—¿Dónde están, Chiara? —Denna le pregunta lentamente.
Chiara sacudió la cabeza como para decir que no sabía.
—Mierda, sabía que esto era una mala idea. —la pelinegra empieza a sollozar y Denna la abraza para intentar consolarla.—Shh, Keeks, está bien. La encontraremos sana y salva. Todo estará bien —, le dice, pero la inglesa sigue sacudiendo la cabeza.
—¿Deberíamos llamar a la policía? —pregunta Alex, también preocupado por su amiga.—Sí, sí, hazlo —la rubia se aparta para agarrar su teléfono y enviar un mensaje a las otras dos chicas, con la mano todavía en el hombro de Chiara y esta abrazándola por la cintura, aún llorando.
Pasaron unos minutos, Suzete y Bea salieron a encontrarse con ellas, la preocupación y el miedo evidentes en sus rostros. Bea caminando de un lado a otro, pasándose la mano por el cabello con frustración. Su novio, Álvaro, la abrazaba para intentar calmarla.
—¡No podemos simplemente esperar aquí! —grita Suzete, impaciente.—¿Dónde coño está la policía cuando se la necesita? —pregunta frustrada.
—Tenemos que encontrarla —, dice Denna.
—Creo que sé dónde podría estar, pero no estoy muy seguro, —dice Alex.—En su casa del árbol, el lugar donde solían quedar antes, —dice inseguro.—Solíamos ser amigos cercanos y él me contaba muchas cosas —, les dice, encogiéndose de hombros.
—¿Dónde está eso? —pregunta su novia, frustrada y preocupada, con las emociones mezcladas.
—En su patio trasero, bebé —dice Alex como si fuera obvio.
—Claro... —dice Denna, y todos corren hacia la camioneta de Álvaro.
Por suerte, nadie estaba borracho todavía, así que el chico condujo hacia donde Lucas y Violeta podrían estar.
Solo deseaban que estuviera a salvo.
***
Los chicos estaban ahora de pie en el inquietantemente silencioso vecindario, en el porche de Lucas, con confusión grabada en sus rostros.
—Nadie parece estar aquí —, dice Denna, frunciendo profundamente el ceño y escaneando la casa una vez más en busca de cualquier señal de otra alma viviente además de ellos.
—Deberían estar... —, murmura Suzete, poniéndose de puntillas y mirando alrededor como si eso pudiera ayudarla a encontrar a su amiga.
Chiara está detrás de los demás, buscando a la pelirroja de ojos hipnotizantes. Sin embargo, no encontró nada más que casas y árboles.
Camina hacia el patio trasero protegido por cercas, mirando hacia el grupo para ver si alguien la estaba observando antes de levantar torpemente su cuerpo con ambos brazos para trepar la cerca, sin importarle si se caía y se lastimaba. Gruñó de dolor cuando su pie resbaló contra la madera, lo que hizo que su cuerpo cayera al suelo con un golpe sordo. La pelinegra miró al grupo una vez más antes de levantarse, buscando algo que pudiera ayudarla, y una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios cuando vio un bote de basura, una idea apareció en su mente.
La chica movió silenciosamente el objeto contra la cerca y colocó cuidadosamente ambos pies encima, antes de finalmente saltar al otro lado de la cerca con un suave golpe de sus pies y una sonrisa de victoria en sus labios.
La inglesa mira alrededor y ve el árbol casi en el centro del patio, con escalofríos recorriendo sus brazos. La única luz que iluminaba el lugar era la luna, creando una gran sombra del árbol y un aura espeluznante en esa área particular. Parecía bastante viejo y deteriorado, como si nadie hubiera estado en ese lugar durante mucho tiempo.
ESTÁS LEYENDO
Taciturno | kivi (fic)
Fanfiction¿Te enamorarías de una persona muda? Chiara Oliver es una chica que siempre ha tenido dificultades al hablar debido al trastorno que padece desde que era pequeña. La acosaban por ello y la insultaban. Avergonzada, Chiara decidió no hablar en públic...