Entre castigo y compañías

Capítulo 6

POV: Toritsuka

Saiko seguía aferrado a el cuello de la estatua como si su vida dependiera de ello, y en cierto modo lo hace. En cuanto Kuboyasu se marchó por la puerta me giré para hablar con Saiko.

-¡Oye tú! Eh..niño- ¿Que se habla con un niño tío? Es más..con uno pijo. Me da la sensación de que va a juzgar incluso la forma en la que respiro…rápido queda bien, di algo inteligente.- ¡Democracia!- lo he clavado.

-Ok…tengo miedo- Dijo Saiko mirando hacia otro lado- ¿De quién ha sido la gran idea de dejarme solo con este imbécil?Seguro ha sido el tonto de Kuboyasu…- Dijo haciendo un puchero con los labios

-¡Por lo menos yo no me he quedado encalado en una estatua!- Respondí replicando

-¡¿Perdona?! ¡Cuando baje te quitaré los pocos derechos que te quedan plebeyo!- Lo peor era que Saiko era capaz de hacerlo

-Bueno ¡Por lo menos tengo algo propio niño de papá!- Está claro que esa frase hizo enfadar a Saiko, que, aunque fuera verdad, no lo aceptaba.

-¡Por lo menos tengo papá!-Dijo inflando los mofletes de forma infantil

-Hijo de puta!-Le dije ya enfadado, está conversación no iba a ninguna parte, y si no me daba prisa no podría convencer a Saiko de ayudarme a entretener a Kuboyasu.- Rectifico, mira, tenemos nuestras diferencias…bastantes de ellas…pero ahora mismo necesito tu ayuda para distraer a Kuboyasu.-

-Mira que siempre estoy dispuesto a hacerle alguna broma a Kuboyasu, pero por ser tú te voy a pedir (o demandar) que me des rápido unas razones para convencerme o le diré a mi padre que planeas algo que podría atentar contra la seguridad del templo.-

-Bueno, mira, conocí a alguien que parece tener más que ver con nosotros de lo que te esperas y…-para este punto creo que se está aburriendo, tendré que usar mis tácticas de convicción-
¿Y que hay de lo mucho que se enfadaría Aren cuando se entere de que…- Saiko interrumpió.

-Enfadar a Aren, me vale, dime qué hay que hacer ¡Y date prisa!- Demandó con desdén

-Muy bien, la cosa es simple, cuando Kuboyasu venga de nuevo con tu padre para ayudarte a bajar de la estatua, tú simplemente tienes que entretenerle lo máximo posible y quedarte pegado a él el mayor rato posible, trato?- Explique de forma clara y comprensible para un niño de 4 años

-No te preocupes, aunque no puedo entretener a mi padre lo bastante como para que decida hacerme caso, he aprendido cómo mantener a alguien aferrado a mí.-Dijo sonriendo como si fuera completamente normal

-Ostias, dices dos frases y no sé cuál es peor que la otra, pero entonces, lo harás?- Sinceramente no quiero meterme en el tema de que el padre de Saiko deja a su hijo de 4 años al cuidado de un niño de 6, pero bueno, pues quien soy yo para juzgar.

-Si, pesado- Contestó

Y con eso me largué de allí tan rápido como pude antes de que llegara Kuboyasu con el padre de Saiko. Y en la salida del templo me encontré con Jairo y Nendo para por fin ir al bosque a buscar al niño de pelo rosa sin ninguna interrupción.