Yunkai viajaba a París cada vez que podía: sus horarios eran más flexibles que los de Jiang, y además tenía una asistente; el hotel funcionaba tan bien, que ya no podía hacer su trabajo solo. Eso le permitía hacerse una escapada cuando las cosas se calmaban un poco.
-Ger, esta tarde me voy a París. Volveré pasado mañana a primera hora. Te dejo a cargo.
-Si, Kai, ve tranquilo y envíale mis saludos a Jiang. -Germaine, o Ger como la llamaba Yunkai, era una buena asistente; él podía estar seguro de que si se iba, a su regreso no iba a encontrarse con ninguna sorpresa.
Nunca se había comprado un auto; con la motocicleta le alcanzaba y le sobraba para los cortos trayectos que hacía en Calais. Pero ir a París era otra cosa, y para eso tenía el automóvil de su madre, extraña adquisición con la que ella se había aparecido un día: pequeño, económico, y de un color amarillo que se veía desde lejos. Su sobrinos lo habían apodado "El huevo", y Jiang sufrió un ataque de risa la primera vez que vio a su pareja llegar en ese ridículo aparato. YunKai se reía con él: estaba más allá de la vergüenza, y le encantaba responderle a los que le tocaban bocina. A veces llegaba a París más temprano, dejaba El huevo estacionado frente al apartamento de Jiang y se iba a buscarlo. Hacía el camino apurado por llegar al restaurante. A la vuelta era distinto: caminaba sin prisas, disfrutando con él de los detalles que le mostraba.
Jiang sabía que su pareja tenía una asistente, pero no le dio importancia al asunto hasta el día que fue al hotel y la vio: Ger era una chica joven y hermosa, casi tan alta como él y con un cabello rojo que le llegaba a la cintura. Naturalmente se puso celoso, y ante el comentario de Kai diciéndole que lo extrañaba a pesar de lo ocupado que estaba, le respondió que cómo hacía para extrañarlo con la bella asistente que tenía al lado.
-¿Ger? -YunKai arrugó la nariz, como si se hubiera acordado de algo muy horrible-. ¡Es muy fea...! -Antes de que Jiang protestara, acotó-, ...y tiene novio.
-En otras épocas eso no te habría frenado.
-¿Que fuera fea o que tuviera novio?
-¡Sigues siendo el mismo de siempre, Kai! ¡Después te quejas cuando me enojo! Ger es muy linda...
-No es mi tipo. -YunKai fingió indignación. Pero a duras penas contuvo la risa.
La pacífica caminata se transformó en una andanada de reproches de parte del chino, y unas sonoras carcajadas del francés, que parecían rebotar en las antiguas paredes de piedra.
***
Jiang reflexionó en la propuesta de la señora Angeline para abrir un restaurante en el hotel de Calais. En sus charlas telefónicas la mujer le aseguró que iban a ser socios a partes iguales, pero que las decisiones con respecto a la cocina iban a ser suyas. Jiang quería armar un restaurante chino en el que pudiera experimentar con algunas recetas típicas de su país, que no figuraban en la carta del restaurante parisino. Se entusiasmó de a poco, sobre todo con la idea de vivir con YunKai, que también se llenó de ilusión y le prometió que iba a buscar el mejor apartamento de Calais para los dos, un lugar donde no iba a extrañar la vista de París desde su balcón.
***
Yunkai visitó un montón de apartamentos, pero ninguno le gustaba: algunos tenían un balcón demasiado pequeño, otros no tenían la vista al mar que él quería. Al final uno le pareció perfecto, y llevó a Jiang para que lo aprobara.
El apartamento era antiguo, aunque estaba remodelado. Tenía habitaciones grandes y ventanas por las que entraba el sol. Yunkai lo había elegido por la vista desde el balcón, un sector de playa y una antigua escollera de piedras, cercana al puerto. Por el mar se veían pasar desde pequeños botes de pescadores y ferrys, hasta lujosos cruceros. Jiang pensó que esa vista era infinitamente mejor que los árboles que cubrían las calles de París, y se fijó en el tono celeste del mar, interrumpido por un gran barco que pasaba con lentitud rumbo al puerto. Suspiró, y Yunkai no pudo evitar su lado bromista:
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Los enemigos (Finalista Wattys 2024)
RomantikUn francés pansexual y de espíritu libre, capaz de hacer cualquier cosa cuando quiere conquistar a alguien, se encuentra con un chino rígido, con novia y apegado a las reglas. Entre ellos va a nacer una historia de amor imposible, por un secreto que...