jugando con el corazón ( matienzo)

epilogo

El Comienzo de una Nueva Jugada

El día de la boda de Enzo y Matías amaneció radiante y lleno de promesas. Habían elegido un lugar especial para la ceremonia: el campo de fútbol donde alguna vez se enfrentaron como rivales y donde finalmente encontraron el amor y la redención. Los preparativos estaban en marcha desde temprano, con flores adornando el perímetro del campo y una pasarela que conducía al altar improvisado en el centro del terreno.

Familiares, amigos y compañeros de equipo se reunieron alrededor, llenando las gradas con sus sonrisas y sus mejores deseos. El ambiente estaba cargado de emoción y anticipación mientras todos esperaban la llegada de los novios.

Enzo, vestido con un elegante traje oscuro, esperaba nervioso junto al altar. Su corazón latía con fuerza, no solo por los votos que estaba a punto de hacer, sino también por la profunda emoción de casarse con el amor de su vida en el lugar que simbolizaba tanto para ellos.

Matías caminó por la pasarela con elegancia, radiando una felicidad que iluminaba su rostro. Llevaba un traje claro que contrastaba con su piel bronceada y sus ojos brillaban con el amor y la gratitud por estar allí, listo para unirse a Enzo en el vínculo sagrado del matrimonio.

El pastor, un amigo cercano de la pareja, comenzó la ceremonia con palabras de bendición y amor. Habló sobre la fuerza de su relación, sobre cómo habían superado desafíos y encontrado la verdad en el otro. Habló de la belleza del amor que floreció en un campo de competencia y se transformó en algo más profundo y significativo.

Enzo y Matías intercambiaron votos llenos de promesas y esperanzas para el futuro. Prometieron amarse y apoyarse mutuamente en todas las circunstancias, recordando los momentos difíciles que habían superado y mirando hacia adelante con optimismo y determinación. Sus palabras resonaron en los corazones de todos los presentes, capturando la esencia pura y sincera de su amor.

Después de que se intercambiaron los anillos, se besaron con ternura y celebraron su unión con aplausos y alegría. Luego, mientras el sol comenzaba a ponerse sobre el horizonte, todos se dirigieron hacia las gradas para la recepción.

El campo de fútbol se transformó en un escenario festivo, con mesas cubiertas de manteles blancos y decoraciones elegantes. Luces parpadeantes colgaban sobre la pista de baile improvisada, donde los invitados comenzaron a bailar al ritmo de la música alegre y los aplausos llenaban el aire.

Durante la cena, los amigos más cercanos de Enzo y Matías se levantaron para brindar. Recordaron momentos compartidos, anécdotas divertidas y momentos emocionantes que habían presenciado en la evolución de la relación de la pareja. Expresaron su admiración por la valentía y el amor que Enzo y Matías demostraron a lo largo de su viaje juntos.

En un momento emotivo, el capitán del equipo de Enzo tomó la palabra. Levantó su copa en honor a los recién casados ​​y habló sobre la inspiración que habían sido para todos en el equipo. Reconoció cómo su amor había trascendido los límites del campo de fútbol y unido a dos equipos rivales en un espíritu de respeto y camaradería renovados.

Después de las palabras de los amigos y familiares, Enzo y Matías tomaron el centro del campo de fútbol una vez más, esta vez para su primer baile como marido y mujer. Bailaron bajo el cielo estrellado, envueltos en el amor y la alegría de estar juntos en este día especial.

A medida que la noche avanzaba y los invitados disfrutaban de la celebración, Enzo y Matías se encontraron a solas en un rincón tranquilo del campo. Se miraron con amor y gratitud, recordando el viaje que los había llevado hasta este momento mágico.

"¿Puedes creer que estamos aquí?" preguntó Matías, su voz llena de asombro y felicidad.

Enzo sonrió, acariciando suavemente la mejilla de Matías. "No podría imaginar estar en ningún otro lugar que no fuera contigo, Mati."

Juntos, miraron hacia el campo de fútbol iluminado por las luces de la fiesta, donde su historia de amor había comenzado como una rivalidad y se había transformado en una conexión eterna. Sabían que enfrentarían desafíos en el camino, pero con el amor y el apoyo mutuo, estaban listos para cualquier cosa que el futuro les deparara.

Y así, mientras la celebración continuaba a su alrededor, Enzo y Matías bailaron juntos bajo las estrellas, marcando el comienzo de una nueva jugada en su vida juntos.