu-sama y Selena-sama?

Oh, Dios mío, ¿de verdad quieres acaparar a tu padre para ti sola? ¡Qué hijita más infantil y bonita! ¡Te hace aún más linda!

¡Ella realmente se parece a su madre en que ambas son dulces y adorables!

[Padre, por favor abrázame más fuerte…] (Laurier)

[Qué niña más mimada.]

[¿Es malo?] (Laurier)

[Claro que no. Deja que papá te mime más.]

Quiero decir, ¿cómo puedo negarme cuando me mira con esos ojos tan lindos? ¡Fue tan efectivo que no pude evitar sonreír!

Realmente me gustaría decirle al mundo ahora mismo que mi hija es la más linda de todas, pero... No, no puedo. Soy el tranquilo y genial Calis-san, así que me limité a mantener mi dulce sonrisa.

Como decían, la ternura es justicia, ¿no? Estoy totalmente de acuerdo.

ME REENCARNÉ COMO EL PADRE DE LA VILLANADonde viven las historias. Descúbrelo ahora