Capitulo 18.5 parte 2

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Era Daniel, el único bastardo al que Johnny no querría ver. En cuánto Johnny se volteó, sus miradas se encontraron, Daniel se sorprendió enormemente y al parecer no era el único.

Daniel:-Johnny Lawrence?
*No puede ser, por qué me lo tengo que encontrar ahora!?, pensó con premura

Johnny: Hey! LaRusso, no te preocupes, yo me largo

Daniel:-No, espera, tiene más de 30 años que no nos vemos, y eso es lo único que se te ocurre decir? Johnny, aunque sea acompáñame adentro porfavor

Y siguiendo órdenes, Johnny sorprendentemente entró con Daniel. El taller que el castaño manejaba se veía lujoso y contaba con un gran espacio, Lawrence sólo se limitaba a mirar el lugar. Pronto, la ex-pareja se fue a una de las oficinas de LaRusso para platicar.

Daniel:-Hey Johnny, wow, no te había visto bien, al parecer no has cambiado-No lo quería admitir, todavía lo consideraba atractivo en muchos sentidos

Johnny:-Tú tampoco cambiaste nada hombre-Exclamó con muy poco entusiasmo

Daniel:-¿Cómo te ha ido?, dios, realmente ha pasado mucho tiempo

Johnny:-Me va bien

Daniel:-Que bueno escucharlo, justo ayer hablábamos sobre ti en la cena familiar, todavía tienes esos ojos tan azules!

Johnny:- Cena familiar? Ya tienes familia?-Lo mencionó como una forma de seguir la conversación y acabarla, pero la noticia le desagradó

Daniel:-Oh sí, se podría decir que ya hice mi vida jejeje-En ese momento la conversación con cortó porque a Daniel lo llamaron para una junta, Johnny aprovechó para intentar huir

Daniel:-Espera Johnny!-No pudo alcanzarlo, el rubio fue más rápido

Johnny:¡Sólo dime cuándo arreglen mi carro!-Gritó

Ver a Johnny no era nuevo para Daniel, lo que si fue nuevo fue verlo ya crecido, con esa barba que ya denotaba su edad y que de alguna manera traía un aura de madurez consigo. Sí, lo odiaba por abandonarlo, por hacerle creer que todo aquel "cambio" que tuvo durante la adolescencia se habría desvanecido, por romperle el corazón, el cual en todo su ser, aún palpitaba.

Tres semanas pasaron, y porfin el coche de Johnny quedó arreglado. Entre las novedades, Johnny habría tenido un ataque de nostalgia que le harían reabrir el antiguo Cobra Kai dojo, claro, también porque Miguel Díaz era ahora su protegido y su más reciente estudiante. Daniel decidió que era el momento de encarar a Johnny, así que lo investigó para poder ir con él a llevarle el auto en persona.

En el camino, Daniel se enteró de la noticia, quedó pasmado en cuanto vió el nuevo cartel con esa serpiente que le aterraba desde hace 3 décadas y pensando en todo el daño que provocaron Terry Silver y John Kreese. Aún así, con un nudo en la garganta, decidió retomar el camino hacia la casa de Lawrence y de paso preguntar por lo sucedido.

Después de 15 minutos manejando, Daniel finalmente llegó a los departamentos de Reseda, ahora un poco degradados. Estaba nervioso, ya que si bien iba bien decidido, todavía no sabía que le iba a decir con respecto a lo que pasó entre ellos.

Daniel se aproxima, tocando repetidas veces

Johnny:-¿Pero qué carajo? ¡Ya les dije que voy a pagar el mes que viene!-En eso, ve a Daniel al pie de la puerta-Ahhh, eres tú, lo que me faltaba

Daniel:-Yo tampoco quería verte Johnny, sólo vine a dejarte el carro, y por la paga no te preocupes, fue cortesía de la casa

Johnny en un intento repentino, abre completamente la puerta y jalando al contrario del brazo, lo empieza a besar con pasión. Esos labios, oh, esos malditos labios que tanto anhelaba, nada parecía importar, solo quería reclamar lo que era suyo.

Amigos, enemigos...o algo más?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora