Siete

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Capítulo siete

¿Por qué me besaste?

Después de la incómoda escena que armó Hera, pasaron los días y Jae Yi decidió disculparse con Kang por el trato de su padre. En medio de las disculpas, el chico le preguntó a la mujer finalmente sobre el motivo de terminar con Ri An y si acaso todavía tenía sentimientos por el chico. La chica solo contestó que no debía cruzar la línea de usarse mutuamente, además le dejo en claro que no eran amigos y que ambos solo obtenían beneficio del rumor que circulaba en Jooshin, por lo que Kang Ha no obtuvo la respuesta que quería saber.

Por otro lado, Hera se acercó a Ri An después del incidente. Quería que la gente viera su cercanía con el chico para obtener beneficios. Después de todo, más allá de la amistad y el amor, era más importante conseguir contactos y poder. No podías quedarte en un estanque lleno de peces a seguir nadando en círculos; tenías que llegar a la cima del mundo y ser el pez que se comiera a los de abajo.

Por otra parte, un video de un usuario conocido llegó al teléfono de Kang Ha, recordándole no dejarse llevar por sentimientos como la empatía y el amor. Sumergido en sus pensamientos, la voz de alguien lo interrumpió: era Hera. La persona que, el día del evento de padres, lo usó para humillar a Jae Yi. La chica era bonita, pero al igual que la mayoría, probablemente no le importaba nada ni nadie. La estudiante le dijo que él era el causante de avergonzar a su amiga, no ella. Además, comenzó a hablar sin saberlo sobre el hermano de Kang y cómo terminó muerto. Le dijo que, al igual que él, ese chico era cercano a Jae y que no termino nada bien.

— ¿El chico que murió por culpa de Ri An?

— ¿De qué hablas? Ri An no dañaría su reputación de heredero por un simple becado. La persona que tiene la culpa es tu amiga Jae Yi. Siempre que personas como tú, se acercan a nosotros, termina mal, y a nosotros no nos pasa nada. Toma lo que te digo como un consejo, cachorro — terminó de decir Hera. Sus palabras confundieron a Kang Ha; tenía datos, pero ninguno de ellos se conectaba para darle sentido a la muerte de su hermano.

De repente, no encontró sentido a nada y se quedó a la deriva. De todo el rompecabezas que tenía que armar, ninguna pieza encajó en el lugar que lo había puesto.

En medio de clases, Jae Yi se levantó inesperadamente. Kang Ha se levantó de su lugar y la siguió. Aquella chica sabía algo más; ella podía tener las respuestas que buscaba.

Sin embargo, antes de alcanzarla, Ri An detuvo el andar de Kang.

— ¿Qué es lo que quieres de nosotros? — reclama Ri An.

— ¿Vas detrás de ella y juegas conmigo? — pregunta el chico, parecía más enojado por no ser a quien Kang Ha persigue.

— ¿Jugar contigo? ¿De qué hablas? — responde Kang, sin saber a qué se refería exactamente su compañero.

— ¿Por qué me besaste? — aquella pregunta que llevaba bastante tiempo en la mente de Kim por fin salió de sus labios.

— ¿Por qué pareces tan interesado en ella? — y las dudas siguen saliendo de los labios de Ri An.

— ¿Por qué no te das cuenta de que alteras el ambiente? Desde que llegaste, todo sale mal.

— Vaya, por fin dejas salir todas tus dudas, Ri An — la voz de Kang Ha toma un tono más serio y enfrenta la mirada llena de dudas del chico de corbata granate.

— Te besé porque quería saber qué sería capaz de hacerme el gran Kim Ri An si lo sacaba de su zona de confort. La verdad nunca pensé que me corresponderías; de hecho, esperaba un golpe o algo así — lo que responde Kang hace enojar a Kim, pues esa razón tan vacía no era lo que quería escuchar.

La cima de la pirámideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora