Eres Tú. Ft: Imagina con Cristiano Junior

Qué serio eres.



Cumpleaños de Erika

Un año después, mis padres y yo estábamos viviendo en otro país debido al trabajo de mi padre.

Extrañaba a mis amigos y a Cris, aunque hablábamos frecuentemente, no era lo mismo que tenerlo cerca.

En el día de mi cumpleaños, me sentía un poco nostálgica.

Había planeado una pequeña fiesta de pijamas con algunas amigas nuevas, pero sabía que no sería lo mismo sin Cris y mis amigos de antes.

La Sorpresa

Estaba en mi habitación, terminando de prepararme para la fiesta, cuando escuché un golpe en la puerta. Mi madre me llamó desde la sala.

-Erika, alguien vino a verte -dijo, con una sonrisa en su rostro.

Bajé corriendo las escaleras, y al llegar a la sala, no podía creer lo que veía. Ahí estaba Cris, con una gran sonrisa y sosteniendo un ramo de flores.



-¡Cris! ¿Qué estás haciendo aquí? -exclamé, corriendo hacia él para abrazarlo.

-Feliz cumpleaños, Erika. No podía dejar de estar aquí en tu día especial -dijo, entregándome las flores.

Sentí una ola de felicidad y emoción. No podía creer que Cris hubiera viajado hasta aquí solo para verme.

La Fiesta de Pijamas



Esa noche, durante la fiesta de pijamas, mis amigas y yo nos divertimos mucho. Jugamos juegos, vimos películas y compartimos historias. Pero la mejor parte de la noche fue cuando Cris y yo tuvimos un momento a solas.

-Erika, ¿podemos hablar? -dijo Cris, con un tono serio pero cariñoso.

Nos sentamos en el balcón, bajo las estrellas. La brisa era suave y la noche tranquila.



¿Qué pasa, Cris? -pregunté, curiosa.

-Erika, hay algo que necesito decirte desde hace mucho tiempo -comenzó, tomando una respiración profunda-. Desde que nos conocimos, has sido una de las personas más importantes en mi vida. Y durante este último año, me he dado cuenta de que mis sentimientos por ti van más allá de la amistad.

Me quedé en silencio, mi corazón latiendo con fuerza.

-Te he extrañado mucho, y venir aquí me ha hecho darme cuenta de lo mucho que te quiero -continuó-. Erika, estoy enamorado de ti. Quiero saber si sientes lo mismo.

Sentí una mezcla de emociones, pero sobre todo una gran felicidad.

-Cris, yo también te quiero. Este tiempo lejos de ti me ha hecho darme cuenta de cuánto significas para mí -dije, con una sonrisa-. Sí, siento lo mismo por ti.

Cris sonrió, y en ese momento, sentí una conexión aún más profunda entre nosotros.

-Entonces, ¿quieres ser mi novia? -preguntó, sus ojos brillando de esperanza.

-Sí, Cris, quiero ser tu novia -respondí, sintiendo una felicidad indescriptible.

Nos abrazamos y nos dimos un beso bajo las estrellas, sabiendo que este era solo el comienzo de algo maravilloso.

Al Día Siguiente

A la mañana siguiente, desperté con una sensación de felicidad indescriptible. Tener a Cris a mi lado y saber que compartíamos los mismos sentimientos hacía que todo se sintiera perfecto. Mis amigas aún dormían en la sala.