In The Dark °•[Nico di Angelo]•°

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My Wife.
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Narrador Pov.

— Ven, Nico.— Hades toma la mano de su hijo y lo guía suavemente por el castillo—Necesito que hagas algo.

— ¿A dónde vamos? — Mira hacia atrás, exaltado y agitado—¡Yo…! ¡Yo debo buscar a Bianca!— Gritó.

— Escucha a tu padre.— Le reprendió levemente haciendo que el pequeño de cabellos oscuros se callará.

— Pero, Bianca…— Balbuceó Nico, cohibido por el tono de voz alto que utilizo su padre.— Ella… ¡Yo, debo!

Hades lo interrumpió.

— Después podrás buscarla, no me opondré si es que eso deseas.— Dice Hades finalmente, resignándose a la petición de su hijo menor—Puedes considerarlo uno de tus regalos por tus inminentes nupcias.— Agrega.

El pelinegro sintió que su pecho se llenaba de calor y felicidad.

Ahora podría buscar a su hermana con el permiso de su padre, la sacaría del inframundo y los dos volverían al Campamento Mestizo juntos.

Se detuvieron frente a una habitación donde un montón de esqueletos con algo de carne se mantenían ocupados preparando las decoraciones. El hijo de Hades mira la escena, curioso.

— Vendré por ti en una hora.—Hades suelta su mano. Nico se frota la mano que su padre había tomado y lo miro atentamente— No les des dolores de hueso a la servidumbre, compórtate.— Pide el Rey del inframundo.

Nico parpadea varias veces.

— No lo haré.— Murmuro.

Los esqueletos les prepararon ropa especial que parecía un disfraz.

También intentaron bañarlo, pero Nico se negó firmemente por qué ya era un niño grande. Adicionalmente pensó que esa gran bañera parecía un caldero, y no quería que los sirvientes esqueletos se lo comieran vivo.

Por lo que se bañó por su cuenta, como niño grande. Luego les pidió ayuda para vestirse por qué no sabía cómo ponerse la camisa de botones.

— Quiero que seas bueno con ella, su madre está algo desquiciada, pero le debo un favor.—Hades parlotea y tira de la mano de su hijo.— Así que debes ser caballeroso y servicial, no la hagas llorar ni le grites. Eso es todo.— Bufa.