Cuidaré tu espalda

01

Jungkook se preparaba para ir a dormir, ésta noche dormiría en la casa del castaño, en la misma habitación y en la misma cama, no era parte del trato que habían hecho anteriormente, Jungkook sabía que hoy era solo eso, dormir, después de todo habían acordado solo ser amigos, pero cuando observó la silueta del castaño no se pudo contener, aprovechando que éste se encontraba acostado de lado dándole la espalda se apresuró a desvestirse y se introdujo en la cama completamente desnudo, su acompañante vestía una camiseta y un bóxer ambos blancos, por lo que Jungkook podía notar la anatomía tan exquisita del hombre que tenía a su lado.

Sin perder más tiempo tomó la iniciativa, se pegó por completo al castaño, le abrazó desde atrás y jaló ligeramente de éste para que quedara boca arriba, una vez lo volteó se acomodó en su pecho y con la mano comenzó a acariciarle su abdomen sobre la ropa.

El castaño aún estaba despierto y pensó que esta acción era tierna, no sospechaba de las verdaderas intenciones del pelinegro así que con la mano que tenía junto a Jungkook la pasó sobre su espalda y también le acarició, notó que éste no traía camiseta, pero también sabía que Kook dormía solo con un bóxer y no le vio nada extraño.

Jungkook al sentir las caricias dulces que le proporcionaba el castaño comenzó a acariciarle más de lo que ya lo hacía, metió la mano por debajo de la camiseta de su compañero y siguió acariciando, pero ahora con algo más de pasión, le subió solo un poco la camiseta, lo suficiente para dejar su abdomen al descubierto, se deslizó suavemente hacia abajo hasta que su boca estuvo a la altura del ombligo del castaño, comenzó a besarle inocentemente, dejando ligeros besos que apenas rozaban su piel.

El castaño se tensó un poco, no se suponía que pasara nada romántico entre ellos, solo eran amigos y no era correcto seguir con esto, trató de detener a Jungkook -Kook que haces, ven acá arriba - dijo con su voz entre cortada, se estaba excitando con el roce de los labios del pelinegro y si seguían con aquel juego estaba seguro que terminarían follando y eso no lo podía permitir, trató de hacer al chico parar tomándole de un brazo le jaló para que se recostara cómo había estado antes, pero el pelinegro cayó encima suyo, quedando cara a cara, sus labios se rozaron brevemente, esa fue su perdición no se podía contener más, llevaba horas tratando de suprimir su deseo de poseer al pelinegro, eran solo amigos, se repetía una y otra vez, pero era más que obvio que Jungkook no quería ser solamente su amigo, notó la erección del pelinegro rozando sobre la suya propia, ambos estaban deseosos de algo más, tomó la nuca de Jungkook y le jaló hasta que se acercó a su rostro, cerró los ojos y comenzó a besarlo apasionadamente, con su lengua le follaba la boca al pelinegro, mientras hacía leves movimientos de cadera simulando embestidas, era un beso violento, lleno de pasión, lleno de un deseo que llevaba mucho tiempo latente, de pronto paró, separó al pelinegro y lo recostó a su lado - suficiente Kookie, ahora a dormir- le dijo creyendo que todo quedaría ahí.

Jungkook no quería parar, sin embargo se recostó al lado del castaño, tomó la mano de éste y se la llevó hasta su miembro - hyung acaso no te gusta lo que sientes - le dijo en apenas un susurro con la voz grave por la excitación, el castaño está igual o más excitado que este - Kook no podemos, solo amigos recuerdas- claro que Jungkook lo sabía bien, el mismo fue quien había propuesto aquella supuesta amistad, pero eso solo lo había dicho para no perder al castaño, y ahora que estaba ahí con él en la misma cama no dejaría que esta oportunidad pasara - de acuerdo, cierra los ojos, relájate, te haré un masaje para que puedas dormir bien, hyung - le dijo al castaño, era una oferta muy tentadora cómo para rechazarla, el castaño asintió y cerró los ojos, grave error el pelinegro solo le había tendido una trampa, le había tomado del bóxer y prácticamente se lo había hecho arrancado y ahora le estaba chupando su miembro, sentía cómo la lengua de Jungkook subía y bajaba chupando todo el largo de su extensión, entre jadeos le pidió que parara, pero el chico no lo hizo, en cambio introdujo todo el miembro ajeno en su cavidad bucal y ahora le succionaba cómo si este fuera la última Coca-Cola en el desierto, el castaño no pudo más, el pelinegro había ganado, le dejó que le complaciera un poco más, pero no lo suficiente como para llegar al orgasmo, cuando estuvo cerca le retiro y lo jaló de nuevo a su lado, solo que ahora Jungkook estaba de espaldas a él - mi turno bebé, acuéstate y relájate - le ordenó al pelinegro, lo tomó entre sus brazos y le abrazó con fuerza pero sin llegar a lastimarlo, comenzó a besarle en la mejilla y fue dándole besos lascivos por todo el cuello, succionando con fuerza hasta dejarle una hermosa marca oscura, deslizó su mano sobre la del pelinegro y entrelazó los dedos con él, luego le sujetó contra la cama con fuerza y con la otra mano alineó su duro y grueso miembro con la entrada del chico, le dio ligeras embestidas pero solo introdujo el glande, Jungkook dio ligeros gemidos de placer, el castaño continuó con suaves embestidas, no quería ser brusco con el pelinegro -por favor más, dame más duro - le suplicó Jungkook con voz entrecortada y lágrimas en sus ojos, hacía años que no se sentía así.