🥀 ꎭꀤ ꈤꀤꈤ̃ꏂꋪꂦ ᖘꏂꋪ꒦ꏂꋪ꓄ꀤꀷꂦ 🥀𝙰𝚔𝚊𝚁𝚎𝚗/𝙰𝚔𝚊𝙺𝚢𝚘

Capítulo 10_ Noche De Películas 2/2

Eran las seis y media de la tarde, y todo estaba en orden, Kyojuro estaba en su ducha, se mostraba recostado en su tina, mientras que enjabonaba cada parte de su cuerpo, el olor que emitía era dulce, el rubio veía con silencio todo, era raro, su situación era rara, todo es RARO. Ahora pensaba en lo que pasaría mañana, tenía nervios, muchos nervios, quizás Sanemi le pediría que se acueste con el, y Kyojuro no aceptaría, pero si pasara eso, obviamente el albino haría una rabieta.

Suspiro con tristeza, botando un poco la espuma que estaba en la punta de su nariz, observó la hora en su pared, y se dio cuenta que ya estaba un buen rato remojado en la bañera, así que antes de salir se lavo bien, y se seco con la toalla blanca qué había en su ducha, se sentó frente a su espejo, y tomando su peinilla arreglo su cabello quien ahora estaba seco, no era necesario que se aplique distintos productos, pues su cabello ya era bonito, de igual forma su rostro. Usualmente cuando salía solo se colocaba un poco de rubor y nada más, pero en casa y escuela se mostraba tan natural.

Una ves listo, decidió pasar por la habitación de Senjuro, su hermanito se encontraba guardando sus cosas, cuando noto a Kyojuro se levantó contento, pues ya era hora de ver su película- Ya termine de practicar hermano- Aclaro el menor, para luego salir corriendo para abajo- Voy poniendo la película- con eso se retiro, Kyojuro rio bajito, le gusta mucho ver a su hermanito feliz.

Se dirigió a la cocina para preparar algo, quizás unas palomitas serían lo mejor, busco por la cocina, pero no había, noto el pequeño espacio que estaba mas arribo y suspiro, no alcanza pero igual trataría, se puso en puntillas para alcanzar aquella puerta pero cayo, bueno, iba a caer, si no fuera por las fuertes manos del quien lo sujetaba, volteo a ver y era el joven Akaza.

-J-joven Akaz- No pudo terminar de hablar ya que el mayor se encontraba disgustado con esto.

-Si necesitas algo, solo comunicamelo- En su voz era notorio el enojo, algo que incómodo al rubio, el no era ningún niño para que le solucionen todo.

-Disculpe joven Akaza, pero no soy ningún niño para que busquen las cosas por mi, yo mismo puedo hacerlo- La frase del de cabellera rosada hizo enfadar un poco al rubio, que a pesar de ser más pequeño que el Alfa no le tenía miedo responder, así que se soltó de su agarre, haciendo ver que podía solo- Si me disculpa.

El Rengoku camino un poco hasta traer una banquita, donde lo utilizo como herramienta para poder alcanzar lo que quería, Akaza le molestaba que quisiera hacer las cosas por su cuenta, ya que se supone que el deberia hacerlas por el. Pero su enojo bajo cuando noto como el menor subía y lucia su trasero,¿Por que carajos le está haciendo esto?. Kyojuro ahora solo tocaba el lugar hasta que tomo el frasco que lo contenía, acabando así con el show gratis que le estaba brindando a su niñero.

Ahora se dirigió a la cocina, donde saco una olla para poder prepararlo, ahora el siguiente paso.

-"¿Que más se tenía que hacer? - El rubio estaba frente a la olla, y tenía el frasco en manos, siendo honestos acá, Kyojuro no sabía nada de cocina, podría ser el mejor en su colegio pero en la cocina era lo opuesto, sintiendo un poco de vergüenza, Akaza espero pacientemente, no pudo evitar reír en bajo,¿de verdad no sabía hacer eso?, pero seguiría esperando hasta que el rubio lo llame.

Kyojuro no se quedaría atrás, empezó a cocinar, sin saber exactamente lo que hacía, pero su punto era que lo hacía, no iba a pedir ayuda después de rechazarlo, pasaron 5 minutos, y los saco, una vez colocado en un tazón, decidió probar uno, cuando lo hizo su rostro fue suficiente, sabía asqueroso.

Con pena observó al de atrás quien tenía una sonrisa en su rostro, le parecía gracioso ver como el mismo lo buscaba-¿Podría ayudarme?, por favor... - Un poco tierno para Akaza quien se levantó, el rubio iba a salir pero fue acorralado por los brazos del mayor, quienes estaban sujetas en el mármol de la cocina, al rubio se le aceleró el corazón, y su rostro se teñia en rojo.