Cris Jr, Mejor conocido comó el hijo de Cr7, Vive en Arabia, sin pensar que un día llegaría una chica, Quien le cambíaria la vida entera, odiandola y Amandola. Cris no es de muchas palabras, Y menos con gente nueva, pues, su padre le enseño al no co...
El día siguiente en la escuela comenzó como cualquier otro. Desperté temprano, me vestí y bajé a desayunar.
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Mamá me dio un abrazo y un beso en la mejilla antes de que saliera corriendo para alcanzar el autobús escolar.
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En la escuela, todo parecía normal. Nawaf, Mekky, Jude y Lauri me saludaron con entusiasmo y charlamos sobre nuestras clases mientras caminábamos hacia el aula. Durante la primera clase, me concentré en tomar notas, pero no pude evitar pensar en Cris y cómo su actitud hacia mí estaba cambiando lentamente.
Durante el recreo, los chicos me llevaron al campo de fútbol para practicar un poco antes de las pruebas del equipo la próxima semana. Cris estaba allí, como siempre, pero esta vez se acercó más y participó activamente en nuestra conversación.
"¿Estás lista para las pruebas?" me preguntó, su tono seco pero con un matiz de interés genuino.
"Sí, he estado practicando mucho," respondí, tratando de mantener mi voz firme.
Jugamos un partido improvisado y, aunque Cris seguía siendo un poco seco conmigo, noté que comenzaba a confiar más en mí como compañera de equipo. Cada vez que le pasaba el balón, él lo recibía con una habilidad impresionante y me devolvía la jugada con precisión.
Después del partido, nos sentamos en la hierba, recuperando el aliento. Lauri bromeaba con Mekky y Jude, mientras Nawaf se reía de sus ocurrencias. Cris, sentado a mi lado, no decía mucho, pero su presencia era notable.
"¿Te estás adaptando bien a la escuela?" me preguntó de repente.
"Sí, mejor de lo que esperaba," respondí, sorprendida por su interés. "Gracias por preguntar."
Cris asintió, y aunque no dijo más, sentí que nuestra amistad estaba comenzando a formarse, aunque fuera de manera lenta y complicada.
Más tarde, durante la clase de historia, Cris y yo fuimos asignados como compañeros de proyecto. Teníamos que investigar sobre la historia de Arabia y presentar un informe detallado. A pesar de la actitud seca de Cris, me emocionaba la idea de trabajar con él y conocerlo mejor.
Después de la escuela, nos reunimos en la biblioteca para empezar a trabajar en el proyecto. Cris llegó puntual y se sentó frente a mí, sacando sus libros y cuadernos.
"Deberíamos empezar por dividir las tareas," dijo sin rodeos.
"De acuerdo," respondí, tratando de mantener una actitud profesional. "Puedo investigar sobre los inicios de la civilización en Arabia y tú podrías encargarte de la era moderna."
Cris asintió. "Me parece bien."
Trabajamos en silencio por un rato, cada uno enfocado en sus tareas. De vez en cuando, levantaba la vista y lo veía concentrado, sus cejas fruncidas mientras leía. A pesar de su seriedad, había algo en su dedicación que me impresionaba.
"¿Qué piensas de la historia de Arabia hasta ahora?" le pregunté, intentando romper el hielo.
"Es fascinante," respondió, sin levantar la vista de su libro. "Hay mucha riqueza cultural e histórica que mucha gente desconoce."
"Sí, estoy de acuerdo," dije, sonriendo. "Estoy aprendiendo mucho."
A medida que pasaban los días, Cris y yo seguimos trabajando juntos en el proyecto. Nuestra relación era una mezcla de amistad y tensión. Había momentos en los que nos entendíamos perfectamente, y otros en los que chocábamos debido a nuestras personalidades tan diferentes.
Una tarde, mientras revisábamos nuestras notas, Cris me miró fijamente. "Eres muy persistente," dijo de repente.
"¿Eso es algo bueno?" pregunté, levantando una ceja.
"Sí," respondió, esbozando una pequeña sonrisa. "Es algo bueno."
Esa noche, al llegar a casa, mamá me preguntó cómo me iba con Cris. "Es complicado," le dije, suspirando. "A veces parece que estamos en sintonía y otras veces, es como si chocáramos."
"Eso suena a una amistad real," dijo mamá, sonriendo.
"Las mejores amistades a menudo tienen sus altibajos."
Reflexioné sobre sus palabras mientras subía a mi habitación. Tenía razón. A pesar de los momentos de tensión, estaba comenzando a valorar la complejidad de mi relación con Cris.
